Ilusiones|♱ |TaeGi| #1

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—Taehyung tuvo un pico de estrés y un ligero colapso emocional; por lo que me han dicho todo concuerda a esas dos opciones— el doctor privado de los chicos hablaba con el grupo, resguardando a Taehyung en la habitación de SeokJin para que encontrara un poco de calma—. Necesita descansar y estar alrededor de personas que le ayuden a despejar malos pensamientos, estará sin ensayos de baile y canto por un tiempo ya que se niega a hablarme. Cualquier cosa, ya tienen mi número y su mánager está al tanto de todo. 

Los chicos vieron salir al hombre de edad salir por la puerta de su apartamento dejando un alivio en sus corazones. YoonGi había llamado a SeokJin gritándole que V se había desmayado y que poco después comenzó a tener fuertes espasmos; por suerte llegaron a tiempo. Todos se quedaron mirando la madera de entrada, hasta que Jin se dio media vuelta y clavó su mirada molesta ante los ojos penetrantes de Suga.

 —¿Qué hiciste?—comenzó a hablar, mirando cortante a YoonGi, notando su escasa vestimenta que se reducía a una toalla de cuerpo completo. HoSeok no podía mirar a nadie, jugaba con sus dedos al igual que Jungkook mientras que los restantes viraban a sus compañeros entre ligeros reojos.

 —Bueno... Yo-

— ¡¿Qué mierda hiciste, Min YoonGi?!— el grito de Jin provocó que todos sobresaltaran de sus asientos, apreciando con temor la cara roja de la ira del mayor del grupo—. Sabías muy bien que Taehyung estaba en una situación delicada, con su novela, la noticia de su abuela y su inesperada confesión hacia ti— YoonGi se sintió avergonzado entre tantas miradas, sin saber dónde esconderse de esos ojos acusadores.

—Yo... Yo pensé que Tae-

—¿Que Taehyung quería un revolcón?—concluyó NamJoon, hablando entre dientes y cuidando de sus palabras. No podía creer que una persona a quien le tenía tanto respeto fuera tan negligente.

—Es Taehyung-Hyung de quien hablamos—opinó Jungkook, decaído. Nunca había visito tanto dolor en su mayor más alegre, ni que éste fuera tan frágil.

—Vale... Iré a disculparme ahora—sus intentos de levantarse fueron en vano por culpa de un dedo acusador, algo chueco que se acompañaba de una mirada severa.

—Tú no puedes acercarte a Taehyung, no lo lastimes más de lo que ya está—la situación tenía a todos delicados y en contra a YoonGi; por culpa de él la persona más sonriente del mundo terminó bañado en dolor y varias pastillas. 

—¿Y dónde voy a dormir? Te recuerdo que mi cama está dentro de tu cuarto—aclaró YoonGi, volviendo a tener ese habla tosco e indiferente.

—No te queda más de otra que dormir en el cuarto de Taehyung—susurró HoSeok ligeramente, sin levantar la vista y conteniéndose a sus sentimientos... Toda la situación le exasperaba, le ponía muy de malas.

Hubo varios insultos de por medio, hasta que la suave voz de Jimin interrumpió todas las blasfemias que atravesaban la sala:

—«Taehyung es una persona muy delicada en el amor: puede dar todo y salir lastimado, o no puede dar nada e ignorarte», usted dijo eso, YoonGi. No mienta a sus propias palabras.