Cap. 5

2.2K 183 35
                                    

-¡Esto es increíble!- gritó Raphael enojado una vez ya estaba en el Dumort, eran alrededor de las 12:00 pm, hubiera llegado antes, pero se entretuvo teniendo una mini cita con Simon, en realidad solo fueron a comprar un helado, que ni siquiera se comieron por estarse besando en lo alto del puente de Nueva York, cuánto le había costado que el menor subiera ahí.

-¡¡Todos los vampiros vengan aquí ahora!!- volvió a gritar enojado. De inmediato todos los vampiros que habitan el hotel Dumort se presentaron ante el líder.

-¿¡Como puede ser esto posible!?- gritaba mientras se movía de un lado a otro en la sala -¡No estoy un solo día y hay tantos percances!- Raphael no se la podía creer la de desastres que ocurrieron en el día, para empezar; un grupo de adolescentes fueron llamados, supuestamente por alguien de adentro, retándolos en entrar, los cuales accedieron, y de estos uno termino muerto y otro está en una habitación esperando a que empiece a convertirse en uno más del grupo; después una manada de lobos enfurecidos porque uno de esos dos chicos era el sobrino del alpha, llegaron buscando a Raphael, el cual no estaba y las cosas se pusieron feas, y resultó con dos vampiros expuestos al sol, y otro degollado por el lobo. -¿Quién es el responsable?- siguió hablando después de una pausa, pero para la sorpresa de Raphael nadie respondió. Suspiró furioso, cansado y decepcionado de esto.

-Fueron los tres que murieron- una voz sonó por ahí, no reconoció quién fue.

Asintió varias veces.

-Que no vuelva a ocurrir nada así, ¿¡oyeron!?- agregó.

-¡Si señor!- gritaron todos al unísono y Raphael les dio una seña para que se fueran.

Estaba preocupado, tendría que vérselas con la clave, los vampiros habían roto los acuerdos. Se tiro en el sillón mirando el techo pensando que haría ahora, no podía castigar a los culpables puesto que ya habían muerto; tendría que ir a hablar con los lobos que atacaron y disculparse.

Se escuchó que tocaron la puerta y el vampiro sin saber quién era le ordenó que pasara.

-¿que tal todo?- se sorprendió al escuchar la voz de Simon. -te traje algo- dijo ofreciéndole una copa con Bloody Mary, la cuál recibió gustosamente sentándose en el sillón. -¿Sabes quienes fueron los que causaron todo?-.

-si- contesto con pesases -pero ya están muertos-.

-¿¡Los mataste!?- dijo Simón sorprendido a tal crueldad.

-No, no tuve el honor de asesinarlos yo- respondió con completa naturalidad y un poco de resentimiento, mientras el otro chico mantenía la boca abierta por sus palabras tan frías.

-¿y que piensas hacer?- preguntó el menor una vez pudo procesar todo lo que el otro decía.

-¿sobre que?-.

-sobre todo, los vampiros, la clave, los mundanos, tú y yo...- diciendo eso último más bajo.

-no es seguro hablar aquí- dijo Raphael tomando del brazo a Simon y dirigiéndolo fuera del hotel.

-eh, ¿a donde vamos?- exclamó intentando no perder el equilibrio mientras era jalado.

-me acompañaras a hablar con los shadow hunters, tú les agradas más, a algunos, y en el camino hablaremos sin ser escuchados por otros vampiros chismosos- dijo antes de correr a la velocidad vampiro, Simon intento seguirle el paso, pero al ser inexperto se le dificultaba y decidió solo sujetarse de Raphael. Cuando llegaron al instituto, Simon se mantenía subido en la espalda del otro vampiro, y para su sorpresa ese otro vampiro no se quejó de eso, sino que le sujetaba de los pies para un mejor apoyo.

-dijiste que hablaríamos- mencionó Simon aún sobre su espalda.

-pensé que podrías correr bien, pero creo que te falta practicarlo-.

-gracias por recordarme mi falta de práctica vampirica- dijo Simon sarcásticamente -¿cuando vamos a hablar?-.

-Simon...- comenzó Raphael y bajo a Simon, después se sentó en un banco seguido por el menor. -al principio que te conocí me pareció que eras un mundano enfadoso y que no paraba de hablar-.

-si, me lo hiciste saber varias veces- Simon rió.

Raphael se mantuvo firme, y tomó la mano de Simon.

-pero ahora me parece... amm- le costaba decir 'esa' palabra -me parece... no me desagrada- intentó decir que le parecía lindo, pero las palabras no le salieron. Solo se mordió el labio algo sonrojado y volteó a otro lado para no ver que cara ponía Simon.

El castaño sonrió sonrojado, -tú tampoco me desagradas- dijo tomándole de la mano haciendo que este lo mirara.

Sus miradas eran profundas y fijas, se fueron acercando, su respiración chocaba, sus ojos se fueron cerrando, y la distancia disminuyendo, hasta el punto de que ya no había, rozaron sus labios por un momento, provocando una sensación de querer ser uno, en un beso. Y se besaron, sus labios se unieron en un desesperado beso lleno de amor.

Duro un par de minutos el beso, ninguno de los dos quería parar, pero tenían que, habían llegado al instituto con una misión, y tenían que cumplirla.

Sin decir nada, se entendieron con la mirada que ya debían entrar. Se levantaron y caminaron hasta la puerta principal.

Entraron y todo estaba echo un caos, gente caminando por aquí, por allá, corriendo, otro gritando órdenes y exigiendo cosas. Entonces una cara conocida apareció.

-¡clary!- le llamo Simon a su amiga, quien paro de caminar a no sé dónde, para ir con su amigo.

-¡Simon! Y... Raphael!- pronunciándose 'Raphael con un tono más pícaro, recordando lo que había descubierto la noche pasada.

-venimos en asuntos oficiales- mencionó serio Raphael, y pasó por un lado de la pelirroja, yendo en dirección a la oficina principal.

Ambos lo vieron partir y luego que lo perdieron de visto se miraron mutuamente.

-tiene un buen culo- dijo clary.

-¡no lo mires de ahí!- exclamó Simon un tanto celoso por a donde iba dirigida la mirada de su amiga.

***********
Holaaaaaa estaba en la playa sin internet, por eso no había subido antes este capítulo, pero me sirvió porque tome inspiración *-*

Aunque ya la perdí, ya a ver cómo le hago para el siguiente.

Espero les guste este capítulo y no olviden votar y comentar 😉

traje (saphael)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora