"Alaska" (Larry Stylinson)

Capitulo cuatro.

Lamento la tardansa pero estoy demasiada ocupada ultimamente, gracias por leer y disculpen si hay algun error:)

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Louis no bebió nada del té en absoluto. El todavía tenia miedo de que este envenenado, aunque el sabia que Harry estaba bebiendo de la misma olla. Ellos habían estado en silencio por lo menos cuarenta minutos, y Louis seguía lanzando miradas a la puerta que estaba abierta. Si empezara a correr con toda su fuerza al menos podría llegar al lago antes de que Harry lo alcanzara, pero eso seria todo. El no seria capaz de llegar al bosque ni a nada, asique borro esa idea de su cabeza. Tenia miedo, incluso si el no quería admitirlo para si mismo. Tal vez por eso no había movido ni un solo musculó desde que se sentó en la cocina. Tenía los dedos envueltos alrededor de la taza de té, tratando de entrar en calor. Estaba haciendo mas frio por momentos, y la habitación se estaba volviendo más y más naranja mientras el sol se seguía ocultando. En realidad no le gusta esto, esta usando la ropa de Harry, esta en la casa de Harry como si el fingiera que no quiere matarlo. El también había confirmado que estaba completamente desnudo debajo de la camisa de Harry, y que sin duda no lo estaba haciendo sentir mejor.

Louis miro a Harry, quien en lo contrario estaba tomando un sorbo de té, sus ojos verdes estaban fijos en un libro que estaba leyendo. Louis no podía ver cual era, y el no quería preguntarle tampoco. Una conversación normal nunca se llevaría acabo entre ellos dos.

El miro hacia otro lado cuando Harry lo miro por un segundo.

Quizá podría colarse por la ventana en el medio de la noche, mientras que Harry estaba dormido, el no seria capaz de agarrarlo.

“¿No vas a beber mas té?” Pregunto Harry. Louis sacudiendo lentamente la cabeza, negó. Se mordió el interior de la mejilla y Harry suspiro. “Esta bien, supuse que no lo harías de todos modos.”

Louis resoplo. “¿Por qué?”, murmuro, dándose cuenta de que el ya había lanzado el no habrá conversaciones casuales entre nosotros. “No sabes lo que pienso o lo que hago. Tú no me conoces.”

“Porque no es común que alguien como tu beba el té que alguien le ofrece.”

“Tienes razón”, murmuro Louis. Levanto la vista cuando Harry se levanto, llegando a tomar la taza de Louis junto con la suya mientras dejaba el libro en la mesa. Louis quería mirarlo, pero tuvo que parar. No seria curioso frente a Harry. Nunca.

Se cruzo de brazos con fuerza sobre el pecho y se hundió en la silla de madera oscura. Miró a la parte posterior de la cabeza del rizado, tratando de imaginar que podría hacer con el. Apuñalarlo, tal vez. A Louis no le importaría.

El chico de ojos azules trago cuando oyó un pequeño ruido sordo en su estomago. Harry había dicho que el había estado dormido durante dos días, esto también significa que no había recibido ninguna comida desde aquel sándwich en el aeropuerto. Tenía hambre. Mucha hambre.

Mantuvo sus ojos en Harry, pero parecía que el no había escuchado nada. Se sintió aliviado, pero luego algo decepcionado. Aliviado de que no le iba a ofrecer alimentos envenenados, pero luego decepcionado porque el tendría que hacerla. Probablemente podría hacerse algo. No estaba muy seguro de lo que tenia, aunque cualquier cosa seria un buen recurso.

“Voy a salir por un rato,” dijo Harry después de un momento, Louis casi se inmuto por la sorpresa. “Voy a estar de vuelta en un par de horas.”

Louis frunció el ceño, porque no podía creer lo que escuchaba. “¿No tienes miedo de dejarme?”, pregunto.

Harry negó con la cabeza. “Esta haciendo muchísimo frio, y no tienes nada mas que esa camisa.”