—Oh Jiminnie— El mayor se puso de pie acercándose apresuradamente al mencionado. Sólo ahí el rubio notó la presencia de Yoongi.Cohibido,se disculpó — P-perdone Yoongi hyung, no quería interrumpir. — El aludido lerestó importancia encogiéndose de hombros, fingiendo desinterés.
Jimin agachó la mirada. Había logrado huir del escrutinio de Hobi por averiguar lo que ocurrió con el pelinegro. Increíblemente, el apetito volvió a él luego de la conversación con el pálido, que aunque breve, fué muy satisfactoria. No es que a él le gustara que le pidieran disculpas, pero estaba contento de escuchar a Yoongi decirle directamente que se había preocupado. Sus orejas comenzaron a calentarse. Salió de sus recuerdos al sentir las manos de Jin acariciando suavemente sus hombros.
—Dime Jiminnie, ¿qué sucede?
—Y-yo... q-queria saber si sobró comida— Estrujó sus pequeñas manos ansioso. Jin amplió su sonrisa.
—¡Claro que sí, Chim chim! Bueno... sí sobró pero te prepararé algo ahora mismo. La comida recién hecha es la mejor. — Lo tomó de la muñeca acercándolo a la mesa— Ven, siéntate. — Éste obedeció y el mayor se volvió hacia los estantes comenzando a recolectar lo que necesitaría para preparar algo delicioso al más bajito.
Mientras observaba a Jin trabajar en la cocina, Jimin evitaba voltear a ver a Yoongi, se sentía vulnerable.
— ¿Sabes? Estaba preocupado de que fueras a la cama sin cenar. —Comentó el castaño, para cortar ése silencio que se había instalado. —Pero me siento más tranquilo ahora que ya se te abrió el apetito. — Con lo último, ladeó la cabeza para guiñarle un ojo a Jimin.
Al menor se le subieron los colores al rostro. Ése tendría el primer puesto en sus momentos más vergonzosos. ¿Jin quería ponerlo en evidencia acaso? Con el flequillo cubriendo sus ojos, se atrevió a mirar al pelinegro que se encontraba concentrado en su cena. Al verlo de ése modo, pudo destensarse aunque aún sentía el rostro caliente.
Yoongi se fué relajando poco a poco luego de escuchar al rubio interactuar con Jin sin problemas. Al parecer, el menor no había escuchado la conversación que antes estuvo sosteniendo con Seokjin, o algo que lo pusiera en aprietos. Continuó comiendo su casi fría cena.
El delicioso aroma de la comida que preparaba el castaño, le produjo casi salivar al menor y agradeció que Yoongi se hubiera acercado a su habitación porque estaba seguro que si no cenaba, como tenía planeado, su estómago habría dolido mucho desde la madrugada hasta el siguiente día. En un gesto, todavía nervioso, acarició los cabellos de su flequillo con la mano derecha llevándolos hacia atrás.
Para el pálido, que le estuvo lanzando miradas furtivas a Jimin, aquel gesto no se le pasó desapercibido. Tragó saliva al sentir la garganta seca viendo la acción inconsciente del rubio, el que ahora al mocoso ése se le ocurriera morder su labio inferior, no ayudaba en nada... Como empujado por un resorte, se levantó tomando los platos vacíos para llevarlos al lavadero y dejarlos ahí.
—Gracias hyung. — Soltó mientras se alejaba.
— ¡Yah! ¡Yoongi! ¡Lava éso!
El pelinegro no se dio por aludido, siguió caminando mientras le decía: — Al menos lava mis platos ya que me obligaste a comer la cena fría. — Jin reía incrédulo. Se detuvo en el marco de la puerta solo un momento — Nos vemos mañana Jiminnie, descansa. — se despidió dedicándole una suave sonrisa.
— ¡Yah, Yoongi! ¡Enano descarado! ¿Has visto eso Jimin? — El castaño volteó a ver al menor, buscando algo de apoyo, pero el rostro de éste parecía que iba a explotar por tantas emociones. Tenía los ojos tan brillosos, que Jin sólo pudo suspirar.
Estas perdido Jiminnie.
~~
Esa mañana había despertado con una hora de retraso. Se tuvo que desperezar en un segundo, bañarse y cambiarse, en menos de quince minutos. Despertar tarde significaba no sólo retrasar al resto de sus compañeros, si no también recibir un entrenamiento extra al final de la práctica grupal.
Al llegar, los chicos se encontraban ya practicando una de las nuevas coreografías. Observar a Yoongi no era una opción porque sabía que con lo ocurrido el día anterior, se distraería fácilmente.
Se ocupó de no cometer errores en las prácticas para no quedarse más tiempo del necesario, pero al final, mientras los miembros se iban retirando de la sala, el coreógrafo lo llamó a un lado para llamarle la atención por la tardanza y haciéndole perfeccionar unos pasos para que en la siguiente sesión pudiera enseñar a Jin.
Le tomó casi cuarenta minutos, lo que resultó en retrasar su cita con Yoongi.
Bueno, llamarlo 'cita' no era lo correcto... quizás sí, pero no en el contexto de cita romántica, si no de las que te encuentras con alguien que... Yah, se estaba enredando la cabeza con pensamientos absurdos.
Caminaba apresurado por los pasillos de la empresa, con el sudor aun recorriendo su frente y parte de su nuca.
Esperaba que el pelinegro no se molestara por estar llegando tarde. Se encontraba nervioso, anoche le había dado tantas vueltas a ésa invitación del pálido, que hasta Hoseok se había quejado — Estás moviéndote como un gusano Jimin. Ya duerme — le había ordenado entre sueños.
Cuando estuvo frente a la puerta y a punto de tocar el timbre, el dueño de la misma, salía con una chaqueta negra doblada en el brazo izquierdo.
— ¿Por fin escapaste? — Le preguntó sin expresión aparente, asustando a Jimin cuando cerraba la puerta a sus espaldas.
—Y-yoongi h-hyung... P-perdón por llegar tan tarde p-pero... — El rubio no podía dejar de balbucear, ¡se encontraba tan frustrado! ¡Debió haber dormido temprano, debió haberse despertado a tiempo!... Sus ojos se aguaron. Apretó los puños. — De verdad lo siento, no quería dejarlo esperando...— Pero sus lágrimas no cayeron.
Yoongi acariciaba su cabello, aprovechando que Jimin tenía la cabeza gacha. — No te preocupes. —Y al darse cuenta de lo que hacía, bajo la mano hacia el hombro izquierdo del menor, continuando ahí las caricias. — Iré a comprar unas cosas, vuelvo en unos minutos. — Dándole una mirada evaluadora al rostro y cuello del contrario agregó: — Y tú deberías tomar un baño mientras tanto, para estar más relajado y fresco, Jiminnie.
Avergonzado, el menor retrocedió un paso, tomando distancia del pelinegro. —Iré a ducharme y volveré muy rápido, hyung. — Sus ojos se achicaron por la sonrisa que le dirigía al mayor, quien le devolvió una igual de grande. — Ya regreso. — Prometió. Volvió sobre sus pasos para ir a los baños y quitarse el sudor de las prácticas de baile.
Yoongi lo observó, aún con una sonrisa, caminar hasta que desapareció por una de las escaleras en el pasillo. Dejó escapar el suspiro que tenía contenido en el pecho.
Jimin no tenía idea de los sentimientos que creaba en él con su sola presencia.
Notas de la autora:
Muchas gracias por leer!
Nos leemos en el próximo capitulo!
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Importante - YoonMin
Fiksi PenggemarJimin lleva más de cuatro horas fuera del departamento. Yoongi no puede evitar sentirse culpable luego de ver al menor llorar y sólo ahí comprende la importancia que tiene Jimin para él. ~~~~ ❇YoonMin ❇Interacción NamJin ❇Mini Fic ❇Drama ❇Fluff *No...