✧Oh Joy, No De nuevo.✧ 【segunda temp. de "Y si yo..."】

08

–...¿¡Qué!?-Habló la señora rubia a través del teléfono, igual de impactada que Mangle cuando recibió la misma noticia–.

–Eso me dijeron.-Dijo la albina con la voz aún un poco quebradiza–.

–Mira, te voy a pedir algo.–Jane hizo una pausa–. Entra al hospital, y busca a la enfermera, y pregunta cuando Joy podrá recibir visitas, ¿entiendes?

–Sí, entiendo.–Respondió con decisión–. La llamo después.

Dicho esto, la albina colgó el teléfono y se dirigió a la entrada del “Five Night's At Freddy's Hospital”, sí, al parecer todo llevaba “Five Night's At Freddy's” en el nombre, pero eso no es el asunto.

Como decía, Mangle se dirigió a la entrada del hospital, para cruzar la puerta que llevaba a la sala de espera de la planta baja.

Sin ningún permiso, cruzó puertas y puertas buscando a la enfermera de cabellos castaños que la había atendido antes.

Pasó un rato buscando por el gran hospital a la enfermera.

Abría puertas y puertas sin importar que era lo que estaba sucediendo dentro de las habitaciones.

Hasta que se topó con la habitación de Joy.

No entró a la habitación, simplemente, se quedó mirando.

Le dolía verla, pero no podía dejar de hacerlo.

La linda rubia que siempre la acompañaba en sus paseos por la playa estaba ahora en una camilla de hospital llena de máquinas conectadas a ella.

Decidió salir de la habitación sin notar que las lágrimas habían vuelto a caer por su cara.

Cuando volteó al cerrar la puerta, se topó con la enfermera.

–U-uhm...–Balbuceó la albina–. E-enfermera, yo...

–Señorita, entiendo que esté preocupada.–Suspiró pesado la enfermera–. Pero lastimosamente yo no puedo permitirle estar aquí, la hora de visitas de la Señorita Joy no está agendada todavía, insisto en que usted vuelva a casa y descanse, mañana es sábado y le haría muy bien pasarlo con sus amigos y despejarse un poco.

–E-entiendo...–Tratamudeó– Pero necesito hacerle una pregunta.

–¿Que sucede?–Preguntó con curiosidad la enfermera–.

–La madre de Joy y yo necesitamos saber cuando podremos venir a visitar a Joy.–Dijo con nerviosismo–.

–Pasado Mañana.–Dijo la enfermera–. pero como ya dije, vaya a descansar a su casa, porfavor.

–B-bien...–Dicho esto, la albina se retiró del lugar–.

Quizás, no sea tan malo tomarse un descanso.