Ilusiones|♱ |TaeGi| #1

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-¡¿Alguien puede ayudar a Suga?!—la pequeña reunión que había organizado el CEO resultó un desastre de bebidas, la mayoría de los chicos estaban ebrios o medio tambaleantes, lánguidos a su caminata hacia el departamento. El más afectado era YoonGi, quien se bebió más de lo que había planeado, variando del vino a la cerveza, tragos mezclados o rebajados.

¿Qué era lo que pasaba para que Min YoonGi, el genio, necesitara ayuda? Fácil, no podía subir las escaleras sin tropezarse y bajar cinco escalones de culo, hablaba incoherencias y decía que si no lo subían se iba a quedar durmiendo a medio pasillo.

El único sobrio que veía la situación graciosa, Taehyung, tuvo que ayudar a su mayor a regañadientes, cargándolo con una mano sobre la cintura para equilibrar ambos cuerpos y un brazo de YoonGi detrás de su nuca. 

—Hyung, apesta —Taehyung ya estaba muy cerca del cuarto de los dos mayores, escuchaba a SeokJin hablar bastante animado con un peluche para evitar dormirse. 

Taehyung entró con el cuerpo de Suga trastabillando en el marco de la puerta, forzando a arrastrar el delgado cuerpo de su mayor hasta la cama. Todo estaba oscuro cuando YoonGi se lanzó a su cama, llevando consigo el cuerpo de V. 

SeokJin ya roncaba con el peluche sobre su cara y medio cuerpo fuera de la litera, YoonGi se estaba durmiendo y Taehyung se quería ir, la situación le agobiaba en demasía.

—Buenas noches, Hyung— murmuró tratando de escurrirse de los brazos de su mayor para ir a su cuarto y dormir en su cama correspondiente. Se encontraba muy cerca del rostro de Suga, porque la respiración ajena le hacía cosquillas sobre su cuello.

Palpó el cuerpo de YoonGi relajarse por completo, sucumbiendo al placer de dormir después de una buena noche. Dejó caer sus brazos que anteriormente se sostenían detrás de la nuca de Taehyung a sus costados, cerrando los ojos por completo y dejando escapar ligeros ronquidos de sus labios medio abiertos.

Kim Taehyung miró a YoonGi con ternura, descubriendo colores carmesí sobre su linda piel y sus pequeños belfos. Sin poder contenerse, sabiendo que estaba escondido en la oscuridad del cuarto, bajó poco a poco su cabeza, encontrándose a sí mismo acariciando su nariz con la de su Hyung. 

Con mucho miedo pero valor, dejó caer sus labios contra la comisura de Suga por un instante sempiterno que terminó cuando la caricia se comenzaba a formar un ósculo; un beso más allá de una simple caricia sobre la mejilla.

Se separó, y apreció a YoonGi dormitar con calma, inconsciente de su alrededor.

Taehyung ocultó un sollozo sobre su garganta: 

—Lo siento... 

  

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Necesito que comenten para saber si estuvo bien u.u me siento insegura respecto a mi escritura, soy un bebé ;u; tengo 14 añitos!