D I E Z

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— Ambar tengo algo que decirte— por fin me dirá Allen que es incógnito.
Claro, después que Ágata se a dignado a dejarnos solos.
—Claro¿Qué sucede?— he esperado este momento.
— Yo...¿No me recuerdas?— pregunto.
¿De qué habla?
—¿Eres incógnito?— negó.
—¿Quién es incógnito? En fin recuerdas esto— me mostró un pequeño llavero de una flor de manzanilla tejida.
Yo había hecho esa flor cuando tenía 8 años.
Marck, Allen era Marck.
Mi amigo de la infancia el que estuvo a mi lado desde el kínder.
Pero un día su familia se mudó.
Y no lo volví a ver.
Hasta hoy.
—¿Marck?— Asintió.
Por eso era mi famoso favorito y ¿Cómo no serlo? Si era mi mejor amigo.
Me lancé a sus brazos y lo llene de besos.
— ¡Aléjate de mi hija!— se escucharon los gritos del hombre de la casa. Mi padre.
— Es un placer verlo de nuevo señor.
Marck le extendió la mano a papá, el primero lo observó dudoso pero después suavizó su rostro y lo abrazo.
— ¡Marck! ¿Cómo es que has crecido tanto? — lo abrazo.
Papá lo había reconocido a primera vista y yo había tardado mucho.
Soy una torpe.
— Cariño prepara las tartas preferidas de Marck que el está de vuelta.

(...)
Toda mi familia estaba gustosa por el regreso de Marck y lo estaba más Ágata.
Marck era el amor platónico de Ágata.
Ahora todo tiene sentido.
Marck me contó que el día que lance la piedra a su auto me reconoció pero no pudo decirme nada por qué los paparazzis lo seguían.
Él pensó que si me regalaba flores de manzanilla lo reconocería pero no fue así.
— Eres muy distraída— Fue lo que dijo mi amigo estrella.
(...)
—Entonces ¿Allen es tu amigo de la infancia?— pregunto Campanita.
— Si lo es— Desde que Marck pasó por mi a la escuela ahora todos querían ser mis " amigos"
— Profesor Nacho— un flacucho cuerpo apareció.
—¿Qué sucede Fillip?— el chico se dejó ver por completo y con él llevaba un ramo de rosas rojas.
— ¿Me permite hacer una entrega?— pregunto.
— Claro— él profesos se sentó en su silla dispuesto a ver el chisme.
¿Viene hacia mí?
—¿Ambar? Me han pedido que te entregue esto— estas demente incógnito.
— Gracias— el chico flacucho se dio la media vuelta y se fue.
— ¿De quién es la dedicatoria? — preguntaron los chismosos de mi salón.
Incluso Niall me observaba pero pude jurar que se veía molesto.
Curioso.
– En el pasado fui tu amigo pero en el presente no quiero hacerlo. En el futuro quiero ser algo más.
~Marck

¡Santa Cachucha!
Casi me da un infarto. He dejado caer las rosas de la impresión.
— Profesor¿ puedo retirarme? No me siento bien— necesitaba salir corriendo de ahí.
— Señor Niall acompañe a su compañera.
Tome mi mochila y el ramo de rosas.
Necesito una explicación urgente.
— ¿Cómo es que una chica como tú obtiene rosas?— Que idiota eres Niall.
Y yo me pregunto ¿Cómo es que me gustas?
—Sabes, no necesito que me acompañes. Estoy bien.
— No te acompaño por gusto. Son ordenes del profesor.
Justo en el momento que le iba a contestar, Jazmín a aparecido y se le a lanzado a los brazos de Niall.
Me ha dolido observar la escena pero tenía que ser fuerte.
Niall no se tenía que dar cuenta que me seguía gustando.
Para mi buena suerte mi celular a comenzado a sonar.
– Hola ¿Quién llama?—
— Tu amor secreto— se escucharon unas risas— resulta que mi teléfono ha muerto y he tenido que conseguir otro.— la voz ronca de Allen resonó.—¿Te han gustado las rosas?— pregunto.
—¿Por qué has hecho eso Allen?—
— Entonces hubiera sido mejor haberte llevado flores de manzanilla.

— Desde hace mucho me han dejado de gustar las flores de m...— Ambar tú y tu bocata.
Niall me escuchaba y no quería que se diera cuenta que por su culpa me habían dejado de gustar las flores de manzanilla.
— Me han gustado las rosas Allen, gracias. — colgué.
Tenía que irme de ahí, no soportaba ver a Jazmín y Niall cariñosos.
O al menos a Jazmín tratando de llamar la atención de Niall.
— Bueno gracias por acompañarme. Nos vemos.

Anda Ambar ya casi llegas al
estacionamiento.
Si hoy caminas rápido alcanzaras el autobús.
—¡Oye! Te llevo a tu casa.— Maldita es mi vida.
Niall apareció frente a mi.
—No gracias prefiero caminar.
—¡Vamos! Me quedas de paso. Hoy pensaba irme temprano de la escuela.

— No gracias. He dicho que me gusta caminar— eres una gran mentirosa Ambar.
— A ya se, aún sigues enamorada de mí y te incomoda estar cerca de mi— si tienes razón pero no lo admitiré.
—Piensa lo que quieras Niall— ¡Eres buena Ambar!
Estoy orgullosa de mi.
—Wow. Sí que has cambiado—No me hagas reír.
— Pero si jamás me has conocido.— Camine hacia la banqueta.

— Vamos, te llevaré.
Niall a jalado de mi brazo y me ha hecho entrar a su auto.
Que le ha sucedido.
En cualquier otra circunstancia no me estaría hablando y estaría con la chica nerd.
—¿Qué es lo que quieres Niall?— dije directo al grano.
—Así que... Ya no te gustan las flores de manzanilla.
No le conteste.
—Mira Ambar. Si un chico desprecia tus flores no te tienen porque dejar de gustar las flores si no el chico¿Me explico?— me ha pegado duro.
Su comentario me había dolido.

Cuando por fin llegue a casa, baje el auto y le di las gracias sin observarlo.
¿Y adivina que?
Si. He encontrado un ramo de Flores de manzanilla en el suelo.
Seguro pensaras que las lleve adentro y las puse en agua.
Pero no. Las he llevado directo al bote de basura y las he tirado.
Niall me ha observado sorprendido.
Claro. Las únicas flores que estarían en un jarrón con agua serían las rosas de Allen y no las de incógnito.

–Incógnito si no me dices quién eres tirare todas las flores que me obsequies.– Le escribí.
— Me seguirás gustando incluso si tiras las flores— Cada día se dificultaba más.
Incógnito era detallista y comenzaba a sentir cosas por el.
Pero no quería enamorarme hasta saber quién es.
— Cariño, Niall ha venido a verte— apareció mi madre en mi habitación.
¿Qué?
Peor aún, ha dejado que Niall entre a mi habitación y a cerrado la puerta.
Gracias mamá por ser tan amable.
—¿Qué quieres Niall?— Mi voz era débil. Estaba cansada.
— Acaso te has quitado el maquillaje¿Cierto?— Rayos.
Lleve mis manos a mis pecas.
— ¿Por qué te cubres? Bueno yo también lo haría si tuviera manchas tan feas.

Agache mi rostro y observe el suelo.
—¿Por qué has tirado esa flores?— Pregunto.
— Acaso ¿Te importa?— me deje caer en mi sillón.
— Valla que te afecto duro mi desprecio hacia ti.
— No me afectó— dije— me dolió que tiraras las flores no que me rechazaras.— sus cejas pobladas se juntaron.
Niall, ¿por qué eres tan guapo?
Su mirada se suavizó y me dedico una sonrisa enorme.
El jamás me había sonreído a mi.
Lo había hecho con Ágata y todos los de la escuela incluso con vecinos pero jamás conmigo.
—¿Te sientes bien?— pregunte fingiendo preocupación.
— Nos vemos mañana en la escuela.
¿Qué rayos había sido eso?
¿Alguna vez han visto descendientes?
Yo sí. Pero obviamente solo por el príncipe Ben.
Pues si la has visto tienes que saber que Niall se parece a Ben bueno Niall es mucho más guapo y musculoso, pero es tan dulce con todos menos conmigo.
Y no se porque.
A todos les sonríe, con todas las chicas es caballeroso y amable.
Pero conmigo es la primera vez que lo es.
Algo trama, seguro la nerd es su cómplice.
Descubriré tu plan Niall.
Y también el tuyo Incógnito.
Bueno,ahora quisiera contarte acerca de lo que ha pasado con Campanita.
Terry le ha regalado flores.
Pobre de Terry se nota que quiere a Campanita.
Digo , se ha arriesgado a llevarle flores aunque sea alérgico a estas.
Pero mi amiga lo ha rechazado.
—Lo Siento, no puedo aceptarlas. — fue lo que dijo.
Por una parte me da gusto que las haya rechazado.
Qué malo soy ¿Cierto? Pero no soporto que Terry me diga mapache pecoso.
Pero la bondad de mi corazón se siente mal por Terry después de todo el es un gran chico.
Esperemos que  Campanita lo acepte.
¡Vamos Campanita, Terry merece una oportunidad!

Ámbar   y el ¿Incógnito?                                 #PNovel #SquadDreeamsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora