Capítulo 22

4.5K 383 7
                                    

No supe nada de Daniel en estos ultimos días, por sus redes sociales note que estaba pasandola bien. Recibia un mensaje cada semana de su parte deseándome un buen día y eso era todo. Lo comence a extrañar cuando no tuve a quien contarle mis cosas.

Los partidos iban bien, no perdimos ni uno desde que entre al equipo. Jinwoo no estuvo de acuerdo con que estuviera pero tampoco le quedo de otra.

En dos días teniamos un partido contra el colegio privado de Seúl. Aqui en Busan de donde yo era este partido lo era todo ya que era la oportunidad de poder derrotar a los mejores en el deporte. El equipo de fútbol femenino de Seúl fue el mejor por años.

Mientras preparaba mi maleta de color azul, coloque música en mi celular. Tenia que estar lista en 10 minutos, ni más ni menos. El autobus del colegio que me recogeria estaria afuera en ese tiempo.

Se escucharon los gritos de papá desde la planta baja. Quite la música y guarde mi celular, revise que todo estuviera en orden y baje las escaleras.

Al ser sólo una maleta no me costó mucho meterlo en el camión. Despedi a mi padre desde la ventanilla agitando la mano. No queria dejarlo solo pero jugar fútbol también era importante para mí. Estaria fuera durante cinco días. No era que fuera a quedarme toda la vida en Seúl.

Jinwoo se sentó a mi lado antes de que el autobus avanzará, mire extrañada a la chica rubia. Me miró con gracias antes de hablar. Supe que no diría algo bueno, no era su naturaleza.

-Te crees mucho eh.

-¿De qué hablas?

-El entrenador confia mucho en ti, más que en nosotras.

-¿Qué te hace pensar eso?

-Todo, niña tonta.

-¿Tonta? -rei por lo rídicula que se escucho -Me gustaria saber cuando y por que cambiaste tanto conmigo.

-Tú lo tienes todo, dinero... Un padre y conseguiste salir con el chico que te gusta, eres muy buena en todo, ¿eso no es suficiente para ti? -se cruzó de brazos.

-Lo siento, yo no lo decidí.

-Si no eres tú, dime quien.

Para mí las cosas vienen a ti sin que tengas que pedirlo, y así me sucedió. Yo jamás imagine que sería la novia de un chico famoso. Jinwoo resopló cuando me quede en silencio por mucho tiempo.

-El entrenador dijo que es mi último partido -su mirada estaba en sus manos que no dejaba de mover como si estuviera nerviosa.

-Hablare con él -nunca fui vengativa.

-No hay nada que hacer, el puesto de lider no me queda y además... -sus mejillas se tornaron rojas. Algo le costaba decir, senti tanta curiosidad por saber que era porque la manera en que se comportaba ahora no era la que yo conocia -En mi condición es muy complicado, tengo que dejar el colegio -su voz fue entrecortada -Mi médico me dejó prohibido la actividad física y tendré que viajar a Londres para hacerme análisis. -Una gota cayo por sus mejillas, no pude apartar la vista de ella.

-Lo siento... -quise darle unas palmaditas en el hombro pero no lo hice.

...

Estire las piernas para el calentamiento. A penas llegamos al campo me percate de que el entrenador se llevo a Jinwoo lejos de todos para platicar con ella. La chica seguia con los ojos rojos, apunto de volver a llorar.

Despues de un largo calentamiento, revise mi celular cuando sonó.

-Hola, ¿como estas? -dijo el chico del otro lado de la línea.

-Bien, ¿Vendrán? -dije con esperanza.

-Estamos apunto de aterrizar, estare ahí como te lo prometi.

-De acuerdo, confio en ti.

-Te amo

-Tambien yo.

Colgue y fui con las demás.

...

El entrenador me alentó en el segundo tiempo cuando por fin tuve el balón en mi dominio. Lo pateé hasta estar segura de que tenia un buen ángulo para lanzarlo y asi lo hice.

En un minuto el balon entro en la porteria, y todos comenzaron a gritar euforicamente. Las chicas del equipo fueron corriendo a abrazarme.

-¡Se acabo el juego! ¡Los ganadores son el equipo de Busan! -se escucho por las bocinas.

Todas las personas en las gradas volvieron a gritar y hacer porras. Maravilloso y fantástico.

...

Sonrei ante las felicitaciones de todas mis compañeras y amigos. No tenia la intención de dejar de aparentar estar feliz, aunque estuviera ansiosa por buscar a los chicos entre las gradas. Habian muchas parejas de novios, amigos y amigas, padres de familia pero ninguno eran ellos. Debian estar aqui como lo prometieron, trate de relajarme porque no serian capaces de dejarme plantada.

Me sorprendi cuando note como muchas chicas miraron hacia la entrada del campo. Mire detenidamente a los siete chicos y no pude evitar soltar una carcajada. Si pensaban que usando esos enormes cubrebocas y esos chalecos junto con esos gorros para discimular que estaban aquí, estaban muy dementes porque vestidos de esa manera sólo conseguian llamar más la atención.

Una Fan Especial -Kim Tae HyungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora