Llegaba la fecha de su cumpleaños y el simbolo de la paz se estaba preparando mentalmente para la cantidad de regalos que recibiria, si bien sus fans no sabian con exactitud su edad si sabian la fecha en la que cumplia y eso hacia que muchos fans de todo el mundo se alocaran un poco demaciado de la emocion...
Amaba que sus fans le regalen cosas y cartas, poder leerlos y sentirce alagado, lo hacia muy feliz. Pero siempre estaban los fans que le enviaban cosas exoticas como serpientes, arañas, ropa interior y frascos con liquidos de dudosa procedencia. Por lo general muchos de los juguetes los regalaba a orfanatos u hospitales, haciendo asi un acto de caridad ya que no podia meter 1000 peluches de All Might en su apartamento.
Pero este año hubo un peluche que le llego al corazón.
Estaba junto al director leyendo y disfrutando las cartas de sus fans que mandaban a la U.A.
Cuando Aizawa entro con una regalo, de tamaño mediano y decorado con pepel rojo, blanco y azul.
-Toma. - dijo Aizawa mientras le tiraba el regalo directo a la cara del rubio.
-Ohhh, Aizawa-chan, no sabia que tenias un lado sentimental~-
Si, el pequeño mamifero disfrutaba de estas cosas. Pero antes de que el simbolo de la Paz pudiera mediar palabra nuestro profesor hablo cortantemente.
-Nada de eso, esa cosa- señalo el regalo- te la manda Midoriya.
Y sin decir mas se fue. El rubio parpadeo varias veces, miro al director quien le sonreia alentandolo a abrir el regalo.
Rompió la emboltura y abrió la caja de carton, saco un peluche de si mismo, pero no de All Might, sino de él mismo, de Toshinori.
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No se dio cuenta cuando sus ojos se humedecieron, tomó el peluche que parecia echo a mano. Recibia muchos peluches de él, pero nunca recibio un peluche de él en verdad.
Sonrió y seco esa lagrima traicionera que bajaba por su cara, leyo la carta que venia con el pequeño él. Sintió como el orgullo y la emocion llenaban su cuerpo.
