Broken

179 41 24
                                    

Las marcas de su rostro reflejaban toda la pena y sufrir que vivía. El recuerdo se hacía presente cada noche, era su pesadilla constante. Russel despertaba llorando y gritando  por sus amigos... Y especialmente por Del. La roja sangre que cubría los asientos del auto le eran tan realistas todavía, a pesar de que era un sueño.

—D-del —El corazón le latía con fuerza. Estaba fatal. Tenía tiempo que no sonreía. En la oscuridad de su habitación se cubría la cabeza con la manta y las lágrimas escurría de sus, completamente blancos, ojos.

Estaba destrozado. Su ritmo era vacío. Russel Hobbs estaba roto...

Era presa del pasado. Incapaz de poder salir de la soledad y melancolía que lo absorbía.
Quería volver en el tiempo, en aquellos bellos recuerdos donde Del le miraba con una sonrisa. Anhelaba componer música como fue en el pasado. Necesitaba a su alma gemela. Escuchar su voz. Necesitaba tanto de él.

Pasó meses, donde Russel debió aprender  que llorando no podría solucionar nada

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Pasó meses, donde Russel debió aprender  que llorando no podría solucionar nada. Aún dolía, pero se puso de pie. Retomó el hip-hop y la beteria. Buscó un trabajo en una tienda de discos.

Se contaba que era poseído por el alma de sus amigos, cuando éste tocaba la batería. Los rumores se extendían en todo Brooklyn, hasta llegar a oídos de curiosos.

Lamentablemente para el afroamericano, jamás podía verlos. Solo sentía escalofríos... Y además, juraría que en la noche un susurro, de su amado, le deseaba las buenas noches. Ojalá pudiera ver a Del de nuevo, sabía que su alma estaba dentro de su cuerpo, sin embargo, era una pena que aún estando tan cerca no lo pudiera ver.

—Hola, mi Russ —La voz gruesa del fantasma resonaba en las cuatro paredes de aquella habitación

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Hola, mi Russ —La voz gruesa del fantasma resonaba en las cuatro paredes de aquella habitación. Veía a su amado, el cual dormía—. Es una pena que no me puedas oír... Y yo que deseo decirte tantas cosas —Suspiró cansado y triste—. Te amo —Donde una vez tuvo corazón, le dolió—. Y cuidaré de ti. No importa si me ves o no. Prometí algo y lo cumpliré —Besó la frente cálida.

El fantasma una vez le dijo que lo protegería de los demonios, y eso pensaba hacer. No permitiría que algún ser maligno poseyera a su amor, causando que cometiera algún acto que provocara a  Russel culpa, como ya había sucedido en un pasado.

Russel despertó por otra pesadilla. Justo en cuando abrió los ojos, el espíritu de Del se sumergió en su cabeza. Sin embargo, jugaría que logró verlo por lo menos un segundo.
—No es justo...  Necesito abrazarte. Del, te extraño tanto —El llanto se hizo presente.

El fantasma podía oírlo. En verdad quería hacer lo que Russel le solicitaba, pero era imposible. Debía aguantar el pago de seguir con él; y eso era, el que no podrían verse nunca. Estarían cerca, pero al mismo tiempo sería como si una gran brecha los separara...

RITMO VACÍO (FINALIZADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora