La Persecución

Parte 29

Las puertas estaban por abrir y Arno aún no sabía que hacer, en ese momento ve que aun tenía tiempo de marcar otro botón, así que lo hace y se baja un piso antes, un guardia del hotel lo mira mientras salen.

Apenas él lo ve su mirada se fija en un pequeño culto que tenía en la cintura "una pistola" piensa apenas lo ve.

- ¡señor venga un momento por favor! - dice Armó mientras le hace señas.

El hombre se mueve con rapidez, y cuándo lo tenía lo suficientemente cerca lo toma por las mangas provocando que este se tambalee y sin perder el tiempo le da un cabezazo. El hombre cae noqueado y el aprovecha y le quita la pistola, que para su desgracia era eléctrica.

Lo cuál lo desánimo un poco, pero por lo menos tenía algo mas eficaz que sus manos.

Deja al hombre tirado en el suelo y sube las escaleras cómo una flecha, unos metros antes se frena para analizar sus opciones, toma una decisión y termina de subir, al estar frente al umbral, puede ver la puerta por donde se accedía a la sala en la que había estado antes.

"Perth" pasa flotando por su mente. Después de eso, se asoma y mira a los lados nota que uno de los guardias se encontraba cerca y lo ve, él le hace señas para que se aproximará, por lo visto el cambio de ropa lo estaba cubriendo.

- ¡Señor no puede estar en...! - las palabras del hombre se detienen al sentir las descargar de la pistola en su cuello y cae desmallado.

Arno lo revisa, se topa con una pistola y unos cartuchos, esconde el cuerpo, guarda los cartuchos y sigue caminando, se moviliza con cuidado para no llamar la atención, hasta que se encuentra frente a la puerta.

La abre con mucho cuidado, se asoma y nota que no se encuentra nadie, sigue avanzando cubriéndose en las columnas. Al llegar al lugar de la emboscada, nota que el cuerpo de su hermano no se encontraba y en cambio solo estaba una mancha de sangre en la alfombra.

Él pasa rápido y llega a una de las puertas, la abre y no ve a nadie solo muebles, sigue con la otra, esta vez se encontraba un guardia hablando por la radio, pero como estaba lejos y de espalda no se podía escuchar mucho.

Arno lo apuntó con la pistola mientras entraba, sus pasos eran lentos como si se tratará de un depredador asechando a su presa.

Lo tenía a unos metro y en ese momento le pone la pistola en la nuca.

- ¡habla con tu jefe y dile que suba, si tratas de darle alguna pista o señal te mataré! - finaliza Arno.

El hombre sin decir nada pone la radio en su boca y contacta con Kaufmann, al terminar la conversación tranca la radio y la coloca en una mesa a su lado.

- ¿Mí hermano donde esta? - pregunta Arno furioso.

- ¡Cuándo volvimos su cuerpo no estaba, sólo encontramos la sangre! - dice el hombre con tono seco.

- ¿Escapó? -pregunta Arno.

- ¡Es muy difícil que escapará en esas condiciones, debe de estar por ahí o sino los de limpieza se lo llevaron! - responde el hombre si mirar a Arno.

Después del interrogatorio él lo noquea de un solo golpe, al poco tiempo escucha que alguien se encontraba en na sala.

- ¡Schliemann! - escucha que grita Marco.

En ese momento el salé del cuarto apuntándolo, mientras que los dos guardias que acompañaban a Kaufmann lo apuntan.

- ¡Arno!... ¡creía que ya te encontrabas en el paraíso! - dice con sarcasmo - ¡Tranquilo, mis negocios están aquí, y cómo se que no saldrás de esta con vida te mostraré todo! - dice mientras coloca una maleta en la mesa de centro.

La abre y de la misma saca unos papeles, que le muestra a Arno.

- ¡Todo esto es mi trabajo, unto con esto! - dice mientras saca de la otra parte de la maleta la cubierta de la misma y la voltea - ¡Esto Arno, drogas de todo tipo! - dice mientras se ríe.

- ¡Matadlo, pero esta vez me quedare, para verte morir! - dice mientras mira a los ojos a Arno.

Los guardias estaban apunto de disparar sus armas cuando, Marco les hace una seña indicando que quería que lo matarán con las manos.

Arno revisó su arma y no poseía balas las tenía en el bolsillo, la suela y se prepara, para defenderse, los guardias lo atacan, golpeándolo, por el pecho, pierna, brazos y cuello, él cae al suelo, pero mientras lo golpean, ve que había un trozo de madera pequeña, que estaba casi desprendida del mueble.

Él la toma y jala, pero estaba débil por los golpes, vuelve a intentar y esta sale, con un movimiento rápido, se la incrusta en la mano a uno de los guardias, este chilla de dolor, mientras que el otro se paraliza por unos segundos, lo suficiente para que Armó se incorporara.

Una vez de pié él golpea al hombre herido, pero el otro lo vuelve a tumbar, este le golpea la rodilla y el cae de rodillas, Arno aprovecha y le saca el trozo de madera al otro guardia y se la clava en la otra mano, este vuelve a gritar.

Arno lo calla de un golpe en la cabeza y este cae al suelo inconsciente, contra y ve que el otro hombre se estaba reincorporando, pero el aprovecha y lo golpea fuerte en la cara y este cae al suelo.

Los aplausos de Kaufmann se escuchaban en toda la sala, mientras Arno lo miraba tratando de entender lo que estaba pasando.

- Bravo, si no fuera mi enemigo te contrataría para que fueras uno de mis guardias - dice Marco.

Con un movimiento rápido tumba al suelo a Arno mientras que lo comienza a golpear, el se encontraba inmóvil mientras que Kaufmann lo golpeaba sin parar ni una sola vez. 

- ¡Tú y tu hermano me han hecho perder mucho con sus negocios y acciones! - dice mientras se mueve de encima de él y toma una de las pistolas de sus guardias.

- ¡Fue un placer conocerte jefe Arno! - dice mientras se incorpora y lo apunta.

Arno lo único que hizo fue cerrar los ojos y quedarse quieto, pues no podía hace nada para salvarse, en ese momento lo único que el escuchaba era el silencio, de golpe se escucha una detonación.

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Hola este es mi nuevo capitulo espero lo disfruten, pues esta obra ya esta por terminar, lean, voten y comenten.