Take my breath away

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El puente de su nariz, el nacimiento de sus labios, la suavidad de su piel y ese color rosado hipnotizante de las curvas invitándome a besar como si no hubiera un mañana, tengo miedo de hacerlo y no poder parar, no querer parar.

Esos ojos, mis favoritos, los que solo me miraban a mi hace unos minutos ahora están cerrados naturalmente, aunque ya no me miran me regalan la vista de un semblante calmado que me trae paz.

Si no puedo reclamar esos labios como míos en territorio escolar podría morir, así que encuentro un sustituto, algo que me ayude a aguantar hasta que hayamos salido de la zona de peligro, entonces mis dedos dibujan su contorno, tratan de memorizar cada detalle, cada sensación, le ruego a mis dedos que no olviden nada.

Mi roce es delicado casi con miedo, porque es así como acaricias un pétalo, algo frágil, lo que tiene valor, con delicadeza cuidando que no se desvanezca en tus manos y ella sonríe, aunque no se estiren las comisuras, lo sé.

Nayeon tiene una costumbre, siempre besa la palma de mi mano y mi reacción siempre es la misma, unas cosquillas en el estómago y el corazón acelerado, la falta de aliento traduciendo un éxtasis, amo su costumbre.

-¿Cómo estás? –mi voz sale boba, ella rié abriendo los ojos

-No sé ¿Cómo estoy Mina? –me abraza dejando un beso en mi cuello

-Hermosa –contesto en su oído en respuesta me estruja más fuerte

-Mina

-¿Hmm? –la contengo aun en mis brazos

-Hoy hubo un avance

Me separo y la mire sorprendida

-Chaeyoung me sonrió... no sé, me lo pude haber imaginado, pero recuerdo tan bien esa sonrisa

-Te creo

-No me des la razón solo porque te traigo loca

Pellizque su mejilla lo que produjo que hiciera una mueca adorable

-Yo estaba planeando hablar con ella

Me empujo y caí en mi espalda contra el pasto, procedió a acomodar su cabeza en mi pecho, nunca contesto

-¿Crees que es una mala idea? –la cuestioné

-Pienso que si tienes algo que decirle deberías hacerlo

Me fue inevitable no plantarle un beso en el nacimiento de su cabello

-Tal vez sea ella la que necesite decirme algo

-Entonces está decidido

Curiosamente sonreímos y asentimos al mismo tiempo

-¡AH! Para por favor –me lleve una mano al pecho y ella se incorporó alarmada

-¿Te aplaste?

-Deja de sonreír así que se me sale el corazón

Involuntariamente sus comisuras se levantaron

-¡AH! No de nuevo Nayeon-ah ¿quieres matarme?

-¡Eres una tonta! Me asustaste –empezó a atacarme con manotazos, trate de luchar para sostener sus brazos

Ella reía macabramente haciéndome saber que ama golpearme, ágilmente atrapé sus brazos y la hice mirar mi expresión seria

-Todo va a estar bien, ella regresará a ti pronto

-¿Y tú?

-Aquí estoy, no me voy a ir –susurré acercándome a su rostro, pero la palma de su mano me atajo cuando se estrelló contra toda mi cara

MUSA (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora