Only When I Sleep (Adaptación) (Zarry)

Capítulo 8

Medio año después

—Sí, lo sé, mama. Estaré bien, no te preocupes ―decía cariñosamente a su mama mientras la abrazaba con fuerzas.

—Come mucho cielo, y estudia, ¿sí? ¡Oh, mi niño pequeño se me va! ―Lloraba en su pecho su madre.

—¡Hey, enano! ¿Estarás bien sin mí allí? ―decía graciosamente Tarik, revolviéndole su cabello demasiado largo.

—Sí, claro. Sólo voy a Italia unos meses, cuida de mama y papa.

—Si, Zayn. Ven aquí que te de un abrazo de oso ―Zayn pegó un pequeño grito cuando su hermano lo abrazó y lo levantó del suelo.

—¡Bruto! ―se rieron los tres, se besaron y se despidieron.

Zayn se dirigió a la puerta de embarque y miró hacia su familia una vez más, se sentía observado pero no vio a nadie más que a su familia allí. Últimamente le pasaba a menudo, los pelos de su nuca se erizaban y se sentía observado, pero nunca veía a nadie. Con un largo suspiro se dirigió hacia el avión. Agitando su mano dijo a dios a su vida pasada y le daba la bienvenida a su nueva vida, Italia lo esperaba y su nuevo curso de arte también. Estaría casi un año estudiando en Italia y después ya vería donde lo llevaría el destino para no volver a Londres. Solamente habían pasado siete meses desde esa maldita tarde donde Harry lo repudió, aun dolía mucho y se dormía llorando por el amor de Harry.

Todas las noches se enroscaba alrededor de la chaqueta que nunca le devolvió, la inhalaba absorbiendo el olor a sándalo, un olor que ya estaba prohibido para él. Su corazón, como todas las noches lo lloraba, necesitaba alejarse de allí.

En el primer mes no lo vio, pero al tercer mes, cuando lo divisó, se escondió detrás de un coche. Harry caminaba abrazando a una morena bajita, se reía con ella besándola de vez en cuando en sus labios, se veían tan felices que eso dolió aun más.

Zayn cayó en una espiral de dolor y auto compasión. Por eso tenía que alejarse ¿No había un refrán que dice: “Ojos que no ven corazón que no siente”? Pues eso es lo que tenía que hacer. Y qué mejor oportunidad que una beca para estudiar lejos de su ciudad y país. Así que se aferró con uñas y dientes a la beca y ahí estaba, pisando por primera vez Italia. Sería un largo año…

 

Ocho meses después

—Tarik, ¿cómo estás? —preguntó Zayn contento, hacia más de dos meses que no se comunicaba con su familia. Entre los exámenes y el trabajo que encontró iba de puto culo.

—¡Mierda, tío! ¡Cuánto tiempo, enano! Estoy bien, ya estoy en los finales ¿Y tú cómo estás? ¿Creciste ya? ―Se rio Tarik.

Zayn se rió con ganas ante el comentario.

—No, sigo igual de enano. Bien, aprobé todos los exámenes.

—¡Oh, eso es genial! Ya tenemos un pintor de brocha fina ―dijo Tarik, divertido y orgullosos.