Héroe Sin Capa - Sin Editar

Capitulo 4

En el camino pase por una tienda que tenia ofertas, me adentre en ella y empece a ver toda la colección de ropa que tenían en los estantes y colgadores. Me demore unas 4 horas dentro de esa tienda, me compre unos cuantos polos y pantalón. Y al salir de la tienda me di cuenta que si tenia para el bus y luego mire las bolsas en mi mano, y suspire mirando al cielo, soy una completa idiota. 

No fui a devolver la ropa por vergüenza así que metí las bolsas en mi mochila, empece a caminar para poder llegar rápido a mi casa porque me di cuenta que ya había oscurecido. 

-Creo que por aquí es mas corto el camino -digo al ver el camino de la izquierda.

Me adentro en la calle pero me arrepentí cuando la calle estaba desértica, no había ningún rastro de vida humana, bueno creo que exagero pero es verdad.

A unos metro de mi veo 2 hombres acercándose en mi dirección, cruce a la acera de enfrente pero me siguieron , y uno de ellos tira mis cosas y me jalan adentro del callejón, me tiran al piso y uno de ellos se pone encima mio, empiezo a tratar de empujarle , pero es demasiado fuerte; las lagrimas no tardan en salir.

-Esta bien rica- dice uno de ellos tocándome el muslo.

-Tienes razón - dice el que esta tratando de subir mi playera.

Sigo forcejeando para que no me hagan daño, hasta que no siento ningún peso encima mio; abro mis ojos y encuentro a un chico golpeando a ambos hombres, no logro ver su rostro por la oscuridad, pero solo llego a notar las manos ¿tatuadas? , es el chico del Moll!!, abrocho mi pantalón y voy hasta donde esta mi mochila. En ese momento el chico siente mi presencia.

-¡Corre y no te detengas! - me grita mientras esta intentando que no le den con la navaja que saco uno de ellos. 

Sin pensarlo dos veces me levanto del suelo cogiendo mi mochila, empiezo a correr por la calle con lagrimas en mis ojos. Luego de correr unos minutos, sin detenerme, llegue a la calle donde se encuentra mi casa. Corrí hasta la puerta y con mi mano temblorosa metí la llave y luego la gire, abriendo la puerta y entre rápidamente a la casa cerrando de un portazo.

Mis padres al escuchar el portazo salieron de cocina y al verme en el suelo llorando se acercaron a mi con pasos apresurados y me abrazaron fuertemente. Yo me aferre a ambos con todas mis fuerzas y las lagrimas no dejaban de salir.

-¿Cariño, que paso? -me pregunta mi padre mientras acaricia mi cabeza.

-Unos..ti..po..pos ca..casi..abu.. -hablaba entre sollozos pero no pude terminar de hablar.

Pude ver como mi madre se llevo sus manos a la boca con una expresión sorprendida, mira a mi padre  luego a mi, y puedo ver como pequeñas lagrimas salen de sus ojos.

-Mi niña -habla mi madre abrazándome con todas sus fuerzas.

-Estamos aquí -habla mi padre y me planta un pequeño beso en mi sien.

Mi madre deja de abrazarme y se levanta del suelo pero sin dejar de mirarnos a mi padre y a mi, luego siento como mi padre empieza a cargarme levantándome del suelo, entre sus brazos sube hasta la segunda planta con mi madre detrás de nosotros.

-Llegamos al castillo -dice mi padre al entrar a mi habitación.

-Aquí -dice mi madre al terminar de acomodar mi cama.

Mi padre se dirige hasta mi cama conmigo entre sus brazos, me deja lentamente en mi cama y me dedica una sonrisa al igual que mi madre.

-Mi princesa -me dice mi padre mirándome y yo le dedico una sonrisa.

-Descansa -me dice mi madre dándome un beso en mi frente. 

Ambos se retiran de mi cuarto con sus manos entrelazadas.

Me levanto de mi cama luego de unos segundos, me despojo de mis prendas  las coloco en una bolsa y las boto. Luego me adentro al baño para darme una relajada ducha, al cabo de unos minutos salgo del baño envuelta en una toalla, me dirijo hasta mi armario y busco una pijama.

-Este -digo al encontrar el conjunto perfecto.

Seco mi cuerpo suavemente, antes de colocarme mi ropa interior me hecho mi crema para el cuerpo, después me coloco el pijama.

-A dormir -digo suspirando.

Dejo la toalla en la silla del escritorio, apago la luz y me dirijo hasta mi cama corriendo. Me tapo con una sabana delgada, y los recuerdos me invadieron al igual que las lagrimas empezaron a brotar de mi ojos.

-Ya paso, ya paso -digo aferrándome a mi almohada.

Luego de unos minutos pude conciliar el sueño, y caer en los brazos de morfeo

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NUEVO NUEVO! Tenia que alargarlo si o si!

Pobre nuestra Gia. :( 

Sigan Leyendo para saber que pasa con nuestra protagonista!

Besos <3