Un Marido Golpeador [ Kendall & Tu 💜]

Capítulo 32

  LOGAN:
Recuerdos.....

Mi madre llorando, otra vez.
No era raro levantarme y ver el mismo panorama familiar todos los días.
No teníamos comida, y prácticamente el techo se nos caía encima. Tenía frío, andaba descalzo, y no recordaba la última vez que me había bañado.
Mi madre pasaba días enteros sin comer, para darme a mí y a mi hermano. Pese a eso, sobrevivimos. Mi infancia siempre fue pobre, humilde, diría lastimosa. Mi padre nunca estaba en casa. Trabajaba invirtiendo, vendiendo y haciendo productos para el Mercosur. Con mi hermano éramos muy unidos cuando la situación lo ameritaba.
Recuerdo perfectamente cuando nuestras vidas cambiaron. A partir de ahí era una constante competencia. Cada vez que quebrábamos era culpa de una sola persona, a la cual mis padres maldecían una y otra vez.... Al padre de Kendall Schmidt.

Cuando el señor Jhompson corrompió la mente de mi padre, y este aceptó, fundamos la empresa familiar. Los primeros meses eran puro éxito, hasta que la competencia se enteró de nuestra existencia. A partir de allí empezaron las juntas, las peleas, la carta documento, las demandas por apropiación indebida...etc.
Yo con quince años veía todo desde afuera. Con mi hermano no le tomamos mucha importancia.
Luego vino la banca rota. Otra vez nos encontrábamos en la extrema pobreza. Mis padres estaban desesperados sabiendo que no podían salir del pozo, y una y otra vez repetían ese maldito apellido, maldiciéndolo, odiándolo....
Schmidt.
Diez años después ese maldito apellido me daba nauseas. Mi padre utilizó su último suspiro para levantar la empresa...y lo logró.
Esta prestigiosa empresa que lideramos junto a mi hermano Austin.
La competencia con los Schmidt disminuyó, y mas con la muerte de mi padre, aunque eso no significaba que no los odiara...
Los detestaba. Al enterarme de la muerte del papá de Kendall, pensé que mis problemas estaban acabados, pero apareció mi peor pesadilla.
Kendall Schmidt. El hijo bastardo de ese maldito chantajista. Y por más que en ese momento no podía vengarme....en algún momento, lo haría.

Y así fue. Sin que se diera cuenta fui destruyendo poco a poco su vida amorosa. Su esposa lo odia, sus amigos también. Y él está hecho un maricón llorón. Y por más que haya hecho millones de cosas para conseguirlo, sabía que en este momento... él estaba acabado.

Narra Kendall.

Me encontraba en el yate, con _______, preguntándome si todo esto valía la pena. Si todo lo que hacía por ella era bueno para mí. Preguntas en mi mente pasaban mientras la miraba seriamente. Ella se notaba nerviosa. Todavía no deducía su mirada. Sé que muchos si estuviesen en mi lugar saltarían sobre ella y la besarían, pero mi mente era un caos y mi corazón era un pequeño interruptor esperando a ser apretado para estallar como una bomba nuclear.
Había recibido fotos, videos. Había gritado, insultado y golpeado. Eh llorado y no eh dormido. Eh tomado vuelos solo por ella... ¿y ahora?
Ahora que estoy frente a ella no se qué hacer. No sé qué decir. ¿Cómo reaccionar? Después de todo, no sabía si lo correcto era estar ahí.

¿Qué tal si nunca la amé?, ¿Qué tal si solo siento lástima y quiero disculparme?... ¿qué pasa si me estoy equivocando?, ¿de nuevo?
Me siento tan triste. Tan vacío, miserable y solo. Me duele el pecho. Aguanto la respiración y sigo. Sonrío, aunque me cueste.
Un aire protector es lo que siento respecto a ella. Necesito abrazarla. Necesito que sepa que no está sola...que estoy junto a ella.
¿Amarla?
A esta altura, no lo sé.
Corrió mucha agua por debajo del puente. Mentiras, mentiras, y más mentiras. Y por mas que no eran nuestras, dejamos que nos afectara, que nos destruyera, que nos alejara.
Tal vez el matrimonio no es lo mío.
Tal vez me casé demasiado rápido.
Tal vez mi vida es un constante error.
Tal vez...esto deba terminar.
Tal vez, deba alejarme.
Tal vez... solo tal vez, por primera vez en mi vida, piense en los demás. Piense en ella y la deje re hacer su vida. La deje ser feliz.
En este momento no tengo claros mis sentimientos. Mi corazón es un tormento...debo dejar que pase el tiempo.
Me duele.

Me cuesta pensar en algo sin ella, pero... ¿qué se yo lo que es amar? Si desde niño lo que más recibía era golpes. ¿Qué se yo lo que es una familia? Si mis sueños se destruyeron cuando mi padre lastimó a mi madre ante mis propios ojos. ¿Cómo saber lo que es ser feliz?...
Para eso tengo respuesta.
Todos los momentos junto a ella fueron la mayoría de plena felicidad. Pero reconozco. Tengo miedo.
Miedo al no amarla y pensar que lo hago. ¿Y si no es suficiente?, ¿Y si la daño más?, ¿Y si es demasiado tarde?....preguntas sin respuestas. Heridas sin curar. Palabras sin decir, y decisiones que tomar...Tal vez mis decisiones cambien mi destino, Y el de ella. Pero tal vez arruine mi futuro...y el de ella.

Me siento un estúpido. Después de haber llorado, y salir corriendo tras ella, y ahora no saber lo que siento. Definitivamente, soy un hombre impulsivo.
La quiero. Definitivamente.
Pero quererla no es suficiente. Ni siquiera recuerdo como era hacer el amor con ella.
Mentira. Eso es lo único que tengo claro.
Mi piel se eriza tanto que parece que un ángel me estuviese acariciando sin piedad. Mi corazón se acelera y me consumo en la pasión. La acaricio, porque mi cuerpo no puede resistirse. Es una flor delicada, dulce, suave.
El calor de la cama, es un infierno cuando estoy sobre ella, pero no hay nada mejor. La sensación que se produce cuando se aferra a mi. Cuando me pide que no la suelte. Cuando me dice que me ama.
El cosquilleo incesante de mi estómago cuando la beso. Lento, apasionado, adictivo. El aumento constante de la temperatura de la habitación cuando estoy cerca de ella.
Mis celos respecto a los hombres que se atreven a mirarla.
Mi aire de sobreprotector y su forma de celarme. Mi manera de mirarla, y su manera de mirarme. Su manera de tocarme, y mi manera de estremecerme. Su forma de hablar, y mi manera de desearla. Su pasión desenfrenada y mi hambre de ella.
Mi amor.
Definitivamente, mi amor por ella y su forma de hacer que cada día crezca más. Como se viste, como me habla, como me besa, como duerme....simplemente me enamora cada día más.
Me necesita, y la necesito. Me ama... la amo. Así de simple, así de sencillo....así de maravilloso.

Con problemas, con mentiras, con peso sobre mi espalda, es mi matrimonio, es mi esposa, es mi dulce amor, mi perdición...es el amor de mi vida. La razón de mi despertar, el motivo de mi respiración.
Lo único que me queda...y lo único que amo de esa manera...ella. _________. Solo ella.
Por más que confunda mi miedo y mis sentimientos, una cosa es clara.
La amo.