CAP N° 15

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Creo que por fin mi vida comenzaba a ser algo normal, o la verdad, si, dentro de lo normal, ya que en si esto no existe.

Entre el último año de segundaria, los planes para mi futuro y todo, se me había olvidado lo que anterior mente o hace unos cinco meses atrás, serian mi camino o tarjeta al manicomio o así lo vea yo por lo menos, dejaron de pasar esas cosas raras en mi vida, respecto a los chicos bueno, tenemos una relación de amigos normal aun que no nos dirigimos mucho la palabra, el instituto es genial la gente de ahí igual lo es, la verdad no tengo mucho de qué quejarme, por lo menos estoy viviendo mi día a día como así lo quería hace unos meses atrás y disfrutar de mi vida.

Bueno y como todo día normal de Kendra, tenía que ir a mi cuarto a estudiar, había cambiado de opinión respecto a mis planes de futuro y estaba decidida a cambiar mi pensamiento de que quería, y quería estudiar medicina, aquí viene lo cliché que más de alguno de ustedes pensarán, que tal vez era obvio que estudiara eso porque son cosas de chicas y un millón de chorradas más, pero no, me gustaría especializarme en pediatría o ginecología, más que nada ginecología, así estar cerca del momento que den a luz las mujeres, y que ese día sea espacial, me gustaría cuidar de ellas... y que no pasen por lo que paso mama que tuvo que decidir por mi vida y dejar de ir la suya, se lo agradezco pero quiero devolver el favor y cuidar de más gente que lo necesita, tal vez por el error del doctor o por un mal cuidado se tenga que decidir por la vida de un apersona inocente, o de una madre esperanzada por la vida de su pequeño hijo, al cual querrá abrazar, ver crecer y cuando ya sepa que esta todo en paz, despedirse... que pase todo aquello que yo no tendré.

Pero creo que estoy hablando mucho.

Baje como un día normal a buscar algo de comer por que como todos los días, y como ya dije, estaba estudiando o repasando algo, baje a buscar una tostada y un poco de jugo de frutilla que se encontraba en la nevera al pasar por la sala estaban jugando a algo creo que eran video juegos, Aus y sus amigos, me saludan y yo solo muevo mi mano en señal de saludo.

-Más tarde haremos una fiesta, Cameron salió con mamá y estamos prácticamente solos-. Dice Austin yo ruedo los ojos y sigo caminando acomodo mi pijama tal vez algo de diversión no estaría nada mal, al llegar a mi cuarto me tire en la cama y encendí mi celular, la verdad me había dado sueño y recién eran las cuatro de la tarde como día viernes hoy solo tenía medio día de clases, maravilla, así que cerré mis ojos, ni si quiera comí aunque sea un poco, solo me quede dormida, suspiro y entro en el sueño.

Comienzo a caminar en el pasto, estaba descalza y con traje de baño, se escuchaba una música muy fuerte, bastante la verdad, habían personas por todos lados, bailando, besándose, bebiendo, hasta algunos vomitando, comencé a empujar a la gente yo solo quería llegar a mi cuarto, comencé a mirar la alfombra, hasta en los sueños caminaba mirando el suelo. Por accidente paso a chocar con alguien la verdad golpee mi cabeza con el pecho de algui.

-PERDON- digo alto y asustada, la verdad no había visto quien era, ni siquiera pensé, de quien había sido la culpa, levante mi mirada y me quede callada por un momento, vi un chico de unos grades ojos, eran algo verdes con azul y café, raros pero hermosos, sus facciones eran tan varonil que no lo sé, me agarro del brazo para que no callera y se veían sus fuertes brazos por esa polera negra con mangas cortas, suspiro y el levanta una ceja divertido.

-Vaya, pensé que no encontraría a alguien tan torpe como yo, y tan hermosa-. Dice y me suelta tocando mi frente en el lugar donde mi había golpeado.

-si perdón, fue culpa mía no fue mi intención lo juro-. Hago una leve mueca y lo miro el es mucho mas alto que yo.

-Bien, perdón te estoy interrumpiendo creo que debería ir a mi cuarto-.digo algo avergonzada y apenada.

-¿Vives aquí?-. Dice el mirándome con mucha atención como si no estuviera seguro de algo

-Sí, hace un par de meses, como cuatro más o menos, estaré aquí por un año o tal vez más, desgraciada mente para mí-. Digo caminando un poco y mirándolo.

-Yo también vi...-.

-¿disculpa?- digo algo confundida

-nada solo nada, nos vemos en la negra, más tarde tal vez, me gustaría conocerte más, pero no aquí.- lo miro muy confundida, bastante, no se a que se refería o que me intentaba decir, solo asentí, y seguí caminando mire hacia atrás pero no había nadie, me despierto brutal mente por sentir golpes en mi puerta, me levanto de la cama aun pensando en lo que había pasado hace un rato atrás, hace más de tres meses no tenía sueños, o cosas así tan realistas, me dispongo a abrir la puerta pero no era nadie, escucho música abajo y recuerdo lo que me había dicho Aus.

-la vendita fiesta-. Susurro golpeando mi frente.

Entro al baño y me doy una ducha, al salir seco mi cabello y me maquillo dejo mi cabello café con mis ondas y me pongo una falda tuvo, una polera negra corta con mangas largas y botones, unos zapatos altos cerrados negros y me doy el ultimo toque, bajo con ciudad jugando con mis uñas y mirando todo, siempre que hacían fiestas yo estaba fuera de la casa o durmiendo, jamás había visto una en este lugar.

-Saaaaaaaaaanto Dios-. Digo mirando todo con la boca abierta, no lo podía creer había gente hasta en la cocina estaba lleno al bajar las escaleras veo que algunos me quedan mirando, incluyendo chicas, se acerca Travis a mí y me abraza por la cintura, hago lo mismo con el pero lo el cuello.

-¿Querido hermano, que clase de desastre hicieron tú y Austin?-. Lo miro y más gente se detiene a mirarnos

-¿Que miran, jamás vieron a dos hermanos darse un abrazo?-. Me mira sonriendo.-ahora sí, pues esto, querida Kenny es una fiesta de la gran familia, y debes disfrutar-.

Me besa la frente y se va con sus amigos, sonrió, el en verdad era como mi hermano, es el único de la casa que me ayuda en todo y me presta atención, y no, no piensen mal, en verdad nos queremos como hermanos no nos queremos así como un amigo a otra amiga que al final de cuentas son amigos por que se gustan y solo es un pretexto para acercarse el uno al otro y terminar siendo novios, nada de eso.

Admitiré algo y la verdad es que jamás había tomado en mi vida, ni fumado, me fui con Travis y me dio un vaso con vodka sonreí y tome un poco, se sentía rico aunque algo malo a la vez, me miro raro al igual que sus amigas y amigos.

-¿jamás probaste alcohol?-. Me pregunta y me siguen mirando, asiento y miento.

-Si si per no suelo hacerlo siempre pero lo hago de vez en cuando.- digo, soy una mentirosa dios.

-Tu cara dice otra cosa-. El ríe y me mira sonriendo de lado.

-mi cara dice que a este vaso le hace falta más alcohol-. Tomo la botella de no sé qué y le pongo hasta arriba al vaso, me miran sonriendo y algunos sorprendidos, me tomo el vaso rápidamente, dios, sentía como mi garganta radia de una forma terrible, mis ojos se dilataron y se pusieron algo llorosos, me miraron atentamente y levanto mi brazo sonriendo y sacando la lengua.

-QUE LA FIESTA COMIENCE, PERRAS-. Grito sonriendo y todos gritan y aplauden camino a las escaleras algo mareado. –que comience... pero sin mí-. Susurro con ganas de vomitar y riendo. Me había mareado mucho y estaba sonriendo, me acorde que deje mi celular en mi pieza, en ningún momento lo tome, así que fui por el hasta que siento que alguien toca la puerta, me siento en la cama y abren la puerta, miro estaba a punto de preguntar quién era y abro la boca sorprendida más bien, asustada.

Behind My ShadowsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora