Un Lobo en libertad/El secreto del enemigo

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Llegar a Tokio, no era complicado, pero vestido con harapos y montando una motocicleta, llamaba mucho la atencion, por suerte, tenia contactos fuera de Hell Gates.

-No se cuanto dure esta moto, pero debo llegar al punto de contacto antes que se movilicen.

debia desaparecer rapidamente, antes que el equipo omega le de caza y lo elimine, por lo que era imperioso pasar lo mas inadvertido. Condujo hasta llegar a la zona del puerto y entro dentro de una bodega abandonada, era alli donde se reuniria con su contacto. Apago el motor y bajo del vehiculo, esperando que alguien diera señal de vida.

-El famoso señor numero 9. un placer conocerlo

-Sal de tu escondite Shiro. tenemos que hablar...

detras de unas vigas de metal, un tipo salio caminando en direccion de Kaito. era su informante del exterior y la unica persona en la que podia confiar.

Shiro era un hombre de mediana edad. anteriormente, habia sido uno de los instructores de Kaito en Hells Gates, pero decidio abandonar ese sitio. promovio desde las sombras, diversas fugas, buscando al prospecto ideal que lo ayudaria a destruir a Amida Corps y lo encontro en Kaito.

-Bien hecho Kaito. es hora de movilizarnos, sigueme y antes, deshaste de esa mierda...

El joven obedecio de inmediato. tomo la moto y la dirigio con velocidad hacia el mar. en el momento preciso, salto del vehiculo y este siguio su curso hasta caer al oceano. con la tarea realizada, entro en el automovil de Shiro.

-Tengo un piso franco en medio de la ciudad. asi que no te preocupes de nada...

- Agradezco todo, pero esto no sera gratis verdad?

- Eres inteligente joven Kaito, lo supe apenas te conoci. por lo mismo hice que tu escaparas. los negocios los hablaremos apenas lleguemos al sitio.

el automovil se dirigio por largo tiempo al centro recidencial de Tokio. Aproximadamente una hora despues, el vehiculo se detuvo frente a un lujoso bloque de departamentos, entraron rapidamente y subieron al 3er piso. en el solo habia una puerta, todo el piso le pertenecia a Shiro, lo que sorprendio a Kaito. Shiro saco una tarjeta magnetica y la dirigio a la cerradura especial que habia instalado, la seguridad era escencial, a pesar de estar en un sector relativamente tranquilo.

-Adelante chico. quizas quieras descansar antes de que hablemos. Si deseas ducharte y cambiarte, en la habitacion hay ropa...

Asintiendo con la cabeza, Kaito se dirigio al baño, dispuesto a tomarse una ducha, habia que reponer energias y reordenar sus ideas. el escape, los planes a futuro y concretar sus objetivos, era lo unico que rondaba por su mente, por lo que se dispuso a bañarse. Se desvistio y entro a la ducha, de forma esponanea, abrio el grifo del agua helada, asi fue entrenado y de inmediato recordo que volvia a ser alguien, por lo que abrio el grifo del agua caliente y agradecio al cielo.

-esto si es vida. aun asi no hay tiempo para relajarme, hay negocios por discutir...

rapidamente se ducho y salio del baño, dirigiendose a la que seria su habitacion y dentro de ella, le tomo peso a la situacion. ya no era un pequeño cubiculo, aquella habitacion podria albergar facilmente 6 celdas de hells gates, solo que los objetos que se encontraban eran: una amplia cama de 2 plazas, un escritorio con una laptop, un televisor, un minicomponente y un gran armario. Al investigarlo, se percato que habian solo trajes formales y zapatos de traje, por lo que rapidamente se seco el cuerpo y se vistio.

En el living, lo esperaba Shiro junto con una carpeta y 2 vasos con agua. Kaito se sento en el sofa que quedaba libre, dipuesto a conversar.

- Algo me dice, que el contenido de ese sobre es muy importante

Okami Requiem: ToraDora!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora