Por fin después de tanto tiempo la pareja de Loveless estaba unida por un lazo más fuerte que la amistad, más que el Amor entre hermanos, más que la vida y la muerte, era no solo un lazo de amor verdadero sino la unión de un dos cuerpos en una sola alma, sin perder tiempo Soubi corrió a donde estaba Ritsuka el era su prioridad en ese momento, Seimei ni siquiera pudo alcanzarlo a la velocidad que iba y al estar cerca de Nisei y su pequeño se acercó a él sin importarle nada lo beso notando su cuello sangrar por su nombre el cual era igual al suyo, al fin eran uno y las miradas que compartían en ese momento eran de infinito amor, eran cómplices en ese momento y no podían perder tiempo en ese lugar, con cuidado el rubio cargo al pequeño Ritsuka acomodándolo en sus brazos caminando o más bien corriendo lo más lejos posible de ese par de idiotas, necesitaba hablar a solas con su hermoso niño y no quería interrupciones por el momento.
Ambos necesitaban sentirse en un momento íntimo, necesitaban ha demostrarse ese gran amor que estaban sintiendo y solo lo conseguirían estando juntos, mientras corría por las calles trataba de que ese par no los siguiera pero ellos ni hacían el esfuerzo; Seimei se dedicaba a golpear a su combatiente por la ira de haber perdido a quien el más quería. Una vez en el tren de regreso a su hogar ya no pudrieron esperar más y se dieron un beso que demostraba todo el amor que ambos sentían, ese enorme sentimiento que nublaba sus sentidos por completo y los hacia decir y actuar estúpidamente, al momento de separarse se miraban directamente a sus ojos ambos ligeramente sonrojados porque ambos se amaban y no creían que ese sentimiento aún perdurará en el fondo de ellos.
— Te escuche llamarme... —
— A pesar de la distancia al fin pude llegar a ti...—
— Ritsuka, nunca más me alejare, no solo eres la persona que amo también eres mi sacrificio y mi alma gemela —
En ambos ojos se veía aquel brillo que demostraba el gran sentimiento que nacía dentro de ellos, cuando por fin estuvieron de regreso Soubi llevó al joven Ritsuka a su departamento entrando a este para poder reclamar lo que era suyo cerrando toda puerta o ventana antes de besar con lentitud y amor los labios de su pequeño niño, en un suave movimiento comenzó a llevarlo hasta su habitación acomodando el ya no tal pequeño cuerpo de su niño en la cama ambos se miraban, acariciaban con ternura y amor mientras dejaban las cosas a su alrededor fluir con naturalidad.
Aunque Ritsuka era algo tímido al lado de Soubi eso no contaba, con toda la confianza del mundo paso sus manos por la espalda del más grande aunque el rubio no había cambiado mucho siempre seguía siendo un poco más alto que el y musculoso aunque le gustaba mucho el cuerpo del mayor no iba a decirlo nunca, pero en ese momento solo podía pensar en esos labios que devoraban los suyos con amor pero con un toque de lujuria mientras ese sin hueso se abría paso a la boca del más joven explorando esa cavidad húmeda lentamente ya que no había prisa alguna, estaban haciendo el amor en ese momento con cada beso, con cada mirada cómplice que se dedicaban, con ese enorme amor que se profesaban en ese preciso momento para ellos era estar en una burbuja donde el tiempo no parecía correr.
Lentamente la ropa comenzaba a desaparecer y aunque Ritsuka estaba algo nervioso por entregarse y que solo fuera una jugarreta del contrario pero al ver aquel nombre en el cuello de su pareja y sentir el mismo en el suyo no dudo más y se entregó al place que sentía, a los besos que habían comenzado ya a descender por su cuello mientras la ropa de ambos ya había desaparecido entre sus besos; la piel del peli negro se sentía arder por cada beso o caricia que se impregnaba en su cuerpo como uno mismo, quizá estaba alucinando pero en ese momento parecía que los rodeaba un hermoso círculo de mariposas azules, las mismas que siempre usaba Soubi al momento de pelear. Las fuerte, grandes y frías manos del rubio recorrían la piel tersa del menor disfrutando de los pequeños y rosados pezones estimulando estos con sus labios y lengua mientras sus manos acariciaban sus largar piernas solo unos cuantos roces antes de pasar a sus glúteos los cuales apretó descendiendo nuevamente después de dejar rojos y bien erectos sus pezones pero ahora tenía otra presa que quería devorar en el placer, el rubio acomodo con cuidado las piernas del contrario en sus hombros dejando su rostro entre estas para comenzar a lamer y dar atención a su miembro quería que su pequeño se sintiera seguro al momento de entregarse y también hacerlo disfrutar de ese acto. Los minutos e incluso parecían escurrirse entre las manos de ambos, después de tantas caricias y de que el pequeño Ritsuka se corriera en la boca del contrario el intento hacer sentir bien al mayor pero aún así aunque era inexperto solo provocó aumentar el placer en ambos y por ende Soubi no pudo aguantar más para poder tomar por completo su cuerpo dejando al menor debajo de el para ese momento, como buen caballero que era primero lúbrico bien la entrada del menor dejando un primer dedo entrar en su estrecha entrada así hasta que pudiera entrar un segundo y tercer dedo arrancando esos deliciosos y tiernos gemidos del menor que lo incitaban a seguir con ese acto; una vez tuvo bien lubricada su entrada sacó sus dedos para remplazar estos por su miembro duro que pedía a gritos silenciosos poder entrar ahí, fue lento ya que era la primera vez del más joven y aunque su razón estaba nublada por el placer se contenía lo suficiente hasta estar dentro de su pequeño el cual tenía un par de lagrimas en sus mejillas por el claro dolor que su miembro le causaba.
Se quedaron quietos unos segundos hasta que por fin el leve movimiento empezó en lentas y profundas embestidas que fueron aumentando con el paso de los segundos fundiéndose de nuevo en un beso profundo y lleno de amor, un par de pequeñas orejas se desprendieron de la cabellera negra al igual que esa linda colita de gato, Ritsuka ya no era más un niño había pasado a ser un adulto en ese momento y aún su aventura estaba por comenzar mientras estos amantes seguían demostrando su amor en otra parte no muy lejana el director de cierta escuela estaba planeando la destrucción de cierta pareja que ya había ocasionado muchos problemas.
— Encárguense de Beloved...
— ¿tenemos límites?
— No ustedes deciden la mejor opción.
— Tendremos una respuesta favorable en unos días.
— Vayan con cuidado Fearless
. . . —• El destino trae consigo una gran responsabilidad •— . . .
"We are only one soul... I love you so much"
TO BE CONTINUE. . .

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LOVELESS
Fiksi Penggemar"Soubi me abandonó por Seimei ahora ya no me queda nada, ahora entiendo el peso de mi nombre... alguien sin amor... alguien que jamás será amado a pesar de todo." Los personajes de Loveless no me pertenecen pero la historia es completamente mía. Hab...