Había salido del departamento para poder pensar con tranquilidad, porque una vez más, Yoongi lo había incomodado.
Últimamente era de ese modo. Lo juzgaba de manera cruda, le exigía más que a los demás miembros – aunque no fuera el líder, él le debía respeto a sus mayores- y en varias ocasiones lo hacía sentir menos con alguna frase sarcástica.
Muchas de aquellas veces, fingía que no le tomaba importancia y se refugiaba con Tae y Kookie, pero en ocasiones como ésta, no soportaba la situación e intentaba despejarse a solas.
La despensa estaba quedando casi vacía, según le había comentado Jin el día anterior. Así que, luego de la discusión con Yoongi, prefirió pedirle al mayor la lista de compras y ofrecerse a ir él. Jin lo conocía tan bien, que lo comprendió inmediatamente sin siquiera pedir una explicación y lo dejó ir solo.
Con la lista en mano, tomó su billetera, el celular y sus audífonos para relajarse escuchando música.
Pero unas cuadras antes de llegar a su destino, encontró un nuevo centro comercial y la curiosidad lo llevó a pasearse de tienda en tienda por más de 3 horas, comprando así un par de pantalones y un sweater que tenía un tejido increíble.
Cuando salió de allí, estaba tan satisfecho con sus nuevas adquisiciones que llegó a olvidar el mal momento que pasó en el departamento. Sólo llevaba la promesa mental de volver con Tae en otra ocasión porque había visto una tienda con su marca favorita, estaba seguro que a su mejor amigo le encantaría la noticia.
Contento con la idea, llegó al supermercado y se tomó su tiempo para comprar todo lo necesario.
Al regresar al departamento, tarareaba una de las canciones de su playlist hasta que rompieron su burbuja, devolviéndolo a la realidad en un brusco movimiento.
— ¿Me puedes explicar por qué demoraste tanto?
Con los ojos muy abiertos, observó a Yoongi que lo miraba con el ceño fruncido y una mueca de disgusto.
—No sé en qué pensabas pero no deberías de ser tan desconsiderado, estuviste fuera por más de 4 horas, no respondías el celular...
Escuchando la manera en que le hablaba, sin consideraciones, como si hubiese hecho algo malo, como si no fuese el mayor quien últimamente se portaba de manera hosca con él... Ya era suficiente.
Devolviéndole la mala mirada, con ceño fruncido incluido, le espetó:
— ¡Déjeme en paz Yoongi hyung!
Quien ahora se encontraba en shock, era Yoongi, que no podía creer que su siempre respetuoso Jimin, le haya no sólo levantado la voz si no que lo estuviera viendo con tal furia en la mirada.
— ¿Q-qué dijiste? — Parpadeó confuso.
—Que me deje en paz, Yoongi hyung. No entiendo su molestia. Sólo fui a hacer las compras. — Le señaló la mesa donde se encontraban las bolsas y aún con el ceño fruncido, el menor se volvió hacia la nevera para continuar con la tarea de acomodar dichas compras. Sin que el mayor se percatara, las manos de Jimin habían empezado a temblar.
— ¿Y para hacer unas simples compras te demoras tanto tiempo?— Cuestionó de mala manera cruzándose de brazos.
Jimin detuvo todo movimiento. Volvió el rostro hacia el pelinegro y apretando el puño de la mano que tenía libre, le dirigió la mirada más molesta de su repertorio.
—Sí Yoongi hyung, hasta para éso soy muy lento y torpe. — las palabras habían salido entre dientes, con tanto resentimiento, que el mayor tenía los ojos muy abiertos y dejó caer sus brazos a los costados. ¿Realmente Jimin le estaba hablando de ésa manera?
—Hey, chicos ¿qué sucede aquí?— Namjoon que había salido de su habitación junto a Jin, luego de escuchar el casi grito del siempre adorable Jimin, no podía creerse lo que veía.
—Yo acabo con éso, Chim Chim. — Intervino Jin de manera tranquila— Si deseas, ve a descansar. —Se acercó al rubio para darle un suave apretón en el hombro y una sonrisa tranquilizadora.
—Gracias, Jin hyung. — El menor le correspondió con una sonrisa cansada, cogió las bolsas que contenían sus compras personales y al pasar junto a Namjoon inclinó levemente la cabeza a modo de disculpas para luego retirarse a su habitación. Todo ello, sin dirigirle una sola mirada a Yoongi.
La cocina quedó en silencio hasta que oyeron una puerta cerrarse y fue Seokjin quien hablo esta vez, mirando al pálido.
—No sé qué pretendes Yoongi. — Lo encaró— Pero de ésa manera sólo estas logrando que Jimin se aleje cada vez más de ti.
—No pretendo nada, hyung— obstinado, cruzó una vez más sus brazos, no dejándose intimidar por el mayor.
—Yo sigo preguntándome: ¿qué pasó aquí?—Nam rascó los cabellos de su nuca para luego mirar al pelinegro— Yoongi hyung, ¿por qué discutían?
Y parecía que el líder había pulsado un interruptor en la cabeza de Yoongi, porque apenas terminó de formular la pregunta, el aludido descruzó sus brazos y respondió casi sin respirar al tiempo que gesticulaba con las manos.
—Ése enano desconsiderado salió hace como 5 horas, no avisó, no contestaba las llamadas y nos tenía preocupados. —Su voz fue subiendo de volumen con cada nueva frase.
— ¿"Nos tenía preocupados"?— Cuestionó con tono sarcástico el mayor— ¿a ti y a quien más Yoongi?— ahora el de brazos cruzados era Jin— Porque solo te vi a ti reclamándole a Chim chim...
—Jin hyung, no discutan por favor— Namjoon miró al castaño con súplica.
—Estuvo fuera por más de 5 horas, ¿te parece que éso está bien?— contraatacó el pelinegro, pasando por alto a Nam y solo dirigiéndose a Jin.
— ¿Y a ti te parece que es un niño que no se sabe cuidar?
Sin darse cuenta, los mayores estuvieron acercándose cada vez más, así como su enojo fue incrementando.
—Pues no me sorprendería si no lo pudiera hacer— La mirada felina del pelinegro se había vuelto filosa— Vive tan confiado del mundo, ¡como si todo fuera color de rosa!
— ¡Y a mí no me sorprendería que un día de éstos te mandara al diablo! — El castaño se encontraba por demás enojado.
—Hyung, se suponía que veníamos a apaciguar las cosas. — el líder suspiró con resignación. Ya entendía mejor el panorama, sin embargo no comprendía aún la razón de la irritación de Yoongi.
—Perdona Namjoonie, — Le dedicó una mirada apenada aunque decidida— pero no voy a dejar que éste tonto arruine el buen ambiente que normalmente tenemos y moleste a Jiminnie, sólo porque no puede admitir sus sentimientos ni con él mismo.— dirigió su mirada gélida otra vez al pelinegro — Y por cierto, todos sabíamos que Jimin saldría a hacer las compras. Necesitaba pensar las cosas con la cabeza fría. — se acercó casi de manera amenazante — Aunque creo que tú lo necesitas más.
Dicho éso, tomó los empaques de ramen, café y los fue colocando en sus respectivos lugares en la despensa. Intentando contener su furia contra ese enano pelinegro.
—Quizás sea una buena idea Yoongi hyung.— opinó Nam.
Internamente, el pelinegro lo secundó.
Notas de la autora:
Hey!
you never walk alone~!
Ya en serio. Gracias a quienes comentaron en el cap anterior, son lo máximo!!!
El siguiente cap será muy corto porque se verá un poco del punto de vista de Yoongi.
Nuevamente gracias a quienes se pasan por aquí a leer esta mini fic.
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Importante - YoonMin
FanfictionJimin lleva más de cuatro horas fuera del departamento. Yoongi no puede evitar sentirse culpable luego de ver al menor llorar y sólo ahí comprende la importancia que tiene Jimin para él. ~~~~ ❇YoonMin ❇Interacción NamJin ❇Mini Fic ❇Drama ❇Fluff *No...