Colifer: ¿DESTINO O CASUALIDAD? [TERMINADA]

Capítulo 5

Cuando la cena termina, Ginny, Lana, Emilie, Meghan y yo decidimos continuar la fiesta en un bar musical cercano al set, donde nos lleva Josh con su coche y después se marcha.

Entramos y vamos directas a la barra, donde cada una pide su bebida.

-Bueno, que tienes para contarnos, Jen?- Dice Lana

-Es verdad, tienes que explicarnoslo todo- Añade Emilie

-Espera,¿Que me he perdido?

-Meghan, no te has dado cuenta que Jen ha aparecido sola...?-Aclara Ginny

-¡Es cierto!¿Y Sebastián...?

Les explico toda la historia del aeropuerto, como Colin me tiró un café y Sebastián se enfadó y se fue, que luego le grité y Colin seguía allí, lo de el fan y el nombre falso...

-¿En serio?- dicen casi al unísono, perplejas.

-Sí, el problema es que ahora no se que hacer. ¿Estamos juntos? ¿No lo estamos?

-¿Y que más da eso? ¡Te abandonó en el aeropuerto!

-Lo sé, Lana. Pero él es así, no puedo...

-Creo que deberías dejarlo definitivamente, no te hace ningún bien estar con él. Hay muchos hombres que se morirían por estar contigo y que valen mucho más que él...- Añade Ginny

-Como Colin, por ejemplo...

-¡Meghan!- dice Emilie reprimiendo una sonrisa

-Quizá tengáis razón- veo que Meghan sonríe ampliamente- sobre lo de dejarlo, no sobre lo de Colin. Tan solo somos amigos.

- Hagas lo que hagas no dudes en que te apoyaremos- dice Meghan abrazándome

Pasamos el resto de la noche bailando hasta que no podemos más y decidimos regresar, y para ello, pedimos un taxi.

Entro a mi tráiler con los tacones en una mano y el bolso en la otra. Cuando al fin consigo abrir la puerta, me doy una ducha, me pongo el pijama y me acuesto.

A pesar de que intento dormirme con todas mis fuerzas, me es imposible. Miro el reloj y tan solo ha pasado media hora desde que me acosté, parece que no pasa el tiempo...

Decido levantarme para prepararme una infusión que me ayude a dormir y en cuanto enciendo la luz un resplandor se filtra por las cortinas.

Me asomo con curiosidad y veo a Colin asomado a su ventana, mirando la Luna que yo no alcanzo a ver. Desvía la vista y me mira con curiosidad, entonces apaga su luz.

Me siento mal por haber estropeado su momento de tranquilidad, así que decido continuar con la infusión.
A los pocos segundos de comenzar a hervir el agua, unos toques en la puerta me despistan.

Cuando abro la puerra, me encuentro con esos ojos azules en los que no puedo parar de pensar

-Hola, Jen ¿Puedo...puedo pasar?

-Sí, claro. ¿Tu tampoco puedes dormir?

-Bueno...ha sido un dia algo duro.

-Estoy...estoy preparandome una infusión. ¿Quieres una?

-Está bien.

Se sienta en él pequeño banco acolchado que sirve de sofá, con la mirada perdida.

-¿Que sucede, Colin?

- Verás, justo hoy, antes de tirarte el café en el aeropuerto....Yo no iba solo.

Me siento a su lado, asintiendo para que continúe

-Durante el trayecto en coche, yo ya notaba que algo no iba bien, que habrían malas noticias. Pero no dije nada.

Aunque no entiendo sobre que me habla, decido no interrumpirle.

-Al llegar allí, al bajarnos del coche, ella me dijo que no iba a acompañarme, que se iba a Londres a empezar de cero.

Cuando escucho "ella" algo se derrumba en mi interior. Sirvo las infusiones, y vuelvo a sentarme a su lado.

-¿Ella...?

-Mi mujer...exmujer. Me hizo firmar los papeles antes de subir al avión hacia Londres. Por eso iba tan apurado cuando te tiré el café.

-Colin...lo siento.

-No lo sientas. Ni siquiera yo lo siento. Todo iba demasiado mal.

Me levanto y le quito la infusión de las manos, él me mira perplejo mientras me dirijo a la cocina, tiro las dos por el desagüe y saco una botella de Ron del armario de la cocina.

Vuelvo a sentarme a su lado, le pego un trago y se la entrego.

Al cabo de unos cinco minutos de pasarnos la botella sin pronunciar palabra, él rompe el silencio:

-Gracias por hacer de este día uno más soportable