Capitulo V

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POV LAUREN:

Las manos de Camila me recorrían sin pudor mientras mi espalda se arqueaba involuntariamente en el colchón. Habíamos empezado a hacer el amor sin poder pararnos de la cama desde hace dos horas y aun no tenía suficiente, pero al parecer la que no se cansaba de darme placer era ella.

Jadee cuando sentí que el tercer orgasmo llegaba, esta vez, gracias a sus dedos que se curvaban en mi interior.

"No reprimas tus gemidos Lauren" Me regaño sacando los dedos para meterlo con más fuerzas.

Esta acción me obligo a gritar. La zona que ella estaba estimulando se encontraba débil después de 2 rondas y no pude parar de retorcerme en la cama cuando los espasmos de aquel intenso orgasmo me recorrió desde los pies hasta la cabeza.

"Eso es" Su sonrisa se expandió besando dulcemente mis labios.

Dios, había extrañado esto.

"¿Lauren te encuentras bien?" La voz de mi novia me trajo a la realidad pero mi cuerpo no lograba procesar que lo que acababa de suceder había sido un simple sueño.

"Si" Dije con la voz demasiado rasposa.

"¿Estabas teniendo una pesadilla?" Pregunto mirando hacia mi frente y luego colocando su mano encima. "Dios estas tan transpirada"

Me di cuenta que mi cuerpo había reaccionado al sueño de una manera que pocas veces me sucedía y que a pesar de no haber sido real, se había sentido así.

"No te preocupes, vuelve a dormir" Suspire dejando un pequeño beso en su frente.

Los recuerdos del beso que había compartido con Camila hace unas noches me invadieron, al igual que la culpa ¿Qué era lo que estaba haciendo con mi vida? ¿Porque demonios la había besado cuando tenía una novia que me hacia feliz?

Si bien las cosas con Lucy no estaban en su mejor momento, ella había sido la encargada de reparar mi corazón mostrándome que podía volver a amar, no merecía que la engañara.

No entendía el efecto que la arquitecta aun tenía en mí, tan solo la había visto 3 veces y eso había sido suficiente para remover toda clase de emociones.

Era una idiota, eso nadie podía discutirlo.

Mis pensamientos no habían cesado desde el cumpleaños de mi hermana y era mucho decir ya que habían pasado 5 días. Pero no podía dejar de pensar en ello y en mi sueño húmedo, aun cuando tenía a mi lado una hermosa modelo durmiendo pacíficamente. Lucy no merece esto, me repetí una y otra vez en mi cabeza, pero las peleas desde que había decidido publicar el libro no parecían terminar, todos los días discutíamos y el motivo siempre era Camila, para ser sincera estaba cansada.

Primero había sido su disgusto por las palabras de amor que había dedicado para la chica menor cuando una editorial se interesó en el libro. Obviamente no pude evitar que Lucy lo leyera haciendo de esto una gran discusión, una de las más fuertes que habíamos tenido hasta el momento. Luego fue la llegada de Camila a la vida de mi hermana que por supuesto tuvo repercusiones en la mía, y desde entonces nuestra relación era un completo torbellino y ahora mis emociones también lo eran cuando mi inconsciente me engañaba mostrándome en mis sueños algo que no podía suceder pero al parecer, deseaba.

Mis pensamientos no se detenían y el dolor en mi cabeza apareció como consecuencia. Me quede mirando el techo de mi dormitorio suspirando profundamente cuando sentí a la chica más baja envolverme con cariño entre sus delgados brazos, lo que solo me hizo sentir más culpable.

"¿Cariño?" Susurro roncamente, al parecer la había despertado con mis movimientos en la cama.

"Si" Respondí vagamente.

MAYBE TOMORROWDonde viven las historias. Descúbrelo ahora