Un amor imposible.

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Un mes ha pasado desde que volvimos del viaje a la montaña y por insistencia de Malachite había guardado en secreto nuestra relación; pero el insistió en que iria a un viaje de negocios con su padre y que al regresar ordenaria todo para terminar sus estudios en la facultad de medicina y hablar con mi padre para que nos diera permiso de ser novios.

Decidimos ir a la montaña a esquiar por que pronto regresaría mi guardaespaldas y por tanto ya no podría andar a solas. Yo estaba feliz, por fin Malachite había correspondido a mis sentimientos y yo me sentía la mujer mas afortunada del mundo, habíamos regre

sado a la casa después de estar la tarde esquiando.

Platicábamos de muchas cosas por fin sentía que con el podía ser libre, yo jamás me había sentido así ni siquiera con mis amigas me sentía tan agustó, en la noche preparó una deliciosa cena; nos sentamos al lado de la chimenea para ver una película muy romantica.

Hay Malachite me siento feliz.

Mina yo también me siento feliz, pero no creo que esto le guste a tus padres.

Tal vez les parezca extraño y se opongan un poco, por la diferencia de edad pero se que al final van aceptar nuestra relación.

No lo creo. Dijo Malachite con un rostro un poco serio

Hay No pienses en eso ahora disfrutemos de este momento dije viéndolo a los ojos, el me sonrió de una forma tan especial que no pude aguantar más, me lance a sus brazos; el beso comenzó suave y tierno pero poco a poco se puso más apasionado de un momento a otro las prendas estaban de más

Mina esto debe parar dijo Malachite tomó mis mano para detenerme ya que estaba desabrochando su pantalón y lo mire sus ojos se notaba que luchado contra lo que sentía.

Todo estará bien dije y continúe con mi tarea, para que se olvidará del miedo lo bese y logre que se acostara, sentí que un calor invadía mi cuerpo al estar sobre él piel con piel. Sus manos comenzaron a explorar mi cuerpo y hay Dios con solo el roce de sus manos sentía mi cuerpo arder en deseo un deseo que solo lo había sentido por él.

El se giro  sobre mi, sus besos comenzaron a bajar, cuando llegó a mis pechos me volví loca con su boca succionando uno y con su otra mano masajeaba mi pecho suavemente.

¡HAAA! Ma... Malachite no pares por favor sigue mm mm. ... Una descarga eléctrica recorrió mi cuerpo al sentir que él había dejado mi pecho y le había puesto atención al otro, la mano que había utilizado para masajear mi pecho bajo. Hasta mi intimidad para jugar con mi clítoris de una forma que mi intimidad comenzó a humedecerse. ¡HAAA siiii! Sentí como cierta parte de la anatomía de mi chico comenzaba a ponerse muy dura y para mi fue muy excitante.

¿Mina estas segura que quieres esto?

Si Malachite estoy segura dije y él pareció más tranquilo. Continuo con sus caricias y poco después yo toque el cielo mientras me corría entre sus hábiles dedos. Yo grite su nombre era una experiencia única, ni siquiera en mis fantasías llegue a sentirme así de completa; apenas estaba recuperando el aliento cuando mis pensamientos fueron interrumpidos por su voz ronca.

Ya estas lista pequeña Mina.

Lo mire a los ojos, se veía que están nublados por el deseo, el verlo así me provocó un sensación maravillosa me sentía sexy que tenia poder sobre él.

Abrió más mis piernas y comenzó a besarme de una forma salvaje, posesiva y sensual. Apretó mis pecho y mientras yo estaba distraída me penetró de una sola estocada yo grite, clave mis uñas en su espalda una mezcla de dolor y placer invadió mi cuerpo, él se quedo quieto.

Corazones entrelazados.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora