Capitulo 2: Kiana

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Narra Ethan

Hoy por fin, después de una larga semana llega mi hermana desde España, Kiana es una dulzura y es mi vida, tiene 17 años, es un año menor que yo, y aunque no es tan pequeña yo la llamo así "mi pequeña" porque a veces se comporta como una total niña, pero me encanta como es. Es pelirroja y le gusta los deportes y además de ser inteligente es toda un rompecorazones, por eso cada nada tengo que estar detrás de ella para evitar que algún mocoso trate de propasarse con ella.

Han pasado ya dos horas desde que la estoy esperando en el aeropuerto, porque su vuelo se retrasó debido al clima, pero ya llega en unos minutos y estoy ansioso por ello.

- Verdugoooo- gritaron detrás desde lo muy lejos,  la gente volteó a ver a la persona que emitió tan sonoro escándolo y por supuesto a mí quien corría hacia ella para abrazarla; si verdugo es el apodo que me dio mi hermanita  por espantar a sus noviecitos.

- Mi pequeñaaa- le digo de la misma manera.

- Te extrañe tanto- dice ella con emoción y una lagrima en sus ojos, así es somos tan unidos que nos cuesta separarnos, aunque sea por unos cuantos días.

- Mi pequeña ¿cómo estás?, ¿la pasaste bien con tus amigos en España?, ¿ningún chico se propasó contigo? ¿no te lastimaste? ¿No enfermaste? - la bombardeo con tantas preguntas que me mira un poco aturdida  por lo que le digo, pero con una gran sonrisa.

- Ay mi verdugo cálmate, estoy bien, si la pase bastante bien, nadie se propaso conmigo, no estoy lastimada, ni enferma no te preocupes, estuve tan desesperada por verte que vine en el primer avión que había, pero se retrasó- hizo un puchero, que linda es mi pequeña, por eso la cuido demasiado.

- Vamos a casa pequeña en el camino me cuentas como fue todo.

Pasamos todo el día platicando de sus pequeñas vacaciones con sus amigos, al parecer la paso genial y ahora debemos de volver a la escuela para seguir en el negocio de mi padre, puesto que yo seré el próximo alfa en un año y mi hermana será mi Beta, y debemos mantener el negocio familiar y la manada para eso debemos de ser aptos para ello, mi hermana es casi un prodigio por lo que no se esmera mucho en los estudios, pero yo, bueno no es que sea malo pero si un poco relajado, el tener muchas chicas alrededor coqueteando no ayuda mucho, distrae un poco pero trato de mantenerme lo más controlado posible.

Mi hermana me ayuda muchas veces para evitar conflictos con los novios de las jóvenes con quienes salgo y me regaña por romperles el corazón todas las veces, no tengo la culpa de que se entreguen a mi así de facil, kiana dice que son unas zorras mas que todo Lucía la capitana de las porristas.

Aun así con todos esos comentarios me hallo aquí en la cama de Lucía, pero es que ella es muuuy sexy y tiene a todos lo hombres a sus pies pero yo soy su preferido, o eso creía hasta que me encontré a Liam en su departamento un día que fui por sorpresa y lo entiendo, ella es una fiera en la cama, imagino que Liam también lo notó al igual que yo. 

Llevo bajando del internado de las mujeres de nuestra institución después de lo ocurrido con Lucía, y veo a mi hermana sentada en las canchas de fútbol, derramando lágrimas, mi corazón se parte en dos al verla así y no espero a que voltee para correr hacia ella.

-Mi pequeña ¿qué te ha pasado? - le pregunto y ella voltea, me ve con sus ojos llenos de suplicas, haciendo un puchero.

-Mi verdugo, encontré a mi mate- dice ella entre sollozos

-¿Y eso no es bueno?- le pregunto, porque debería de estar feliz por lo que ha pasado pero no, está llorando

- hermanito él dijo que no quería verme cerca suyo y que era una chiquilla malcriada- dice ella echándose a llorar como una pequeña niña, no la podía ver de esa manera voy a matar al desgraciado ese.

- un momento, ¿no te reconoció como su mate?- me parece raro.

- hermanito él es humano- no puede ser, porque justo mi hermana, quien a buscado siempre a su mate entre los hombres lobo como nadie, pero no, tenía que ser un humano.... Pero en este momento lo voy a hacer pedazos por tratar así a mi hermana.

-donde esta él, y como se llama- le digo de una manera autoritaria, ella me ve y con temor me dice su nombre "Peter" y que estaba en el comedor, aquí va a correr sangre.

-hermanito no lo mates por favor- me pide con suplica, por que bien lo podría hacer, ya tenia muchas razones para hacerlo, pero como es el mate de mi hermana no lo haré.

-tranquila – le susurro

Voy directo al comedor y lo que veo me sorprende...

Mi mate es una sexy PorristaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora