MUSA (PAUSADA)

Pasado

1000 views... casi lloro, de verdad cada comentario, cada estrella cada lector fantasma me hace muy feliz, me llena de motivación, aunque todo mundo lo dice créanme es cierto que no me esperaba tan buena respuesta 

Se puede ser mejor, por ustedes y por mí lo seré, ¡mil gracias!, espero no se estén aburriendo con el curso de las cosas 

Los recompensaré, pueden sugerir su premio "tal vez" sea escuchado...

Nayeon de pronto se sentía como una niña otra vez, mirar a aquella chica le causaba tanta fascinación y ganas de descubrir un nuevo mundo, estaba decidida a acercarse a toda costa, buscar una nueva amistad tal vez

La causante era Mina una japonesa tímida pero elegante a cada paso, su sonrisa despedía la dulzura encarnada, sus ojos haciéndote sentir como en casa, su voz acariciándote con amabilidad era imposible no sentirse inundado por ella, era imposible apartar tu vista de ese semblante en el salón de clases

Tenía pocos amigos y no hablaba más de lo necesario, era despistada pero inteligente y curiosa

Esta fue la primera vez que Nayeon sintió miedo en hablar con alguien, el solo pensarlo hacia su corazón acelerar, el nerviosismo se apoderó de ella en varias ocasiones y terminó huyendo cuando tenía oportunidad de entablar conversación con ella

De alguna manera se convenció a sí misma de que no era para tanto, debía ignorar su miedo y cruzar unas cuantas palabras con esta persona que le resulta más que interesante

El 3 de octubre, día lluvioso, se dio una oportunidad más clara que el agua, la clase de filosofía llegó a su fin y unas 4 personas cuando mucho rondaban por el salón, todos habían salido emocionados a merendar, incluyendo a la japonesa y su amiga más cercana Jihyo

Nayeon se esperó a que el salón se vaciara solo por una razón, cuando miro el puesto de la ahora ausente japonesa notó que esta había dejado atrás una de sus pertenencias, un cuaderno pequeño y curioso, su diseño muy original, la pasta era de un morado oscuro con efecto brillante

Así que espero nerviosa a que nadie notara aquel cuaderno y decidiera devolvérselo a Mina como ella planeo

Su impaciencia le ganó y se paró de una vez dirigiéndose al puesto de Mina, incluso la idea de tocar aquel cuaderno le parecía peligrosa, sería como entrar a un laberinto y probablemente no querer encontrar la salida, con ojos brillosos se quedó admirando la libreta a poca distancia y sin pensarlo, como un impulso natural abrió el cuaderno

La caligrafía de la chica era impresionante pudo alcanzar a leer algunos títulos de temas que habían visto en la clase de filosofía, Nayeon se dio cuenta que era una de las materias favoritas de Mina, pues se la pasaba tomando notas toda la clase, su atención escrita en todo su lenguaje corporal, su rostro adoptaba un semblante serio pero profundo, características de la pasión y es la única clase en la que alguna que otra vez soltaba una que otra opinión

Sus notas estaban llenas de reflexiones propias, más entendibles que los textos que leían en clase, había unos cuantos párrafos escritos en japonés, Nayeon paso su mano por las marcas de pluma con adoración, se encontró tan perdida en aquellas letras que dejó de percibir lo que pasaba a su alrededor

Para su mala suerte Mina recordó que no recogió su cuaderno y volvió al salón de clase encontrándose con la escena de la coreana husmeando en sus apuntes con una expresión extraña, se sintió un poco molesta con ella, pues jamás habían cruzado palabras y la chica en cuestión tenía fama de arrogante, si a ella le interesaban sus apuntes al menos pudo pedirlos con cortesía, pero extrañamente también identificó vergüenza y vulnerabilidad en su pecho, sus emociones varias veces se volvían turbias al estar cerca de la pelinegra o cuando la encontraba mirándola fijamente, Mina supuso que no le agradaba a la ajena y ante ese pensamiento su corazón encogía