capitulo 13

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Meses despues.

Mi papá nunca apareció y ya hace un año que estoy aqui. Creo que no se esta molestando en buscarme. Pero no me importa mucho. Escucho golpes y voy a un paso acelerado y veo a Felix siendo golpeado por Pan.

-No podrás protegerla para siempre- gritó Pan con el labio partido- ella tuvo que ser mia desde el principio.

-Si la amaras de verdad, no la tendrías que obligar a que te ame. - dijo Felix mirandome- no puedes obligar a alguien que te ame.

-Yo si puedo- grito Pan- que es lo que tienes tu que yo no?

-El por lo menos tiene corazón- le grité con la poca fuerza que me quedaba.

-Te vas a arrepentir de esto- dijo Pan señalando a Felix.

El desapareció en una nube de humo negra y no lo vimos mas.

-Felix- dije en un hilo de voz.

- Tranquila no va a pasarme nada- dijo tranquilizandome.

-Pero Pan es capaz de hacer cualquier cosa. - dije quebrándome y con lo poco de voz que me quedaba.

-No lo voy a permitir- dijo acariciando mi mejilla. - No mientras estemos juntos. Te lo prometo.

Estábamos caminando con Felix por la jungla, hasta que siento un gran dolor en la panza. Sentí algo en mi entrepierna y ví que era un líquido blanquesino.

-Felix- chille- los bebés vienen.

-Vayamos con las hadas- dijo serio.

Pero entonces en ese momento, sentí una espada clavarse entre mi vientre y mi pecho.

-Pan! - grito Felix con fuerza.

-Si yo no puedo ser dueño de su vida, nadie lo hará- gritó mientras sacaba la espada de mi espalda y se iba.

-Felix... - dije casi agonizando.

-Tranquila- Dijo ayudándome a levantarme- hay que irnos ahora. No te voy a perder. Ni a los niños tampoco. Te lo juro.

Fuimos directo al arbol del polvillo y Felix me sentó apoyando mi espalda en la copa del gran arbol. El aviso a las hadas y vino Azul a toda velocidad.
Vino otro dolor mas y chille.

- Por suerte no le dio al bebé- dijo Campanita tranquilizandome.

-Consu, necesito que hagas fuerza- dijo Azul.

Felix me agarró la mano tranquilizandome y seguí las indicaciones que me daba azul. Salío primero mi pequeña Carolina, y despues mi querido Patricio.

-Consu, ya salieron- dijo azul.

Yo asentí y me lo dieron. Les di las gracias y me fui corriendo al Jolly Roger junto a Felix. Pase por la gran jungla hasta llegar a la playa. No pude seguir mas. Perdía mucha sangre no podía dar un paso mas. Con todas mis fuerzas llamé a las personas que siempre me ayudaron.

-Smith!!  Mary Margaret!!- chille- Smith, Mary Margaret!!

Me ardían los pulmones y no pudo  llamarlos mas.

Ví que una cabeza se asomaba y se me borró toda la vista. Mis bebes lloraban y caí al piso con Patricio y Carolina en brazos.
Lo último que escuche fue a Felix llamando a mi papá y unos pasos apresurados, antes de cerrar los ojos para siempre, o eso creía.

El Ultimo SuspiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora