Diferentes [JONGTAE]

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ADVERTENCIA: Si están muy sensibles por favor absténganse de leer este cap y déjenlo para otra ocasión o tómense el tiempo que cada una considera necesario para leerlo. No es por asustarlas ni nada pero me gusta el drama y puede ser que en algunas partes me pasé y más en la parte final de este cap, hay palabras muy sentimentales que pueden llegar a alterar los sentimientos que llevamos guardaditos dentro de nuestro corazón. ¡Ahora sí, a leer!

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Capítulo 37.

-Es raro todo esto. –Minho se sentó en uno de los sillones pequeños mientras Jonghyun miraba el ventanal de su oficina, mostrándose pensativo.

-Lo es...

-Tienes que cuidar mucho a Taemin por el mismo motivo.

-Lo hago, ahora estoy tranquilo porque me dijo que tenía que terminar con una presentación de su agenda, además está con Jinki. Creería que nada malo podría pasarle estando con él.

-Pero... ¿Está advertido, aunque sea? –el moreno alzó una ceja preguntando, intrigado.

-No, no le he contado nada del último mensaje de Krystal ya que no creo que llegue tan lejos solo por venganza.

-Nunca te fíes amigo, uno nunca sabe lo que puede pasar. Esa mujer está loca.

-Lo sé, tendré cuidado, pero por el momento no hablaré con Taemin sobre esto, no quiero preocuparlo, todavía no.

-Está bien. –Minho asintió. –Bueno amigo, tengo que ocuparme de unos casos que me dejaron a cargo así que lamento no poder quedarme hasta más tarde.

-No te hagas ni un problema. –Jonghyun se acercó más a Minho para estrecharle la mano y después abrazarlo, viéndolo irse de su oficina. Se sentó en su asiento, detrás de escritorio, tratando de estar tranquilo y no pensar en nada malo.

Hoy le tocaba quedarse hasta más tarde al igual que todo su personal ya que por suerte estaban llenos de trabajo, después de lo sucedido. Su padre no había mentido, los empresarios se habían dado cuenta del buen trabajo y sobre todo de la honestidad de su hijo, por eso y más motivos decidieron seguir trabajando con él.

Toda la tarde y unas pocas horas de la noche se encontró revisando papeles, tras papeles, pidiendo favores a sus secretarias, viendo como éstas llamaban y llamaban a los demás empresarios, revisando que nada se saliera de orden y sobre todo, organizando los horarios de las reuniones y demás hasta que al fin pudo terminar con todo.

-¡Al fin! –gritó el castaño, golpeando su escritorio mientras se levantaba de su asiento, estirándose a la vez que escuchaba como tocaban la puerta. -¡Pase! –ordenó, viendo como Daehyun pasaba a su oficina.

-Todos se encuentran aliviados al igual que usted señor, por fin han terminado la jornada.

-Sí, gracias a todos los dioses hemos finalizado por hoy. –suspiró.

-¿A dónde necesita que lo lleve, señor? ¿Irá a ver al señor Lee?

-Eso justamente estaba pensando, podríamos ir... Mhh... déjame que pregunto si siguen en el lugar de la presentación. –el castaño sacó su celular marcando el número de Taemin pero éste no contestaba, su corazón latió rápido al instante, pero aun así trató de mantener la calma y marcó el número de Jinki. Por suerte éste contestó enseguida.