Capítulo 1.

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Batman había dejado al payaso en Arkham, pero éste estaba completamente inconsciente.

Al intentar huir de la bomba que el mismo había puesto se había golpeado la cabeza quedando desmayado y la bomba lo había dejado casi muerto, por suerte, el caballero oscuro lo encontró y logró curar lo básico para que no se desangrara, para luego llevarlo hasta Arkham.

Lo tomó en sus brazos de manera delicada. Guasón estaba vivo. Al cargarlo, se dio cuenta como el payaso se acercaba cada vez mas a su cuerpo, eso lo hizo abrazarlo con fuerza. Por primera vez veía a su enemigo tan débil; tiritaba por el frío de la noche y sus prendas estaban llenas de sangre.

—– Aquí está el Joker, necesita curación —dijo con su voz sería el tipo tras la máscara, todos miraron al inconsciente payaso con temor. Batman recosto con suavidad al Joker en la celda de alta seguridad y sin que nadie lo notara, le acarició el cabello. Suspiró, su corazón estaba palpitando con fuerza.

—– Nosotros nos encargaremos, Batman —la voz de Bárbara lo había sacado de su burbuja, se separó rápidamente del payaso y se fue de manera fugaz.

Por la noche, el pobre Bruce Wayne, no podía conciliar el sueño, pensaba en esos sentimientos que tuvo al estar junto al payaso. Sin pensarlo mucho, disfrazado de Batman, se dirigió hasta Arkham, pidió que le dejaran ver al  príncipe payaso del crimen, en cuanto estuvo frente a la celda, se dio cuenta que no habían curado al  Joker como él había dicho.

Entró en el cuarto, los guardias lo miraban con admiración y temor. El Huason aun no había despertado, por lo que con sumo cuidado de no despertarlo, le quitó la ensangrentada camisa y le curó cada una de sus heridas, lo vistió con el traje naranjo y volteando a verlo una última vez, se fue a su mansión.

¡Sé que no está loco! ||BatJokerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora