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Capítulo 3.


Jonghyun se levantó de la cama por el insoportable ruido de la alarma de su celular.

Oh... lo había olvidado.

Hace tiempo que no recordaba la forma insoportable que era despertar de esta forma, por una estúpida alarma. Estiró su brazo algo torpe para llegar a la pequeña mesita de luz y apagar la alarma, una vez que pudo apagarla se refugió más en la almohada para volver a dormirse inconscientemente pero su cuerpo se tensó de un momento a otro al sentir como golpeaban la puerta de su habitación brutalmente.

-¡JONGHYUN LEVANTATE DE UNA VEZ, NO SE SI TU MADRE TE LO HA ACLARADO QUE ESTA VEZ DEBES HACER CASO, SI ELLA NO TE LO HA ACLARADO YO TE LO HARÉ ENTENDER! -escuchó la voz de su padre y puso sus ojos en blanco volviendo a cerrarlos, acomodando más su cabeza a la almohada. -¡¿JONGHYUN?! -gritó de nuevo su padre, golpeando aún más la puerta. -¡MIRA PENDEJO INSOLENTE SI NO ME ABRES YO ABRI...

-¡QUE YA VOY MIERDA, YA VOY! -gritó totalmente sacado de sus casillas, levantándose como pudo, tirando las sabanas por cualquier parte, encendió la luz y fue cabizbajo y bostezando al baño. Se dio un baño rápido, al salir se cepilló los dientes y después de eso, se dedicó a vestirse con el nuevo uniforme porque sí, su madre ya se había encargado de comprárselo y todo. Por más que la escuela a la que ahora asistiría no fuera sumamente religiosa ni prestigiosa debía admitir que el uniforme era muy bueno en verdad. El mismo consistía en una camisa blanca, pantalones negros un poco ajustados y un saco azul haciendo juego con la corbata azul, también.

Se puso el uniforme como pudo, a los empujones ya que no recordaba ponerse el uniforme en orden desde que terminó la primaria. Antes que comenzara su rebeldía, su madre hasta le ponía el uniforme, nunca podría olvidar como las manos delicadas de aquella mujer le ponían crema, colonia y lo peinaba con gel, con todo su flequillo hacia atrás. ¿Con gel? Oh dios, eso era lo único que no quería recordar Jonghyun nunca más en su vida, de pequeño lo peinaban horrible.

Aunque era mejor que ahora, miles de veces mejor que estar batallando en ponerse el uniforme por sí solo. Al terminar, puso su mochila sobre sus hombros con los libros nuevos y salió de su habitación con propósito a bajar las escaleras, una vez hecho se sentó en la silla acompañando a sus padres en la mesa. Su madre comía cereales con yogurt mientras su padre comía tostadas acompañadas de un café mientras miraba el periódico.

-Buen día señor Jonghyun, ¿desea algo especial para desayunar? -preguntó amablemente la señora que servía en la casa.

-Un café. -dijo Jonghyun secamente, poniendo su mejor cara ya que sentía que quería matar a medio mundo.

-¿Y hijo? ¿Emocionado de que empezaras en una nueva escuela? -preguntó su madre con una sonrisa plasmada en su rostro, llevándose una cucharada más de cereales a la boca.

-Oh sí, muy feliz. -contestó con sarcasmo.

-Contéstale bien a tu madre. -se metió su padre y Jonghyun puso en blanco sus ojos al instante.

-¡Veras a Minho! Oh por dios que emoción, hace mucho no veo a ese niño. Debe estar gigante.

-Mamá, no es un niño. -dijo Jonghyun sentándose cómodamente en la silla a la vez que corría su mochila a otro lado, aceptando el café que había traído la empleada.

-Bueno hijo, es una manera de decir. -Jonghyun suspiró y enseguida se llevó el líquido oscuro a la boca. Lo tomó rápidamente antes de que su padre empezara con el cuestionario de preguntas debido a su comportamiento.

Diferentes [JONGTAE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora