Capítulo 8.

160 14 4
                                    

No sé exactamente cuanto tiempo pasa, ni me interesa saberlo, yo sigo en la ducha después de haber echado a Wall-e cerrándole la puerta casi en la cara. 

Mi cabeza se encuentra ahora mismo como el viejo globo terráqueo que teníamos en clase de geografía; dando vueltas a merced de alguien quien lo mueve a su antojo, sin importarle nada más que verlo girar. Y ese alguien era, como no, el pringado que tenía por vecino, el que desde el día que lo conocí se ha propuesto desequilibrar la balanza que, hasta entonces, consideraba que era mi mundo.    

Mucho rato después de tanta reflexión, por mi cuerpo comienzan a resbalar gotas de agua fría, demasiado fría, anunciándo la inexistencia de más agua caliente en el termo. Por lo que decido que es hora de concluir mi momento de reflexión y salir de la ducha. Giro la llave del agua cerrándola, cojo la toalla que había dejado sobre el lavabo y me envuelvo en ella, recojo mi ropa y me dirijo a mi cuarto.

Tiro mi ropa, la cual había llevado puesta esa tarde, a la cesta de la ropa sucia, quedando una tira de mi bikini por fuera de ésta. Al verlo no puedo evitar rememorar, una vez más, lo sucedido esa extraña tarde... no puedo evitar volver a reír, quizás demasiado alto, quizás demasiado profundo.

Justo entonces, el sonido de una vibración cobra protagonismo en la habitacion e inmediatamente un recordatorio tan fugaz como un rayo atraviesa mi mente. Comienzo a buscar mi móvil por todas partes, hasta que al fin lo consigo.    

Efectivamente, tenía 2 mensajes de whatsapp, los cuales me aventuro a abrir lo antes posible.        

Es Alex. Suelto todo el aire que mis pulmones estaban conteniendo sin que mi cerebro estuviese enterado. Sin saber muy bien por qué una oleada de un sentimiento muy similar a la decepción inunda, poco a poco, todo mi cuerpo. No me apetece responder en este momento, aún así opto por abrir su chat, después de todo, quizás sea algo importante...

Alex: - Mi niña ¿Cómo estás? ¿Te apetece ir hoy al cine? Vamos a ir varios amigos y pensé que sería una buena ocasión para que conozcas más gente.

(20 minutos después)

Alex: Willy me ha llamado y me ha dicho que vendrías con él ¡genial!, aqui nos vemos preciosa.

-¿Qué? ¿Qué yo voy a dónde con quién?- Me pregunto a mi misma, mientras que el sentimiento de decepción que hace solo un momento dominaba mi cuerpo se ha reemplazado por un sentimiento aún más destructivo. La rabia. -No , no, no.. yo no voy a ningún sitio y menos con ese energúmeno. ¿Qué se ha creído ese chaval?¿Qué puede controlar y planear mi vida? Pues no, la lleva clara si piensa eso.

Estoy enfurecida, muchísimo, tanto que no soy capaz de percatarme de que han tocado el timbre y de que debo abrir la puerta. La segunda vez que tocan es cuando asimilo, al fin, que ese sonido proviene de la puerta por lo que me decido a ir a abrirla, cometiendo el grave error de no mirar por la mirilla.

-¿Qué? - pregunto sin nisiquiera ver de quién se trataba. -Ah, que eres tu...- arrastro pensativamente la última vocal. Cojo aire dispuesta a disparar mis palabras como si de una Ak-47 se tratara.

- Contigo quería yo hablar. Mira no se quien te has creido y sinceramente tampoco me interesa. Vas por la vida con una actitud de super héroe y resulta que eres el que más necesita ser salvado. No quiero saber nada de tí, quiero que me dejes en paz, desde que te pusiste a gritar la otra noche como un loco hasta que apareciste sobrevolando la piscina para luego hundirte demostrando, por cierto, lo buen socorrista que eres, no has hecho nada más que darme dolor de cabeza y cabrearme. Lo siento, no me gusta la gente como tú, así que hasta luego.- cierro la puerta impidiéndole así su "contraataque". Me apoyo de espaldas a la puerta, mis piernas ceden y me dejo resbalar suavemente por ella hasta encontrarme en el frio suelo. Es curioso, se supone que debería de sentirme aliviada pero siendo sincera, siento exactamente el antónimo a esa palabra...

-¿Qué cojones te pasa Kayra? - me pregunto a mí misma, esperando que surja una respuesta que explique todo esto, pero lo cierto es que no lo hace...

Fantasías Indefinidas(Willyrex fan-fic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora