MAYBE TOMORROW

Epílogo

POV LAUREN:
           

"¿Cariño?" Mi voz fue un eco en la casa que compartíamos con Camila desde hace 7 años.

Di unas vueltas por el lugar repitiendo la pregunta.

"Estoy aquí" Luego de unos segundos escuche la voz de la persona que tanto amaba y me dirigí hacia allí sin dudar.

Al llegar pude encontrarla en la reposera junto a la piscina mientras leía un libro. Al parecer escucho mis pasos ya que se quitó los lentes de sol y me miro fijamente, regalándome esa sonrisa de costado que me debilitaba por completo.

El ramo de rosas que llevaba no era fácil de esconder por lo que rápidamente lo saque desde atrás de mi espalda. Me arrodille frente a ella. "Feliz aniversario amor"

Su boca rápidamente se encontró con la mía y me quito el aliento por segunda vez en el día. Sus dedos se enredaron en mi cabello y su lengua ansiosa bailo con la mía por varios minutos.

"Feliz aniversario bebé" Respondió algo agitada "Pensé que no lo recordarías"

"¿Es una broma?" Dije casi ofendida "Planee el viaje de regreso solo para pasar este día contigo"

"Te he echado de menos" Volvió a aferrarse a mi nuca. Su perfume junto con el protector solar era una droga para mí, y amaba la forma en la que ella se apretaba contra mi cuerpo, como si de aquella forma pudiésemos unirnos más de lo que ya estábamos. Un escalofrío me invadió al darme cuenta de lo afortunada que era por tenerla en mi vida.

"También te he extrañado, demasiado. La próxima vez deberías cancelar tus planes de trabajo y venir a la gira del libro conmigo"

"Alycia me mataría" Dijo refiriéndose a una de sus mejor amigas y socias "Pero quizás pueda considerarlo"

Agarro las flores que continuaban en mis manos. "Son hermosas"

"Tú eres hermosa" Refute sin dejar de mirarla fijamente.

Hermosa era una palabra muy pequeña, no podía definir a Camila simplemente de esa forma y sin embargo no dejaba de utilizarla con ella. El deseo me invadió debido a su piel expuesta al sol, esa piel bronceada y firme que tan loca me volvía, por lo que nuevamente uní nuestros labios.

La pasión de aquel beso nos dejo a ambas respirando con dificultad, dos semanas no parecían demasiado cuando habíamos soportado mucho más tiempo separadas, pero cada vez que me marchaba sufría y la extrañaba como una loca.

Me había vuelto completamente dependiente de su presencia, a todo lo que ella era y significaba en mi vida. Compartir nuestras vidas había sido un sueño desde el momento en que me enamore de ella y compartirlo era mucho mejor de lo que alguna vez había soñado. No podía dejar de sentirme agradecida por tenerla a mi lado.

"Nunca puedo estar lo suficiente cerca de ti" Dije sobre sus labios.

Me abrumaba la forma en la que todavía después de tantos años juntas la amaba tan intensamente. La forma en la que mi piel reaccionaba a ella, en la que mi respiración se alteraba. Estaba segura que Camila tenía algún tipo de interruptor con mi cuerpo y con mis sentimientos porque no le encontraba otra explicación.

"¿Quizás si te quito la ropa puedas sentirme mejor?" Pregunto arqueando una ceja.

"¿Y qué pasa con los niños? No tardaran en llegar"

Camila lanzo la cabeza hacia atrás y largo una carcajada "Odiaría que eso fuera cierto"

"¿Tener hijos?" Pregunte sonriendo también, pero un poco triste con su respuesta.