(*) Para una mejor experiencia, en este punto aconsejo poner la canción "7 seconds de Youssou N'Dour".
------------------------------------------------------------------------------------------------
La noche está ya cayendo y el rugido del motor vibra bajo nuestros cuerpos, a trompicones mientras trato de meter segunda antes de la rotonda.
- Vete por la primera salida. Aquí. Bien, tu ve tranquila que lo estás bordando. Cuidado, que ese va a cruzar.
Tal vez sea el primer peatón que vemos en toda la clase. Es invierno, y es tarde, por lo que la gente ya se recoge en sus hogares, dejando las calles desiertas y envueltas en una espesa bruma.
- Por ésta, gira aquí. Y cuando puedas, aparca. Aquí sólo se aparca en diagonal, así que lo tienes fácil.
Sin a penas dificultad, maniobro lo justo para dejar el coche aparcado entre otros dos vehículos.
- Madre mía, creo que si me saco el carnet, no cogeré el coche nunca con esta niebla. No sé cómo te has atrevido a darme clase en un día así... ¡qué poco valoras tu vida!
- Al final acabarás cogiendo el coche en todas las circunstancias...mi deber es que te manejes bien. El día del examen podría caer una tormenta y tienes que saber salir del paso.
- Bueno, sigo pensando que hoy me has dado mucha caña. Se lo voy a decir a mi padre, ya verás...
Te miro, sueltas una carcajada y tus ojos azules me llegan tan adentro que tengo que apartar la mirada.
- Venga, déjame al menos poner la radio. Dar clase sin música es muy aburrido. Y no quieres que piense que eres un aburrido. ¿A que no?
- No, de eso nada, no vas a conducir con música, que es una distracción.
- ¿Pero no dices que tengo que saber adaptarme a todas las situaciones? ¿Quién no conduce con música hoy en día?
Arqueo mis cejas inquisitivamente mientras acerco el dedo al botón de la radio.
- Oye, voy a tener que ser yo quien hable con tu padre para decirle que estás desafiando a tu profesor... No vas a encender la radio, niña.
- ¿Tú crees...?
Sin perderte de vista, rozo el botón de encendido con mis dedos. Diría que hasta me estoy divirtiendo, al ver como esbozas una media sonrisa, seguro de ti mismo.
- Venga, abuelo, si quieres te pongo Radiolé. - Añado con sorna.
- ¡Oye pero cuantos años crees que tengo!
- Bueno, de la quinta de mi padre eres, eso lo tengo claro...
Eras amigo de mi padre desde hacía unos pocos años, compartíamos urbanización en la casa de la playa y alguna vez habíamos ido juntos de excursión.
- ¿Me ves como a tu padre?
Noto cierta decepción en tu tono de voz, pero rápidamente cambias tu actitud y enciendes la radio.
- Ala, para que no me llames viejo. Pero cinco minutillos, que en cuanto arranques y te pongas a conducir, la quiero apagada.
Sonrío y se me ilumina la mirada. Está empezando una canción de ritmo suave (*). La letra está en un idioma que desconozco, parece árabe. Justo cuando me dispongo a cambiar de emisora en busca de otras melodías, detienes mi mano con la tuya y me lo impides.
- Déjala. Esta canción es muy buena.
- No me suena para nada...
- Shh... Escucha. Seguro que el estribillo lo conoces...
ESTÁS LEYENDO
Extractos vitales.
NonfiksiRecopilación de escritos realistas sobre vidas diferentes, solo aclarar que aunque están en primera persona, no son mas que fruto de mi imaginación y de historias de personas próximas a mi, solo quiero plasmar el dolor, el estrés, la incomprensión y...