Colifer: ¿DESTINO O CASUALIDAD? [TERMINADA]

Capítulo 19

Muchas veces había pensado en el matrimonio, pero siempre parecía estar demasiado lejos, parecía ser inalcanzable para alguien como yo. La alianza no es para alguien que apenas puede asegurarte donde va a pasar el siguiente mes de su vida, que nunca sabe donde puede haber un paparazzi esperando o algún fan haciendo locuras. Pero esa es mi vida, y me encanta.

Ahora, justo delante de mi, arrodillado y con un anillo de compromiso estaba él. Colin O'Donoghue. El hombre que tantas noches se había colado en mis sueños para pedirme matrimonio, lo estaba haciendo ahora en la vida real.

Tras unos segundos que para el han debido ser eternos, me arrodillo a su lado y, con más fuerza, ganas y seguridad que nunca digo:

-Sí

Lo repito un par de veces, no parece real. Pero él me lo confirma dándome un suave beso en los labios. Siento como una camarera se acerca a nosotros y, antes de decir nada, vuelve a marcharse. Los dos reímos. Repentinamente Colin se pone de pie y me tiende la mano para que haga lo mismo.

-Vamos, amor, la noche no ha terminado aún.

Comienzo a caminar pero no lo sigo, me quedo mirándolo avanzar y una idea descabellada acude a mí.

-Casémonos ahora.

-¿Qué?- dice girándose, incrédulo.

-Casémonos ahora.

Adelanto y cojo su mano y entrelazo nuestros dedos.

-Pero¿Quien...?

-Colin. Quiero casarme contigo ahora mismo, más que cualquier cosa en el mundo. Donde sea.- Lo interrumpo.- No necesito firmar un papel oficial para saber que voy a pasar a tu lado toda la vida. El matrimonio es amar en cuerpo y alma a la otra persona y...¡Dios! Yo te amo Colin, te amo muchísimo. Casémonos ahora.

Sus ojos se van humedeciendo poco a poco mientras me escucha con atención y, cuando se asegura de que he terminado, añade:

-Nuestra historia nunca ha sido normal...¿Porque debería serlo nuestra boda?

Estampo mis labios contra los suyos durante unos segundos y después salimos corriendo del restaurante cogidos de la mano. Ni siquiera se me pasa por la cabeza que igual la cena no está pagada. Pero nadie nos detiene. Llegamos a un semáforo en rojo y paramos en seco.

-Jen, nos casaremos hoy mismo...pero déjame hacerlo bien.- me da un corto beso en los labios y continua- nos vemos en la puerta del apartamento en una hora.

Sale a correr y no me da tiempo ni a preguntar. Aunque me muero por saber que estará planeando, no pierdo el tiempo y salgo a correr yo también, aunque sin rumbo. O eso creía al principio.

Saco el móvil y marco el numero de Ginny.

-¡Jen?¿Ha pasado algo?- Una Ginnifer dormida suena al otro lado del telefono

-¿Puedes abrirme? Estoy fuera

-Voy.

Subo al ascensor y cuelgo el telefono. Cuando llego a su puerta, Ginny me está esperando con una bata y el pelo de recien levantada en la puerta. En cuanto la veo descarto el típico "siento haberte despertado, pero es importante" y voy directamente al grano.

-Voy a casarme con Colin.

Ginny empieza a gritar, emocionada y me pregunta que como ha pasado todo. Entramos en el apartamento y nos sentamos en el sofá. Le explico todo lo que ha pasado y, cuando termino me parece imposible que todo ese cuento de hadas me haya sucedido a mí.

-¡Madre mía Jen!¡Te vas a casar!- grita Ginny levantándose del sofá y gritando de nuevo.

A los pocos segundos, una sombra aparece por las escaleras.