Dos es Mejor que Uno (Camren)

Capítulo 15 (Final)

Capítulo 15

Hay cosas que no puedes escoger, entre ellas está la familia y el amor. Puedes escoger a la persona que te guste sin embargo, cuando a tu corazón no le agrada esa persona que escogiste, siempre hará de las suyas y hará que te enamores de la persona que jamás te imaginas; al igual no puedes escoger a la familia, ese grupo de personas que, como pueden hacer tu vida la más placentera como la más miserable.

Yo tenía suerte, en lo que cabe. Mis padres siempre habían, y hasta el día de ahora,  apoyado en todo lo que yo quería hacer. Después esta mi hermano, que aunque siempre habíamos sido demasiado diferente en todos los aspectos posibles, no lo cambiaría por nada del mundo. A pesar de nuestros problemas, era mi sangre y parte de mi vida.

Si dos años atrás alguien me hubiera dicho, te enamoraras de la novia de tu hermano, comenzaras una relación con esa chica, le destrozaras el corazón a tu hermano, él hará la vida de su novia, que ahora sería tu novia, un infierno y probablemente destrozaran cualquier comunicación entre ambos, le hubiera golpeado el brazo y hubiera reído como idiota ante aquella asunción; pero aquella hipótesis se volvió real.

Muy real

Me había enamorado de la novia de mi hermano y literalmente nuestra relación de hermandad se había ido por el desagüe. Sin embargo, no puedes escoger a tu familia y estoy segura que nuestra relación volverá a hacer la misma.

Eso espero.

Además, las vacaciones de verano habían llegado, y esto significaba la oportunidad perfecta para realizar la fiesta de inicio de verano en casa de los Jáuregui. Desde que Keaton había alcanzado su escala en la punta de la pirámide de popularidad, esto se había convertido en una “tradición”.

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Salgo de mi cama perezosamente mientras escucho la voz de Wesley y Drew en el patio de  mi casa. Suspiro pesadamente al escuchar como el sonido es lo primero que están arreglando y como Macklemore comienza a sonar; me dirigí al baño e hice mi rutina mañanera, no tan mañanera ya que eran las 2 de la tarde. Me dio una ducha y me puse algo cómodo.

Baje a la cocina y vi que en la barra ya se encontraba todo lo necesario para la fiesta. Rodé los ojos al ver un par de botellas de alcohol en una de las bolsas. Abrí el refrigerador y tome el desayuno que mi mama me había dejado con una nota pegado a este: Cuida la casa. Estaremos con tu tía Lidia. Los amamos.

Almorcé en la sala mientras encendía la televisión y miraba el maratón de Bob Esponja. Al terminar mi almuerzo camine hasta mi recamara y tome mi celular. Tenía dos mensajes de vero y dos llamadas perdidas de Lucy.

Ellas podían esperar, abrí el icono de mensajes y le mande uno a Camila, suponía que seguía dormida ya que la noche anterior habíamos llegado tarde de una pequeña caminata que habíamos dado en la playa.

“Buenos días, bella durmiente. Espero que ya estés despierta, sino cuando veas este mensaje, ten presente que tienes que estar arreglada a las 6 pm, porque pasare por ti para lo de la fiesta de verano. Te quiero”

Habían pasado dos semanas desde que Camila y yo éramos oficialmente novias. Todos estaban felices por el paso que habíamos dado, de igual manera creo que nuestros padres confundieron el pedimento con algo así como un compromiso por qué cuando les dijimos comenzaron a hablar de fechas para lo boda, vestidos y ¡Nietos!

Fue una escena bastante bizarra y un poco fuera de lugar dado que apenas tenemos 17, casi 18 años y una vida por delante. Vida que Camila y yo habíamos estado planeando. Camila quería ser doctora y ¡Dios que sería una magnifica! La otra vez me comenzó a nombrar todos los nombres de los huesos y debo decir que, como Ashton Kutcher dijo en una entrega de premios, lo más sexy en una persona es la inteligencia, sí que lo era; yo por mi parte quería estudiar literatura, me encantaba el poder sumergirme en un libro y poder descubrir lo más de las historias. Ambas queríamos mudarnos al torbellino, a la jungla de concreto, nuestro destino sería Nueva York estudiando en la NYU, sabíamos que faltaba un año pero teníamos que tener todo listo.