Okami Requiem: ToraDora!

¡Super modelo!/Juego de Mascaras

-No puede ser... ¡¡es ella Taiga!!

-Ki...Kitamura...

Entrando al local y caminado hacia Taiga y Ryuuji, Kitamura se acercaba acompañado de una chica muy hermosa. Ambos lucían como una pareja perfecta: ella con una belleza envidiable y cuerpo a la altura de una modelo. El en cambio, con una mirada alegre, bien presentado y sonrisa blanca. Al llegar a la mesa de Taiga, saludo a ambos.

–Chicos, ¿cómo están? Quisiera presentarle a alguien...

-¿Ella... ella es... tu... novia? Preguntaba Ryuuji, con ciertas dudas, esperando a que Taiga no reaccionara mal. Sin embargo, ella se encontraba retraida y casi sin darle importancia al asunto.

-No, no, no. Ella es una amiga de la infancia... - Taiga cambio su expresión y los colores le volvieron al rostro. –Su nombre es Ami Kawashima...

En ese instante, Ami vio que ambos estaban viendo una revista en donde ella aparecia, cosa que le dio vergüenza y se limito a sonreír.

-Mucho gusto. Vaya, estaban viendo esa revista. Es la ultima edición y tuve que modelar aquellos accesorios y vestimenta. No me gusta salir y hablar mucho de ello, ya que de por si es difícil no ser reconocida en la calle.

Ryuuji asentia, mientras Taiga la estudiaba con atención. Algo era muy extraño en ella y lo iba a descubrir. Podriamos llamarlo... intuición femenina o sexto sentido, pero era algo en que la pequeña confiaba, ya que le habia servido para distinguir en quien confiar y en quien no. Y Ami estaba entrando en la segunda opción.

-Supongo que debe ser complicado trabajar y estudiar al mismo tiempo.- preguntaba el peliazul de Ryuuji, como para tratar de entrar en confianza.

-Bueno... es un poco complicado... podríamos decir que soy una especie de... cabeza de chorlito- Decia Ami, dándose un suave golpe en la cabeza. La conversación fluyó entre los tres, mientras Taiga seguía viendo su revista, hasta que Kitamura se levanto y le dijo a Ryuuji...

-Ven, acompañame un momento al baño...

-Ohh... esta bien Kitamura...

Los chicos enfilaron al baño, dejando a las chicas solas en la mesa. Ambas se encontraban de frente pero no se dirgian la palabra, mientras Ami bebia su refresco mirando hacia la ventana, Taiga saco su móvil y le mandaba un mensaje de texto a su amiga Minori. Antes de llegar al baño, Kitamura detuvo a Takasu y le solicito esconderse.

-Oye, ¿por qué nos escondemos? – al mismo tiempo, era silenciado por Kitamura que solo le pedia que observase la situación.

-Quiero que Ami se de cuenta de algo. Que el mundo no gira en torno a ella y que no puede vivir con 2 rostros distintos.

-¿a que demonios te refieres?

-shhh, solo observa...

En ese momento, Ami cambiaba su expresión angelical, en una mas relajada y soberbia. Observo a Taiga y le extendió su vaso vacío.

-Oye, tráeme más jugo.-Taiga no dejo de revisar su móvil y menos le hizo caso a la orden de la chica, cosa que molesto a Ami.

-¿Acaso no me escuchaste enana?

Taiga levanto su mirada hacia la modelo y sin cambiar su expresión le respondió con total tranquilidad: -Esto es auto servicio. Párate y ve a servirte mas...

Ami la vio con recelo, pero cambio su expresión a una risa ironica... -¿El chico que te acompaña, es tu novio? Si es asi, le dire a el que lo haga...

-El no es mi novio, es mi amigo. Y aun asi, no creo que te haga caso...

-Los chicos son idiotas. Si sabes como tratarlos, ellos harán cualquier cosa por ti...

*Paafff*

Una sonora cachetada se escucho en todo el restaurant. Taiga le dio de pleno en el rostro de Ami, que con asombro se llevo su mano izquierda a la cara, mientras la castañita volvia a su Celular.

-¿Cómo te atreves a hace eso?

-Oh, tenias un mosquito y lo quite por ti...

Ami se acerco a Taiga y en voz baja le dijo: -Vi como mirabas a Kitamura...- Taiga cambio su expresión a preocupación ante el comentario de la modelo.- Una chica reconoce cuando a otra le gusta a alguien y se que te gusta a Yusaku. Ve preparándote, pues le diré que me golpeaste y el te va a odiar...

Taiga no sabia que hacer. Su mente estaba en blanco y para peor, la habían amenazado con decirle a su amigo de que se habia comportado mal. En el otro extremo, Ambos amigos veian la escena. Ryuuji estaba preocupado de la actitud de Taiga sobre Ami, pero Kitamura lo tranquilizó.

-Sabía que esto iba a ocurrir. Ami tiene esa mala costumbre: tiene 2 rostros ante la gente. Una es angelical, servicial y actitud de una completa tonta. El segundo es el verdadero rostro, ironica, conflictiva y soberbia. Desde que nos conocimos que ella es asi y siempre le ha costado hacer amigos. Quiero que ella deje ese estúpido juego de mascaras y sea como es realmente. Volvamos a la mesa mejor.

Impresionado por lo descrito por su amigo, Takasu se limito a seguir a Kitamura y cuando llegaron, Ami habia ya armado su teatro. Comenzó a llorar como una magdalena mientras se sobaba su rostro con la mano izquierda.

-Yusaku, tu amiga es una animal... ¡me golpeo sin razón! – le informaba la modelo mientras le dedicaba un puchero al chico de anteojos. De inmediato Taiga se levanto de su puesto con una furia única y trataba de defenderse...

-Eso no es cierto... yo solo...

-Tranquilas, todo esta bien- La interrumpia Kitamura, mientras ayudaba a levantarse a Ami de su puesto. –Sera mejor que nos vayamos. Mi madre nos invito a comer y ya estamos en la hora. Nos vemos chicos, pásenla bien y no se preocupen por nada.

Ami y Kitamura dejaron el lugar rápidamente, mientras Taiga era un manojo de nervios y no sabia como interpretar los dichos de Kitamura. Rapidamente le dirigio una mirada preocupada a Ryuuji

-Yo... yo no le hice... nada... debes creerme...

-¿Realmente no le hiciste nada como para hacerla llorar, Taiga? Le decía Takasu a la pequeña. Era la primera vez en el que él tenia el control de la situación y miraba a Taiga que en su rostro se reflejaba pena y preocupación.

-¿acaso tu también le crees a esa arpía?

Takasu se volvió a sentar frente a ella, tomo ambas manos de la pequeña y con total tranquilidad le respondió- quédate tranquila. Vimos todo desde un escondite cerca del baño. Creo que tu reacción la descoloco y es mas, a Kitamura le gusto tu actuar. Ella tiene un grave problema de actitud y el cree que debe conocer a la gente con su verdadera personalidad.

Aun con el sonrojo presente en su rostro y con las manos tomadas por Takasu, la pequeña se limito a decir:

-Gracias... Ryuuji.