Capítulo 10

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Mierda, necesitaba emborrachase y joder, no sabía en qué orden pero lo necesitaba y ya. Con estos pensamientos se dirigió hacia el club gay. Zayn empujó las pesadas puertas y entró al oscuro club. El olor a sudor y sexo lo golpearon, la música estaba tan alta que sus tímpanos se oprimieron con el ruido ensordecedor.

Se dirigió, con pasos firmes, a la ancha barra, cogió un taburete de metal negro desgastado y se sentó. El barman ya lo estaba observando y se le acercó. Con un guiño y una enorme sonrisa le preguntó lascivamente:

—¿Qué te pongo, guapo?

—Ponme un whisky doble ―sonrió Zayn.

El barman no estaba mal, pero era demasiado joven para él. Le gustaban altos, rudos y maduros, y sobre todo, con largos rizos y ojos verdes. Sacudiendo la cabeza alejó otra vez a Harry de su mente. Joder, no podía seguir así, menos mal que en un par de meses se alejaría aun más, hasta Japón. ¿Y después qué? Mierda, si estaba en el puto Canadá y aun así no lo olvidaba.

Dando un suspiro se bebió de golpe el whisky que tenía delante, el liquido ámbar le quemó la garganta, provocando que un gemido de dolor abandonara su boca. Sacudiéndose la quemazón, alzó la mirada y se encontró con dos ojos verdes jades observándole con preocupación.

Zayn se encontraba en una nube debido al alcohol, se echó hacia atrás para alejarse de su pesadilla, su cuerpo se desestabilizó, pero antes de que su espalda tocara el duro suelo, dos enormes manos lo agarraron, atrayéndolo a un enorme y musculoso pecho.

El olor a incienso inundo sus fosas nasales, Zayn respiro hondo, un temblor de miedo y excitación le lamió la espina dorsal, no podía ser verdad. Harry estaba en Londres, ¿no? Una mano caliente le frotó la espalda tranquilizándolo. Al momento, la respiración del hombre estaba en su oído, enviándole ráfagas de electricidad hasta su polla, que se puso dura en un segundo.

Desde Harry nadie lo había puesto tan duro en un momento, tenía que ser Harry, no había otro para su exigente cuerpo ¿no?

—Nene, ¿estas bien? Estas temblando ―dijo suavemente una voz dulce y melosa.

Zayn no pudo contestar, no era Harry, no era el dueño de sus sueños. Era una persona distinta, pero a su cuerpo no le importaba y su cuerpo quería liberación. Zayn se estremeció por la anticipación. Con la decisión tomada, alzó la cabeza y lamió el cuello del desconocido hasta la oreja y le susurró:

—Ahora estoy bien ―gimió de placer cuando esas dos manos se trasladaron a sus glúteos, redondos y duros, dándole un rápido apretón.

—Bien, me alegro ¿Quieres salir a un lugar más privado, nene?

—Sí. ―El hombre le cogió de la mano y prácticamente lo arrastró hasta el oscuro aparcamiento. Se pararon en un lujoso coche negro y lo estampó contra el capó del coche.

Su boca fue devorada por una boca dura y exigente, la lengua del sujeto estaba hecha para conquistar, se hizo dueña de todas las partes de su caverna.

Se besaron duro y exigente, se lamieron, mordieron y chuparon, los dientes se estrellaban y las lenguas se peleaban. Unas manos fuertes lo cogieron de su cintura, levantándolo y presionándolo contra el cuerpo más duro del otro hombre. Sin tener otro remedio, Zayn abrió sus piernas y las envolvió en las caderas del hombre.

Gimieron en voz alta cuando sus dos pollas se rozaron, las manos se trasladaron a los glúteos, masajeándolos y apretándolos contra su cuerpo, haciendo que sus pollas se frotaran más. La fricción era deliciosa y el beso devastador, llevando a Zayn a un nuevo mundo de sensaciones que nunca antes había sentido. Bueno, aparte de Harry…

Only When I Sleep (Adaptación) (Zarry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora