El discurso de los siete vientos

capitulo uno: El ladron

El comienzo de la historia... a la mierda con el comienzo de la historia

Alex

La campana que anunciaba la salida, comenzó a sonar.
Tome mi mochila y salí por la puerta del aula a la cual asistía. Salí por la entrada de la escuela, que si la veias de lejos aparecía ser la escuela mas grande del mundo.

Pare en una pequeña banca, deje mi mochila y saque mi reproductor de musica y mi gorro. Mi gorro, mi querido gorro, este era de lana de aplaka, teñida de los colores del arco iris.

De vez en cuando me sentía solo, pero siempre que usaba mi gorro me sentía acompañado de algo que me guiaba. Me puse los audífonos, seleccionando una canción de una pequeña play list de openings, me coloque el gorro encima, y camine hacia mi casa.
Pero antes me asegure que nadie me seguía. Corrí lo mas rápido que pude hacia mi casa.

Cuando llegue me invadió un pequeño temor, la puerta de mi departamento se encontraba abierta.

Pare la musica, y busque en mi mochila mi navaja de un filo ,con la punta puntiaguda y brillante.
Siempre la traía no importaba cual  ocasión  ya que tenia un acosador.

Si, tengo un acosador. Me sigue adonde quiera que vaya, sin importar adonde fuera, ya sea en la escuela
o hasta en lo profundo del bosque.

Me acerque a la puerta con la navaja en la mano, cautelosa mente entre.

Pero al entrar no encontré ningún desastre. Lo que encontré fue  un caja de color verde despintado y una rosa negra.

A simple vista se notaba que la "caja" era una especie de cuaderno, muy ancho.

Pero la ROSA, eso si es demasiado cursi para mi.

¿Que clase de persona no sabe que no me gusta que me regalen flores?

Esa persona estaría muy equivocada al admitir que me gustaban las cosas cursis. Pero un pequeño detalle que no había notado era que la rosa era de un color negro.

La persona me conocía bien, sabia que el color negro participaba en mi día a día como preferencia de color.

Recapitulando me di cuenta de un error que había cometido el o la ladrón al salir o entrar. La puerta se encontraba abierta.

¿Cual seria la razón por la cual el ladrón dejaría la puerta abierta al salir?

Seguiría dentro de la casa?

Medite esto por unos minutos pensando que eso seria imposible.

Pero cuando menos me lo esperaba un tarro callo al suelo derramando agua y rompiéndose a su vez en muchos pedazos. El ladrón intento correr, pero el agua le hizo res balar, provocando que se cayera al piso.

Con una pequeña llave lo acorra le, poniendo la navaja en su cuello, asiendo fuerza con mi otra mano y poniéndome arriba de el, amenazando con cortarlo...

Ethan

– ¡Mierda!-

Alex había regresado a su departamento.
Lo escuche caminar dudoso hacia la cocina donde se encontraba el paquete que había dejado.

Me asome por una esquina, y lo vi se quedo contemplando el paquete, se quedo completamente estático y frunciendo el seño.
No parecía respirar, en su mano derecha se encontraba abierta una navaja, y con ella parecía un delincuente al asecho.

– Mierda!-repetí en mi mente.

Salí de mi escondite lo mas silencioso posible. Pero al caminar mas rápido, choque contra una mesa tirando un tarro, que se rompió en muchos pedazos provocando que Alex volteara a ver me.

Trate de correr lo mas rápido que pude, pero me resbale con el agua del tarro que habia roto. Me intente levantar pero el se coloco arriba de mi.

Su navaja fría como el hielo amenazaba con cortarme el cuello

–¿¡Quien eres!?- Grito en mi cara.

Yo guarde silencio, pues no sabia que contestar.

–¿Quien eres?- preguntó un poco mas calmado, pero su cara cambio a un estado mas interrogatorio –¿¡ Tu eres el que me sigue !?-

No podía contestar, no a eso.

Me dejo un poco impactado el echo que supiera que siempre lo seguía. Lo miraba en los
vestidores, lo espiaba en los baños... lo espiaba.

¿O se podría llamar acoso?

Trataba de hacerme ver ante sus ojos, pero para el no existía. Trate de comprimir todo lo que sentía por el pero el simple echo de que el amor o admiración fuera tan fuerte me hizo continuar.

Asta que un día se me ocurrió una idea de ganarme su corazón. Tome una libreta y comencé a escribir.
Todo mi amor lo puse en esa libreta, los sentimientos que tenia por el también los escribí, todo. Así seguí asta terminar me la libreta.

Cuando a la libreta ya no le que daban mas hojas, la en volví, con cuidado con un papel verde despintado que según mis cálculos era un color bello para el.

Entre a su casa por la puerta, gracias a mis habilidades de vandalismo. Deje el cuaderno envuelto, junto con una carta que decía :

¿Que es lo que siente una persona?

Admiración?

Amor?

Atracción?

Puedes leer esta carta y saber que es lo que uno de verdad siente.

Y por ultimo una rosa.
Pero no era cualquier rosa si no una negra.

Ya que cuando fui al mercado encontré un seto de rosas multicolores, pero entre ellas se encontraba una única rosa negra, que me recordó  el amor que tenia por el era  único .

Pero ahí estábamos el arriba y yo abajo, me sonroje de inmediato ante este pensamiento, e intente voltear a otro lado pero no me dejo. Su mirada fija en mi, no en otro punto, en mi .

–¿Vas a contestar me?- preguntó con ojos llameantes.

–E-eh ... yo - pero en ese momento  un dolor invadió mi cabeza asiendo me quedar inconsciente.

* **************
Les gusto?

"Me vale si les gusto, maldito yo del pasado"

Mi obra maestra nuca pensé que esto iba a ocurrir

"¿obra maestra? ¿No se te ocurrió nada mas ingenioso?"

Perdón, pero muchas peleas tendré con mi yo del pasado.

La verdad espero que les allá gustado y pus si no pus que chido.

VIVA LOS HEATERS YEIIIII

Okno