》Género Lírico

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-Vamos, Jiminie... levántate -llenó de besos el cuello y rostro del menor, pero este sólo lanzó un quejido y se cubrió con las mantas hasta la cabeza. Hoseok rodó los ojos conteniendo una sonrisa y sacudió el cuerpo bajo las colchas en su cama.

-Déjame, puedes ir tú solo -gruñó con voz ronca, el mayor suspiró y volvió a levantarse en busca de su chaqueta, las llaves del auto y su maletín.

-Está bien. Come algo antes de irte, ya sabes que toalla usar... -otro suspiro, abrió la puerta-. Sólo recuerda que la otra semana hay prueba de los géneros y hoy es la última clase -alzó un poco la voz para decir aquello y salió de la habitación apresurado al notar que Jimin aparecía entre las mantas y le lanzaba una almohada que alcanzó a evitar con la puerta.

Con una sonrisa gigante en su rostro preparó el desayuno y se acomodó en el sofá a revisar su celular mientras escuchaba pasos rápidos en su habitación.

-Estoy malditamente listo. Sé que sigues aquí, Hoseok -salió con el ceño fruncido de la habitación ajena y buscó con la mirada al mayor, mientras abrochaba el botón de su pantalón y luchaba con los mechones rebeldes de su cabello.

-Deja de hablar insolentemente y desayuna antes de que se haga más tarde -escuchó el bufido del menor y rodó los ojos mientras bajaba por el inicio de instagram observando todas las imágenes, dándole me gusta a algunas publicaciones.

-Oh, pero te encanta escucharme decir groserías -se quejó, mascando una galleta para luego beber un gran sorbo de café.

-Demonios, Jimin. Si no te callas ahora prometo que después de clases no podrás caminar -el sonrojo en el rostro de Jimin y su sepulcral silencio fueron música para Hoseok. Amaba al menor, demasiado. Pero cuando comenzaba con sus quejas, era difícil detenerlo, y era una total jaqueca para más tarde. De todas formas, adoraba escucharlo hablar sin un punto final cuando se trataba de cualquier otra cosa.

Salieron de la casa de Hoseok en silencio y subieron al auto. El mayor condujo dedicándole, cada cierto tiempo, una mirada a Jimin, sonriendo al ver sus pucheros, o al escuchar sus bostezos.

-Ve tú primero, te doy cinco minutos antes de que yo llegue al salón, bebé -Jimin asintió y abrió la puerta del auto, más, antes de que saliese, fue sujetado del brazo por el mayor, se giró y, con sus mejillas calientes, observó los destellantes ojos de Hoseok.

Tiró del brazo del menor hasta que sus narices chocaron, ladeó su cabeza ligeramente y besó suavemente sus labios, Jimin soltó un suspiro entre el beso antes de ser separados, se observaron por largos sesenta segundos y Hoseok lo soltó.

-Ve

Una relación con su profesor no era algo en lo que Jimin pensó cuando llegó a la secundaria. Menos, que llevasen tanto tiempo juntos y todavía no fuesen descubiertos, porque dos años era demasiado tiempo, y aún así, la única persona que sabía de ellos, era su mejor amigo, Jeon Jungkook. Suspiró al entrar al salón y se echó sobre la primera silla vacía que encontró, pensando aún en la relación con su profesor de Literatura.

Claro que, era difícil para él ser la pareja de alguien tan especial como Hoseok, porque no cualquiera te provoca un orgasmo con sólo verlo. Debía lidiar con eso cada mañana de miércoles y viernes. Era horrible el tener que ahogar aquel gemido y mantener una expresión seria durante dos largas horas de clase, con un profesor tan sexy paseándose por lo largo y ancho del salón, y, hablando de él, ahí estaba, entrando al salón con pantalones negros ajustados con su maletín en mano. Ahogó el gemido y cubrió su rostro con agobio.

-Buenos días, alumnos -saludó llegando a su escritorio, y dejando su maletín sobre este, buscó un plumón. Se giró y comenzó a escribir en el pizarrón.

-La poesía... -sonrió volteando hacia los alumnos en el salón- ¿Quién no ha leído poesía alguna vez? Está en todas partes es melodiosa, es hermosa, es... -sus ojos conectaron por cinco efímeros segundos con los ojos de su alumno preferido antes de continuar- Es uno de los componentes del género lírico, ¿Alguien podría describirme el género lírico?

Muchos alzaron la mano y Hoseok, satisfecho, le cedió la palabra a Seokjin.

-Transmite sentimientos, emociones, sentimientos... es todo muy lindo, profe -sonrió al decirlo.

-Exacto -concedió-. Podríamos decir que este género es el género del romance, ¿no? -muchos asintieron-, pero no. No porque transmita sentimientos es romance y nada más. Puede ser la tristeza, el desamor, la rabia, la felicidad, y todo lo que involucre sentimientos

Dio un trabajo con nota y se recostó en su silla frente al escritorio, observando con satisfacción como todos esos adolescentes trabajaban entre cuchicheos, pero concentrados.

-Recuerden -habló quince minutos antes de que la clase acabara, interrumpiendo a algunos que intentaban terminar pronto el trabajo-, que la próxima semana hay prueba sobre los géneros literarios, así que les recomiendo estudiar si  confiarse demasiado en el tema, y enviarme las preguntas correspondientes al tema a mi correo electrónico -un "Sí, profe" coreado por la mayoría de sus alumnos resonó en el salón y suspiró asintiendo para sí mismo en lo que volvía a revisar los trabajos que habían sido entregados recientemente.

El timbre sonó y el salón quedó vacío, a excepción de Jimin y Hoseok.

-Profe... -se levantó del asiento y caminó hasta quedar frente al profesor, arreglando el cuello de su camisa antes de pasar sus brazos por alrededor de su cuello- ¿Me ayudará a estudiar? -un beso lo sorprendió, sonrojándolo hasta la punta de sus orejas.

-¿Es que acaso es necesario preguntar? -Jimin sonrió y tomó la iniciativa, besando los labios ajenos mientras comenzaba a restregarse contra el cuerpo de Hoseok.

-¿Daddy me dará una recompensa? -murmuró sobre sus labios, el profesor afianzó su agarre a las caderas del menor.

-Espero que puedas caminar el día de la prueba, bebé

Literatura 》Hopemin《Donde viven las historias. Descúbrelo ahora