"Alaska" (Larry Stylinson)

Capitulo siete.

Lamento la tardanza (siempre digo lo mismo, lo se) estoy de vacaciones yaaas asique podre traducir mas seguido, planeo hacer algo como una maraton nose, vere como se me dan los tiempos porque tengo vida aunque no lo crean. Como sea, este es un capitulo muuuy intenso asique preparen palomitas y disfruten, saludos x :))

(Si hay errores, lo siento u_u casi siempre cuando traduzco lo hago apurada y no reviso bien)

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Louis no pudo evitar hacer  un puchero, la hierba húmeda bajo sus pies. Estaba lloviendo de nuevo, pero por supuesto Harry vio esto como el momento perfecto para cavar alrededor en el jardín.  Al menos Louis estaba completamente vestido en esta ocasión, con una remera  azul y roja a juego con la chaqueta de cuadros de Harry y la gorrita roja que había logrado arrebatar de un estante que era demasiado alto para Louis. Esperaba que Harry no tuviera piojos.

"Pásame la pala", dijo de repente Harry y Louis gimió, tomando la pala en las dos manos y se la dio a Harry, el rizado sonrió en respuesta. Él comenzó a cavar por cualquier razón, su fina camisa empapada por el agua de lluvia. Todavía se negaba a llevar la chaqueta, no quería hacer a Louis morir de frió. Hombros Louis estaban fríos mientras el trataba de mantenerse caliente,  con sus manos en los bolsillos de la chaqueta y la nariz que goteaba el agua de la lluvia. Se estremeció.

"¿Qué estás haciendo?" Tartamudeó.

"Excavar," Harry sonrió y se pasó una mano por el pelo,  las gotas de agua volaron por todas partes mientras lo hacía. Luego continuó cavando. "Obviamente."

Louis murmuró él. "Lo digo en serio."

Harry se rió en voz baja. "Voy a plantar un árbol", dijo. "Aquí mismo." Louis sacó las mangas sobre sus manos en un intento de calentarlos aún más, pero ese intento fracasó tan rápido como empezó. Él se quejó.

"¿Justo aquí?", Se preguntó, mirando hacia el cielo y parpadeó cuando el agua caía en sus ojos. Se los frotó con el dorso de la chaqueta,  sus dedos estaban fríos. Sopló sobre ellos por un rato. "¿No puedes esperar?"

"De esta manera, no voy a tener que regarlo," dijo Harry y soltó la pala, un poco de suciedad  cayó sobre sus pies descalzos. Él no pareció no darse cuenta. "Además, el sol brilla todo el año, por lo que es bueno."

Louis resopló y miró a su alrededor, mirando a la cuadra y el pequeño cobertizo. Luego, al  muy pequeño árbol que estaba a su lado.

"¿Puedo entrar?", Preguntó. "Hace frío."

Harry lo miró. "Puedes después de darme el árbol", dijo con una cara seria, estirando sus manos. Louis suspiró y le entregó el árbol, esperando a que lo metiera dentro del hoyo del suelo antes de darse la vuelta. Se apresuró, agitando el agua fuera de su cabello como un perro y entró en la casa, saliendo de los zapatos de Harry, chaqueta y gorrita. No cerró la puerta, mirando a Harry por un tiempo más. La camisa estaba pegada a la espalda una vez más, al igual que lo había hecho cuando había lavando sábanas Louis, los dibujos negros sobre su espalda brillando a través de la tela. Louis tuvo que apartar la mirada, con los pies más frío de lo que deberían, cuando comenzó a caminar hacia el sofá, sentándose en el borde de la misma.

Había pasado una semana desde que habían salido a cazar, el águila ahora se encontraba sobre la chimenea mirando fijamente a Louis, y el temor de que Harry le rompiera el cuello estaba todavía en el. A veces incluso soñaba con ello, el corriendo temblorosamente sus dedos a lo largo de sus venas y la manzana de Adán. Se estremeció.