Imagina con BTS

004┇Fame; (JN y tú).

— ¡Adiós, querida! —se despide la amable señora Yang Min que matutinamente me espera con una taza de café como pago por llevarle el periódico a su puerta.

—Adiós "madame Min"— así es como la suelo llamar desde que nos volvimos más cercanas—, el café estuvo delicioso, como siempre.

Termino de agradecerle y subo a mi vieja y rechinante bicicleta rumbo a la próxima calle. Esto es básicamente lo que hago cada mañana. Lo hago para ayudarle a mamá con los gastos, ya adivinaran que nuestra situación económica no es la mejor.

Luego de tal vez quince minutos de entregas me siento en un andén por un momento para descansar las piernas y aprovecho para ojear por un momento las noticias nacionales. La sorpresa es grande al ver el encabezado: "El rostro de la fama". Trataba sobre el actor y cantante del momento, Kim Seokjin, lo rápido y lejos que ha llegado al ser tan joven.

De repente el corazón se me estruja al tener una guerra entre la señora felicidad y su esposo tristeza. Se les une la impotencia y el orgullo.

Les contaré brevemente mi situación porque estoy segura que no han entendido lo que sucede; Kim Seokjin no era nada más ni nada menos que mi mejor amigo, mi hermano, mi confidente, mi hombro para llorar y muchas veces mi repelente "anti-idiotas". Pero sobretodo, fue, es, y será mi primer y más grande amor. Nunca se lo dije por temor a arruinarlo todo. Es lo malo de ser tan dependiente de alguien, si se llega a ir es como si una mitad tuya se fuera con esa persona. Bueno, eso es exactamente lo que me sucedió con él, era mi todo, hasta que me abandonó. La verdad es que estoy feliz que lo haya hecho, salió de esta miseria para juntarse con las personas que merece.

Él solía ser igual o quizás más de "escasos recursos" que yo. Aún recuerdo como si fuese ayer cuando se deleitaba hablando de lo mucho que deseaba aparecer en televisión, protagonizar una película y besar a Kim Kardashian. Yo solía escucharlo casi todos los días hablar sobre ello. Y solía ser la única persona que lo escuchaba cantar, es la voz más hermosa que jamás escuché. Recuerdo que me cantaba cuando estaba triste, cuando estaba a punto de llorar él lo hacía para detenerme.

Lo extraño, lo extraño tanto que duele. Duele verlo en televisión y no poder gritarle cuan orgullosa estoy de él, lastima no expresarle cuan celestial y hermoso luce, hiere no tener la oportunidad de darle un abrazo como solía hacerlo. Duele no poder decirle cuanto lo amo. Porque si, aun guardo ese amor infantil y enfermizo en un bolsillo de mi corazón, y eso me hace detestarlo. Detesto no tenerlo a mi lado, detesto que no esté aquí para gritarme cuan tonta soy, odio no ser quien escucha sus chistes malos, aborrezco no saber cómo se encuentra. Lo odio.

Pero no me arrepiento de haberlo alentado a aceptar esa entrevista, no me arrepiento de nada, en cierto modo me hace sentir que hice un gran trabajo al haberlo empujado en aquel bus, rumbo a Seúl. Solo espero que aun tenga un mínimo recuerdo de mí, aunque sea pequeño y estúpido, con eso me siento recompensada.

Como sea, esa es nuestra historia. Lamento si no lo entendieron, algunas veces me dejo llevar por la emoción, ya saben, solía ser un chico muy genial.

Limpio algunas rebeldes lágrimas que se fugaron y retomo mi camino.

Espero que en donde sea que se encuentre sea feliz.

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Bueh, casi me suicido con un masmelo mientras lo escribía.

Y no es porque yo lo haya escrito pero, chama, me encantó, kpena. En fin, espero que a ustedes igual les haya gustado, comenten qué tal, no los voy a morder (o tal vez si, 7u7). Y pos, solo quiero decir que gracias a todas aquellas personas por leer, por sus votos y por sus comentarios. Ya saben si quieren que les escribamos una historia o lo que sea, por favor, lean la descripción. Vemos loks.

— ttnxrm.