Capitulo XVIII

16.1K 683 138
                                    



POV LAUREN:

Sinu y Justin fueron los primeros en ingresar a la habitación de Camila mientras que junto a Taylor esperábamos impacientes que su familia la viera primero.

No dejaba de morder mis uñas a pesar de que nunca había sido un habito, pero ahora por alguna razón no podía controlar mis nervios ni mis conductas, estaba fuera de control. Mi hermana no dejaba de repetir que me calmara, que la castaña despertaría y todo estaría bien, por supuesto que quería creerlo pero en mi pecho estaba instalada esa pequeña duda ¿qué pasaba si no resultaba todo como esperaba?

Aguardamos unos 15 minutos hasta que el rubio salió; se lo veía mucho más angustiado que antes, aun así me dedico una sonrisa acompañado de un "Puedes pasar, mi madre no tarda en salir"

"Gracias" Dije casi tropezando para entrar lo más rápido posible. Mire a Taylor que se había quedado quieta y la arrastre conmigo ya que no podía hacer esto sola.

Lo primero que note fueron cables conectados a su cuerpo, maquinas ruidosas que controlaban sus signos vitales y por supuesto su hermosa cara absolutamente hinchada y magullada. Se me encogió el corazón y las lagrimas comenzaron a salir sin poder evitarlo, ella no merecía estar aquí, no podía imaginar el dolor que sentiría al despertar.

No sé cuánto tiempo me quede petrificada observándola y llorando en silencio pero la madre de Camila no se encontraba mejor que yo, era duro para todos verla de aquella manera rota y ajena a este mundo.

Taylor también lagrimeaba a mi lado pero tomando un fuerte suspiro para regular su voz dijo "Los golpes son normales, ella volverá a verse bien en unas semanas, los analgésicos no le permitirán sentir dolor y por lo que pude ver en su ficha estará bien, estoy segura"

Su seguridad me transmitió tranquilidad y por lo visto también a Sinu que dejando un beso en la frente de Camila salió de la habitación. "Las dejare a solas con ella, se cuanto las quiere"

Ambas asentimos y volvimos a quedarnos en silencio.

No pude evitarlo más y me acerque a mi hermosa chica buscando su mano con cuidado para no desconectar nada pero necesitaba su tacto, se encontraba un poco fría pero seguía siendo la piel que mas amaba en este mundo. Tocarla me hizo bien por lo que comencé a acariciar su cabello, sus hermosas facciones que a pesar de presentar moretones eran perfectas. "Despierta" Rogué "Me has dejado plantada mi amor" Intente hacer una broma pero el llanto no dejaba de salir "Despierta Camz, te necesito"

Admitir aquello no me alarmo, ahora entendía cuanto la necesitaba en mi vida, negarlo ya no me servía de nada.

"No dejo de pensar en aquello que me dijiste Tay" Pronuncie ahora llevando mi atención hacia mi hermana ya que la herida no se perturbaba de nuestra presencia.

Ella hizo un gesto dándome a entender que no sabía a qué me refería por lo que continúe hablando. "Dijiste que estaba perdiendo mi oportunidad de ser feliz, fui una cobarde y ahora ella no sabe que la amo, no pude decirlo"

"Shhh" Respondió la doctora acercándose a mi lado "No te lamentes, no aun, despertara y podrás decirle una y otra vez cuanto la amas, no es como si no se te notara en los ojos de todas maneras" Bromeo aligerando el ambiente.

"Eso espero" Suspire.

"A veces la vida nos enseña a través de estos accidentes inexplicables y dolorosos que no estamos tomando el camino correcto, que debemos arriesgarnos más, no sé si tiene sentido lo que digo, pero quizás esto fue para que te dieras cuenta y Camila también que deben dejar de perder el tiempo ¡ustedes se aman!"

MAYBE TOMORROWDonde viven las historias. Descúbrelo ahora