Capitulo 6

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Con mi ultimo comentario provoqué un gran revuelo, tan así que al día siguiente terminé en una pequeña prisión ahí en la base.

Ahora ademas de que tenía que pelear una guerra, debía de pelear con un pelotón que no iba a confiar en mi.

En la mañana siguiente me habían sacado por pedido de Diana, ella les contó mi historia a mis compañeros, me llevaron a una sala donde estaban todos en mi espera, haciendo una ronda, y en el centro estaba la sargento junto con una vendada Diana. Me acerque a ellas y esperé un golpe, o algo simple, pero Vallejo sacó un arma y con esta me apunto en la frente. Karla y Aixa quisieron saltar en mi defensa, pero varios las detuvieron.

-Convenceme de no tirar del gatillo- dijo entre dientes.

-Quiero matar a mi padre mas que nadie en este salón-empecé.- ¿Para que mierda me hubiese unido a este pelotón, matar amigos de la infancia, y arriesgar mi vida si no hubiese sido porque no comparto las ideas de Adolf Hitler?- No sentía miedo, tenía mi cara totalmente neutra.-Disparame y le haras un favor a Heinz Guderian, dejame ir y haré sufrir a ese hijo de puta, lo hare sufrir de muchas maneras, y luego lo matare lentamente.- dije mirando a los fríos ojos de Vallejo.

-¡Dejalo en paz!- gritó Sergei, saliendo de una ronda de gente- este hombre salvo la vida de Karla, y de Diana, este hombre ha matado tantos nazis como nosotros, para mi no es un nazi salvaje, es un hermano.- dijo Roldaun.

-Puede que sea un nazi, pero ha demostrado que vale.- Dijo Mei- No dejaré que maten a un amigo.

Cuatro personas salieron de la ronda, solo cuatro, Karla, Aixa, Sergei y Mei estaban a mi lado, ellos eran mis amigos, los demas no confiaban en mi; eso lo iba a tener en cuenta para siempre.

La coronel bajó el arma y me miró a los ojos, Diana tambien me miraba.

-Lo siento muchacho.- dijo Belén.

-Gracias.- le dije a Diana.

Ella asintió con la cabeza y se alejó lentamente, seguramente volvía a la enfermería.

-Aun la mayoría como verás, no confía en ti, pero todos estan de acuerdo con tu plan.- Me miraba con duda. -Necesitamos organizarnos, es tu plan, ¿Que deberíamos hacer?.

-Deberiamos atacar alguna base en Alemania, alguna pequeña, limitrofe y robar suficientes uniformes e identificaciones, eso lo haremos este grupo de cinco- dije señalandome a mi y a los que estaban a mi lado.- Lo mas probable es que ataquen por el norte, ahí segun habré escuchado a mi padre, los franceses son mas vulnerables. Deberíamos de colarnos de noche, un día antes de el ataque, ya que la mayoría de nazis se unen a hablar respecto al plan, entonces nos meteremos en esa reunion y a partir de ahí ayudaremos a los nazis, sin ayudarlos.- dije mientras todos me miraban extrañados.- hoy mismo llamaremos por radio a cada rincón de Francia, de que se haga una buena evacuación y dejaremos que se hagan con Francia, ya los terminos legales no son asunto mío, pero luego de que se alzen las banderas nazis, se hara un festejo a favor de la victoria entre los altos mandos que participaron en esa misión, entraremos, y mataremos todo lo que se mueva.- terminé.

-Pues bueno, deberíamos empezar con los uniformes.- dijo Jeremy.

-Bueno...- mire a mis cuatro amigos.- ¿Estan listos?.

Elegimos una pequeña base improvisada a las afueras de Saarlouis en Alemania, era un cuadrado perfecto, bastante grande. La vigilancia no era la gran cosa, solo habia una torre con un soldado en ella en cada una de las esquinas de la base; no sería muy dificil.

El soldadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora