Íncubo |Larry|

Unus

Los susurros de palabras que no entendía le excitaban más.

Su labio estaba apresado entre sus dientes, una mano grande y fría hacia que su pierna se elevara. Su interior era sacudido por las fuertes embestida del hombre detrás de él. Una mano voltea su cabeza y una lengua va de su mejilla hasta su boca, se entrega en un beso tan vulgar pero a la vez tan delicioso y placentero .

—Ea corpus mea est— cierra los ojos al escuchar esa voz, el placer solo va en aumento.

Unos dedos acarician la curva de su cuerpo, desde su cadera hasta el pecho.

Voltea su cara y abre sus ojos, puede ver un cuerpo bien tonificado, brazos grandes y piernas musculosas. Sus caderas son sacudidas violentamente y él solo puede gemir. Sus piernas son separadas aún más y de pronto se siente caliente. Su cuerpo arde y su orgasmo explota, no puede evitar el grito que desgarra su garganta en el proceso.

Lame sus labios cuando logra tranquilizar su cuerpo de los espasmos después del éxtasis. Es volteado y besado duramente, sus brazos se envuelven en el cuello de hombre que lo posee y profundiza el beso. Abre un poco sus ojos y ve los contrarios, son negros pero se van haciendo azules de apoco. Cuando se separan puede ver solo su sonrisa. Hay colmillos y no dientes normales.

—Excitat.

Harry se sienta de golpe, su respiración es agitada. Ve a su alrededor, su habitación está normal. Tal cual la dejó anoche, ve el cielo por la venta. Está amaneciendo apenas, voltea a la mesita de noche que su madre le regaló y divisa el despertador, son las 5:50 de la mañana.