"No Te VAYAS"

Capítulo 9: "¿Mariposas?"

El celular de Emily comenzó a sonar muy fuerte cerca de mi oído indicando que era hora de levantarnos para ir a clase. Maldición deben ser las seis y media de la mañana, conozco a Emily a la perfección para saber que tiene todo un “ritual” para ir a la Universidad.

Me tape hasta el cuello y trate de acomodarme mejor para seguir durmiendo pero como todo siempre me sale mal termine besando el suelo.

-Mierda – me queje tratando de ponerme de pie.

Cuando lo conseguí me percaté de que Emily había dormido a mi lado, no pude evitar sonreír ante su simple acto. Tome el celular de Emily, que por cierto estaba en mi almohada ahora entiendo porque lo escuchaba en mi oído, mire la hora 7:30 a.m. ¡Carajo! Llegaremos tarde.

-Emily levántate nos quedamos dormidas – dije buscando la ropa que me pondría hoy.

-Cinco minutos más mamá – dijo la morocha con voz ronca.

-¡Despierta! – grito en su oído haciendo que ella pegara un salto en la cama y me mirara totalmente molesta – oh no me mires así, cámbiate que nos quedamos dormidas y llegaremos tarde.

Al escuchar esto Emily salió corriendo de la cama murmurando cosas que no logro entender y comenzó a cambiarse yo la imite y me puse un short desgastado con una blusa blanca metida en el frente y mis infaltables convers blancas, cepille mi cabello, me coloque muy rápido un poco de maquillaje y mi perfume con aroma a jazmín. Ya listas tomamos nuestras cosas y salimos como un rato del departamento.

Luego de cuatro cuadras interminables llegamos, entramos y cuando nos dirigíamos al ascensor me choque con alguien haciendo que cayera sobre mi trasero al suelo y mis cosas igual. Mierda.
Me apresure a recoger las cosas con la ayuda del chico que había chocado sin siquiera míralo.

-Anna apresurate el ascensor está por cerrarse y no puedo detenerlo – me decía Em desde el mismo señalando a las personas dentro.

Cuando ya tenía todo en mi bolso me apresuren a llegar al ascensor pero las puertas de este se cerraron antes de que pudiera entrar. Creo que hoy no va a ser mi vida.

-¿Vas a entrar preciosa? – mire hacia el otro ascensor en el que se encontraba el idiota más grande del mundo.

Me negaba a estar cerca de él pero iba a llegar tarde a clase así que respire profundo y entre en el ascensor, mientras que este me dedico una sonrisa burlona.

-¿No me agradeces? – pregunto mientras presionaba el botón del tercer piso.

-¿Por qué debería agradecerte? – pregunté secamente manteniendo la vista al frente.

-Por ayudarte a recoger tus cosas cuando claramente tu me chocaste – lo mire fijamente sorprendida claro pero con el seño fruncido ¿él? Iba a responderle pero continuó – y por esperarte para que pudieras tomar el ascensor.

-Primero tu te metiste en mi camino, segundo era lo menos que podías hacer y tercero yo no te pedí que me esperaras – espete mientras rogaba que se abrieran las puertas para alejarme de él.

Y finalmente se abrieron y sin perder el tiempo salí lo más rápido que pude. Bradley camino hasta a mi y se río negando con la cabeza.

-¿Disculpa? – pregunto.

-Disculpa aceptada – le dije sonriendo y entre al salón, para mi suerte el profesor no había ingresado.

Visualice a mi amiga en los asientos del medio junto a Jeremy, éste al verme me saludo con su mano y me hizo seña para que fuera hacía donde ellos estaban. Camine a paso apresurado sintiendo alguien caminar detrás de mi pero le reste importancia.

-Te guarde un lugar – me dice Jeremy cuando llegó a su lado.

-Gracias Jeremy – le dije tomando asiento.

-Ey aquí te guarde uno a ti – escuché decir a Emily que se encontraba a mi derecha me gire y… oh, no puede ser.

Bradley estaba acomodando sus cosas junto a mi y junto a Emily que se encontraba del otro lado, es decir Bradley se ubicaría en el medio de las dos. Se sentó y me guiño el ojo.

Esto tiene que ser una maldita broma.
Definitivamente hoy no es mi día.

Cuando el profesor ingreso y comenzó con la clase hice todo lo posible para poder concentrarme pero el idiota de Bradley no dejaba de mirarme eso me incomodaba haciendo que me removiera en mi asiento.
Entre el profesor que no dejaba de hablar y Bradley que me miraba no había podido si quiera tomar notas de la clase, así que empecé a garabatear en mi cuaderno alguien coloco un papelito en el. Me gire hacia la izquierda para ver a Jeremy sonreírme.

Desdoble el papelito.

J: ¿estas bien? Te noto algo distraída.

No pude evitar sonreír, es muy atento. Respondí y se lo entregué.

A: Si, es sólo que no dormí bien anoche.

No tardo en responder.

J: Bueno, ¿sigue en pie nuestra salida al cine?

A: Claro.

J: De acuerdo, ¿te parece hoy?

A: Si, hoy estaría bien.

J: Bueno a la siete paso por ti.

A: Bueno, te esperaré.

No podía esconder mi sonrisa, hablar con él me hacia sentir cómoda y un cosquilleo en el estómago. Uh, creo que es hambre ya que no desayuné.

No crees que pueden llegar a ser mariposas.

Claro que no, definitivamente no pueden ser mariposas o ¿Si?

***/***

-Emm Anna – me llamo Jeremy mientras recogíamos nuestras cosas.

-¿Si? – le respondí algo dudosa terminando de guardar todo.

-Me darías tu número de teléfono – pregunto mientras nos dirigíamos a la salida donde nos esperaba Emily – es para avisarte cuando este por llegar a recogerte.

-Claro, pásame tu celular – respondí.
Me entregó su móvil, agende mi número y se lo devolví justo cuando llegamos a donde estaba Emily con… umm Bradlidiota.

-Gracias – me dijo – nos vemos luego – se despidió besando mi mejilla. Estoy segura que me sonroje y además ahí estaba otra vez ese cosquilleo, debo comer algo urgente.

Mi amiga me codeo disimuladamente para que la viera, está estaba haciendo ese juguito con sus cejas. Lo que me sorprendió fue ver como Bradley apretaba sus puños y se alejaba de nosotras sin siquiera despedirse ¡Raro!

Luego de salir del IESE pasamos por una cafetería y nos sentamos a almorzar. Emily me contó porque nos habíamos quedado dormidas, resulta ser que el despertador si sonó a las seis y media de la mañana pero como mi amiga estaba con sueño por haberse quedado a mi lado después de la pesadilla lo ignoro hasta que bueno lo escuché yo y bueno ya saben el resto.

Cuando terminamos de comer nos fuimos al departamento a elegir el outfit que usaría porque según Em era muy importante ya que sería mi primera “cita”, si se lo que se están preguntando yo le he dicho que no es una cita pero ella se niega a creerlo.