RINNE

5.-Fantasmas

La misma advertencia de la vez pasada. Capitulo algo largo, con un tanto, quizás mucho, OCC. Mas cosas sin sentido.Muchas separaciones.

Capitulo 5.-  Fantasmas

Yuya, ya es de mañana recuerda el desayuno, yuya

-¿Yugo? –se sentía agotado, no entendía porque si esta vez no había tenido que estar en aquella infernal silla

¿Te sientes bien? Luces un poco mal

-Me siento muy cansado como si no hubiera dormido nada y...esta no es mi ropa-tenía algo de frio en sus piernas y brazos, ese short y camisa no eran suyos

Luego te explicare sobre eso, ve a desayunar con tu papa –le animo sonriéndole de un modo distinto a lo usual dejando al chico de standard un poco distraído

-Gracias, Ah tu cabello –señalo notando lo diferente que se veía sobre todo porque el cabello azul estaba caído, era mas largo

¿Uh? No le veo lo raro

-No le tomes importancia - sonrió, entendiendo que de verdad su contra parte de Synchro usaba algo para acomodar su cabello.

Se quedó viendo como intentaba levantarse batallando al principio pero después de un rato todo era normal.

Volvió de nuevo a "la casa" no le gustaba para nada la sensación que había allí, mucho menos los fantasmas que hacían de las suyas con sus contrapartes

Es mi culpa

Chasqueo la lengua, tenía que pensar en algo antes de que yuya se diera cuenta de lo que pasaba. Era un tanto problemático que el chico fuera capaz de sentir como se encontraban los demás aquello solo lograría borrarle la sonrisa sincera junto con el ánimo que tenía cuando estaba alado de su padre.

Es mi culpa lo siento, lo siento, lo siento

Yuto... tienes que despertar maldita sea-abrió la puerta de la habitación del pelinegro que se le escuchaba quizás más calmado de cuando le encontró pero eso no quitaba que estuviera bien

Lo siento...si yo no...están muertos por mi culpa, todos murieron por mi culpa

Encendió la luz logrando verle cubierto lo más que podía por las sabanas, llevaba mucho tiempo llorando pidiendo perdón, lamentándose. Le parecía intrigante que las lágrimas fueran un tanto brillantes y raras.

Parecía estar en trance ni reaccionaba cuando le llamaba por su nombre. Se acercó a grandes zancadas para abrazarle

Vuelve a ser el mismo, antes de que yuya lo note y se preocupe

Muertos por mi culpa

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-¿Cómo dormiste yuya?

-Creo que algo torcido –respondió llevándose otra cucharada del cereal -¿Qué aras hoy papa?

-Seguiré coordinando todo para ya abrir lo más pronto posible pero ¿Qué hay de ti? ¿Te quedaras también mañana?

-Sí, debo aprovechar todo el tiempo posible para lograr que al menos Yuri confié un poco en mí

-Ten cuidado y recuerda que estaré aquí para ti

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Gracias por cubrirme yuugo

¡Es!...olvídalo –se detuvo respirando hondo para evitar corregirle, cruzándose de brazos – ¿Seguro que estas bien? Luces demasiado mal lo que sea que te haya pasado te ha dejado con un pésimo aspecto