Continuación del one-shot del Día 19
El gran día ya había llegado y estaba más que emocionado pues se unirá al amor de su vida para toda la eternidad pero por más feliz que estaba no podía dejar de pensar en que algo malo pudiera pasar, era normal pensar eso no? Los llamados de su amigo, quien lo ayudaba a prepararse, lo sacaron de sus pensamientos
-SHIRYU! dios mio pense que tendria que golpearte para que reaccionaras- se quejaba el castaño mientras terminaba de arreglar su largo cabello
-perdón Seiya pero solo estoy pensando en la boda- el mas bajo arqueo una ceja
-que no quieres casarte?- preguntó sorprendido a lo que dragón solo abrió los ojos y lo golpeó en la cabeza
-claro que si! pero...tengo miedo de que las cosas cambien de cómo son ahora, tengo miedo de que ambos dejemos de ser como lo somos ahora- confesó el pelinegro
-eso nunca va a pasar- comentó con una sonrisa- yo soy uno de los testigos de que ambos se aman con locura, dicen que cuando dos personas se casan muestran sus verdaderos yo pero ustedes siempre fueron sinceros desde el principio, al igual que su amor
-Seiya tiene razón- se escuchó otra voz entrada a la habitación
-Hyoga, pensé que estabas abajo arreglando el lugar
-mi maestro lo está haciendo- se sentó en la cama- un día Shun y yo fuimos a la ciudad, como siempre Ikki nos estaba cuidando, pasamos por un tienda de diamantes y cuando nos dimos cuenta Ikki estaba dentro de la tienda comprando algo, cuando salió nos dijo que pensaba pedirte que se casaran, él no dudo ni un momento en unirse a ti eternamente y hoy, el día de la boda, piensas echarte para atrás por tus estúpidas inseguridades?- tanto dragón como pegaso se quedaron sorprendidos por las palabras del cisne pero después de unos segundos Shiryu reaccionó
-tienes razón Hyoga- el rubio sonrió- el amor que le tengo a Ikki es más poderoso que cualquier cosa en la tierra, Seiya! ayúdame a prepararme!- el castaño hizo un saludo militar para después ayudar a su amigo a estar listo para la gran hora, Hyoga con una sonrisa por haber logrado su cometido salió al patio de la mansión, que ya estaba más que listo para la ceremonia
-Hyoga!- tembló al escuchar esa voz tan fría y terrorífica- se supone que me ayudarias a arreglar esto
-Maestro...- sin duda temió por su vida al ver al caballero de acuario acercarsele amenazante- AYUDA!!!!! LLAMEN A MILO SOLO EL PUEDE DEJARLO TRANQUILO!!!- gritaba el cisne mientras trataba de salvarse
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Esperaba en el altar a que su pareja llegara, el juez estaba delante suyo junto con el patriarca y su diosa, a un lado suyo se encontraba su hermano junto con su cuñado quien tenía heridas de pelea en el rostro. De pronto la marcha nupcial comenzó a escucharse y pudo divisar a el amor de su vida acercarse a paso tranquilo con una sonrisa en el rostro, apenas llegó al altar le extendió la mano para que ambos estuvieran frente a quien los uniría en matrimonio, se lanzaron una mirad fugaz durante la ceremonia prometiendo amor eterno y verdadero.
