-Logan y Anabella Twinkell, disfrutan una hermosa velada en uno de los restaurantes más elegantes de todo París, mientras que la bipolar pero hermosa Meg Fox se retuerce de los celos en su suave cama.-Entonces... - pronuncia la chica de cabellos dorados mientras deja la copa sobre la mesa- ¿Ya te decidiste? -pregunta con seriedad-
¿Qué? -responde con otra pregunta aquél chico, aún sabiendo que esta simple acción enfadaría a aquélla chica a la cual acompañaba-
¿Con cual te quedas? -dice curiosa- no puedes estar con ambas -añadió la de ojos verde-azulados-
Sabes que no puedo elegir
-dijo Logan sereno- las dos son preciosas contradicciones -añadió--La chica se levantó para tomar la mano de su acompañante y salir del restaurante, no sin antes dejar pago el servicio recibido-
Siempre tan desesperada
-dijo mientras era arrastrado por su tan preciada prima-
Sé que no te puedes resistir a mis encantos -dijo en tono burlón-Si no puedes elegir por ti mismo yo te aclararé las ideas -dijo molesta aquella chica-
- A unos varios metros de aquél lugar se encontraba la casa de la universitaria, Meg Fox.
Pobre chica, atrapada en la soledad de su casa, lamentando cada momento de su existencia, pero, ¿Quien diría que una estudiante de su rango había sufrido tantas desgracias?.
La chica miraba su teléfono cada momento , para saber si su amado le escribía o se dignaba en llamarle-¿Qué estarán haciendo? -se preguntaba la chica-
¿Por qué no me llama o escribe? - pensaba preocupada-
Le llamaré - dijo para luego marcar el número de Logan Twinkell y llamarle, pero solo respondía el correo de voz-Seguro estará dormido
-pensó- o le habrá pasado algo, debería ir a verle.- En la casa del joven Logan se podía sentir la adrenalina de aquél momento y se escuchaban los gritos de placer y locura, mientras aquellas sabanas eran desarregladas rápidamente por la pasión de aquellas dos almas enloquecidas por el placer-
Eres tan dulce , no quiero separarme de ti -decía aquel chico que no sabia en que problema estaba metido, mientras la mujer que daría todo por el salía a su busqueda-
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Solo una vez más
De Todo¿Quién diría que una de las emociones más hermosas y fantásticas de todas puede ser tan cortante y horripilante a la vez? ¿Cómo se rompen los lazos que nos unen a ciertas personas? Quisiera poder contar más que una historia llena de recuerdos y caí...