Capitulo 39

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Maratón 1/?

Miraba por la ventana como los semáforos se quedaban atrás nuestro con una velocidad inimaginable, recoste mi espalda en el asiento mirando el techo del auto. Hace media hora que Dominic sigue conduciendo sin dirigirme una sola palabra, solo esta concentrado en la carretera con una expresión seria que transmite miedo.

-Uff -miro por la ventana y me sorprendo que estemos en la carretera y ya no en la ciudad.

Giro nuevamente mirando a Dominic quien sigue con la mirada fija en el camino haciendo que me enoje, él no puede manipularme y mucho menos llevarme a donde el quiera.

-Dominic -ni siquiera tartamudee al pronunciar su nombre.

-No digas nada -habla entre dientes pero sin mirarme.

-No eres nadie para mandarme -golpeo la cabezera de su asiento y este ni se inmuta.

-Vuelve a golpear el asiento...-me advierte mirándome esta vez por el espejo retrovisor.

-No me mandas -le respondo como una maldita cría.

Deja de mirarme para regresar su vista a la carretera.

Lanzo un grito de frustración - ¡Bajame! -le grito mientras pateaba su asiento.

-Hasta aquí -logro escuchar que dice algo al instante que sube la velocidad.

Voltea en una curva con tanta velocidad que hace que me ruede dentro del auto, mis gritos diciéndole que baje la velocidad y que es un maldito hijo de puta se escuchan en todo el auto, hasta que frena de golpe haciendo que choque contra su asiento, por fin puede respirar.

-Eres un hijo de puta -me levanto rápidamente a la vez que él sale del auto.

-Gracias -me abre la puerta dejando paso para que pueda salir.

Lo miro y luego salgo del auto, al pisar la tierra casi me caiga por estar mareada pero él llega a cogerme de la cintura y yo como estúpida entrelazo mis brazos en su cuello, él me levanta pero ninguno de los dos nos soltamos solo nos miramos directo a los ojos como si nos dijeramos miles de palabras.

-Amm...- dejo de "abrazar" su cuello y lo empujo haciendo que me suelte - Eres un hijo de puta.

-Ya me lo dijiste niña - pone sus ojos ojos en blanco- Sigueme o te pierdes.

Lo fulminó con la mirada y este empieza a caminar -Aish -pataleo en mi lugar antes de empezar a seguirlo.

-¿Sabias que eres un egocéntrico? -caminaba atrás de él con mis brazos cruzados.

-Muchos me lo dicen -sigue avanzando sin voltear - Llegamos.

Antes de que pudiera escucharlo me choco contra su dura y formada espalda.

-Auch -digo mientras me sobaba mi nariz.

Dejo de sobarme la nariz al ver el hermoso lago que estaba al frente nuestro, me acerco y puedo observar el agua cristalina que tiene con flores de diferentes tamaños y colores alrededor de este, sonrío mirando todo este hermoso lugar donde todo es silencioso y alejado de la ciudad y de las personas.

-Hermoso, no? -la voz de Dominic me trae nuevamente a la realidad.

-Mas que hermoso -le respondo- ¿Porque me trajiste aquí? -me volteo mirándolo a él.

-Fue el primer lugar que se me vino a la mente -responde mientras se sentaba al lado de un árbol.

-Pero...-no tenia nada mas que decirle, si le preguntaba la razón seguro me respondería cualquier cosa.

-¿Esa es mi camiseta? -señala al polo que tengo puesto y mi rostro se torna en un tono rubí.

-No...noo -tartamudeo negando con la cabeza rápidamente.

-Si, si la es -dice afirmando mientras se acercaba a mi.

Yo por inercia restrocedia como un ratón asustado que se encontraba acorralado por un feroz león, Dominic, que cada vez se iba acercando hasta que me coge de la cintura y me carga como una princesa acercandose cada vez mas rápido hacia el lago, abro mis ojos como platos al ver lo que quería hacer.

-¡No no no! -gritaba mientras pataleaba.

Pero eso no lo detuvo hasta que nos hundió a ambos en el lago, me solte de su agarre nadando hasta la superficie al igual que él sale junto a mi. Lo miro con odio y le salpico agua, y este imita mi acción así iniciando una guerra de agua entre los dos.

-Es mi camiseta -me dice con una sonrisa en sus labios.

Yo cubro mi rostro con ambas manos ocultando mi rostro de color como el tomate, pero él se acerca a mi y sujeta mis manos haciendo que deja de cubrirme mi rostro y lo mire. Sus ojos perfectos y su hermoso rostro me hipnotiza quedando como una boba frente a él.

-Eres muy linda -susurra mirándome y acaricia mi mejilla.

Al sentir su tacto cierro mis ojos, siento que su otra mano se posa en mi cintura y me acerca a él sin dejar un centímetro de distancia entre nuestros cuerpos. Abro mis ojos y me encuentro con los de él, y lentamente nuestros rostros se van acercando hasta que nuestras narices rozan entre si, mueve su nariz contra la mia juguetonamente y río levemente, miro sus labios y sin aguantar mas junto nuestros labios, él me sigue él beso, el cual es un beso tierno en medio de un lugar hermoso.

Enrollo mis piernas en su cintura, y él sale del lago sin romper el beso. Me echa en el pasto y él encima mio pero sin aplastarme, sonríe en medio del beso y sigue besándome tiernamente.

-¿Que...es...esto? -le pregunto entre besos cortos que me daba.

-No..lo..se -me dice con una sonrisa juguetona - Es hora de irnos.

Rompe el beso levantándose y luego me da la mano para ayudarme a mi, la acepto con una sonrisa. Entrelaza nuestras manos y hací regresamos al auto.

No se que habrá sido ese beso pero...me gusto y mucho.

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¡Hola! Empezemos con este maratón. Acuerden se que esta novela esta entrelazada con La Otra Cara del Cliché que es otra de mis historias.

¡Del odio al amor solo hay un paso!

¡Se dio cuenta que era su camiseta!

¡OMG! ¿Que fue ese beso? ¿Amor?

Besos <3

Héroe Sin Capa - Sin EditarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora