La Persecución

Parte 28

 El ascensor suena su timbre  indicando que habían llegado al piso de destino, los dos se preparan y sacan sus armas, las puertas se abren y ellos salen apuntando a todo, en ese momento notan que se encontraban en una sala amplia y bien iluminada y decorada, ellos siguen caminando despacio para no hacer tanto ruido.

De un momento a otro de una de las puertas que se encontraban a los lados, sale una sirvienta, por suerte ellos se encontraban cerca de unos lugares que les servían para ocultarse, por lo repentino del momento, Arno se agacha y esconde atrás de un mueble, mientras que Perth se oculta detrás de una columna, ninguno sabia lo que estaba pasando, pero se empezaron a escuchar voces"rayos, están dentro de la sala y nos van a descubrir.

- ¡Señor Kaufmann, me alegro de conocerlo! - se escucha una voz masculina.

- ¡Ja ja!... ¡Señor Vito Andretti, usted sabe que los italianos siempre podrán contar conmigo! - dice Kaufmann.

- ¿Qué sabe de los sujetos que lo están buscando? - dice Andretti.

- ¡No se preocupe, el señor T.M no se tiene que preocupar! - finalizar Kaufmann.

" ¡T.M!...¿quién es este sujeto?" piensa Arno mientras se acomodaba en su escondite, pero por lo pequeño de su refugio se le hacia difícil estar en una posición cómoda, por suerte escucha que empiezan a caminar, pero las sombras de los dos se asoman a unos metros de él.

De un salto Arno atrapa al acompañante mientras que Perth emerge de la columna como si fuera una sombra mientras apuntaba con su arma a Kaufmann.

- ¡Bravo, esperaba esto!... Señor Andretti disculpe por el inconveniente - finaliza mientras desenfunda su arma y le dispara a Perth.

El hermano de Arno cae al suelo con un grito desgarrador, algo que lo distrae por un momento y su victima aprovecha para atacarlo y dejarlo desarmado y en el suelo en pocos segundos, él se encontraba tirado mientras que la suela de Kaufmann le pisaba la cara.

- ¡Deja a mi hermano! - grita Perth aun en el suelo y con la herida de bala en el hombro.

Kaufmann voltea mientras que le ordena a su invitado que sujete a Arno y lo ponga en una posición en la cual podría ver lo que le harían a su hermano, él sabia que no podría hacer nada para salvarlo.

Los gritos de Perth rompían el silencio de la sala mientras que con cada golpe la alfombra y muebles se manchaban con su sangre, de un momento a otro Arno ve como su hermano cierra los ojos y no se movía.

- ¡Ya basta!... ¡tu problema es conmigo no con mi hermano! - grita Arno para llamar la atención del atacante.

Funciona pues lo deja de golpear, y se voltea, sus manos estaban manchadas de sangre y su mirada concentraba toda su ira, mientras miraba a Arno, chasquea los dedos y de las puertas salen guardias, los cuales lo sujetas y tapan la cara, en poco tiempo lo mueven del lugar en el cual estaban.

Cuando le quitan lo que le cubría la cara, se encontraba en alguna parte del hotel, por el entorno estaba en algún cuarto de maquinas, todos los guardias lo apuntaban, mientras que los dos hombres lo miaban.

- ¡Señor Arno, me alegro de que este con nosotros, y lamento todo lo sucedido, pero tú le has hecho mucho daño a mi organización hemos perdido millones y sin decir de mi proveedor y promotor! - dice con una voz seca y tono burlón. 

- ¿Dónde esta Perth? - es lo único que dice.

- ¡Tu hermano debe de estar conociendo a su creador, dejamos su cuerpo en la sala ahora debe de ser una buena alfombra! - dice Kaufmann entre carcajadas.

La noticia de que su hermano estaba muerto, lo dejo dolido, pero su hermano sabia que ese era un riesgo, en poco tiempo se incorpora, pues se encontraba de rodillas, algo que Kaufmann no tolero.

- ¡Cuándo Ivana se entere te matara muy lenta y dolorosamente! - susurro Arno. 

- ¡Matadlo! - ordeno Kaufmann mientras salia riendo junto a su invitado.

Los guardias que lo rodeaban sacaron sus puñales y navajas, armas típicas de sicarios y matones, Arno se preparo para defenderse de todos sus enemigos, el primero le clava el puñal en el pecho, pero este rebota al chocar un una delgada placa de metal que tenia el equipo que él llevaba puesto.

Esto le dio la oportunidad para quitarle el marca y así tener algo para defenderse, los otros lo atacar a la misma vez, pero él da un pazo hacia atrás y ellos pierden el equilibrio por unos segundos, lo que el aprovecho, para atacar a uno y herirlo, mientras que a los otros dos los empujo para que se terminaran de caer, antes de correr el ve que no de los que este en el suelo tenia un teléfono.

Él lo toma y sale corriendo mientras cierra la puerta la cual provoca un sonido metálico al chocar contra el marco, sale a un 'pasillo y por lo que podía ver se encontraba en el lobby del hotel, camina despacio para no llamar la atención y en una de las esquinas que pasa ve a dos hombres con uniformes del llevando un equipaje, los sigue hasta que entran a una habitación y salen.

Cuando no se encontraba nadie cerca, abre la puerta y saquea las maletas, buscaba mas que todo ropa, para cambiarse, para su suerte la consigue y se la pone, lleva consigo todo lo que le pudiera servir y lo otro lo deja, sale del cuarto como si nada y se dirige a la recepción y pregunta sobre un cliente.

- Disculpe, se encuentra el señor Andretti, soy un socio - dice Arno con voz ronca. 

- ¡El señor Andretti, se encuentra con un cliente de nombre Marco en el piso ejecutivo! - responde la chica.

- ¡Gracias! - finaliza él. 

Rápidamente se dirige a las escaleras, pero los hombres de Kaufmann se encontraban custodiándolas, decide que tenia que ser de nuevo el elevador, por lo que lo toma y mientras se encuentra dentro del mismo, se mentalizaba todo lo que podía pasar y él no tenia ningún arma solo un cuchillo de los matones.

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Hola este es mi nuevo capitulo espero les guste, de antemano, estos soy los capítulos finales de mi obra y espero les guste, voten, comenten y siganme.