Prioridades/¡Trabajemos juntos!

59 3 1
                                    

Ryuuji contemplo a ambos chicos estrechar sus manos con una sonrisa en sus rostros y con esto, Kaito logró acercarse a Taiga, así podría realizar la tarea designada por Shiro. Ahora solo le quedaban 2 pendientes: 1) Averiguar el estado de Minori y 2) Saldar cuentas con Joseph Strantz, asi que debía pensar con cuidado que misión realizar primero. Hoy era viernes y según la información de Masaru, Joseph estaría en el Pharaoh Garden, ya que era su prioridad, decidió ir por el último miembro de su BlackList. Recordó que en su Mitsubishi 3000GT tenía un regalo en el maletero, asi que bajo rápidamente a comprobar y efectivamente encontró un maletín negro que tomo para despues subir a su departamento a revisar su contenido. Cuando llego al 3er piso, se encontró con alguien esperándolo en la puerta de su casa, era Taiga la que se encontraba seria y definitivamente no parecía feliz además de estar muy inquieta. Cuando volteo a ver la puerta del ascensor, Taiga cambio su rostro demostrando preocupación y necesitaba urgentemente hablar con el joven.

-Kaito… necesito hablar contigo… es urgente.

-¿Cómo supiste que vivía aquí?

-Tengo mis contactos en la escuela… dejemos eso para después... Se trata sobre Minori…

-Minori… bien, entremos a mi departamento…

Ambos chicos entraron al apartamento y Taiga se sentó rápidamente en uno de los sillones, al mismo tiempo, Kaito paso a su habitación y guardo bien el maletín negro. La castaña se percató del bolso que guardo el chico pero no quiso incomodarlo. El Pelinegro le ofreció algo para tomar y Taiga accedió al jugo de Manzana, que le sirvió en tiempo record. La pequeña tomo un poco del refresco y comenzó a hablar.

-Como te dije, necesito tu ayuda. Minori… está en problemas…

-Espera, ¿Cómo sabes que realmente está mal?

Taiga saco su móvil y reprodujo una grabación que tenía.-Presta atención a esto…

“Taiga… otra vez sucedió… me… me ha golpeado y mamá lo permitió. No fui a la escuela por lo mismo, quede llena de golpes en mi cuerpo. Ya no sé qué hacer… tengo miedo… ayúdame…”

Kaito quedo helado por lo relatado por Minori y luego recordó la reacción de ella cuando le impidió acompañarla a su casa.

FlashBack:

La pelirroja realizaba una reverencia a otra, hasta que Kaito la detuvo.

-Tranquila, creo que lo mejor sea que lleguemos pronto a tu casa. Tus padres deben estar muy preocupados…

-Tienes razón. Si quieres, puedes dejarme aquí. Mi casa queda a 2 manzanas desde este lugar.

-¿Estas segura que no quieres que hable con ellos?… lo digo por…

-NOOOOO!!! –la chica gritó de los nervios. Rápidamente se dio cuenta de su error y se tranquilizó. –ya… habrá tiempo para ello. Mejor me voy, gracias por todo… Kaito-kun…

-Adios Kushieda…

Fin FlashBack

Taiga observaba a Kaito que seguía pensando en lo ocurrido, ahora no estaba tan seguro en asaltar el Pharaoh’s Garden y pensaba seriamente en sacar a Minori de lo que se suponía era su hogar, después de todo, negarse a la petición de la castañita era un riesgo que no se podía permitir. Por otro lado, posponer nuevamente el plan inicial podría traer consecuencias, siempre y cuando Joseph se traslade a otro lugar. De pronto, su móvil sonó justo para que lo hiciera volver a la realidad.

-¿Diga?

-Kaito… habla Masaru. Tengo noticias del Pharaoh’s Garden...

Dentro de la mente del chico pasaba de todo: cambios de planes, que Joseph cerrara el local o se trasladara fuera del país tratando de escapar…

-“Demonios… que no sea nada malo…”

-¿Qué sucede con el local de Strantz?

-El local está operativo, pero él no ira hoy. Creo que tuvo un inconveniente de última hora, por lo que la próxima semana hará acto de presencia. Eso ya está confirmado…

-Gracias Masaru por la información.- Kaito corto la comunicación con una sonrisa fría, que noto perfectamente Taiga, la cual no dudo en preguntar.

-¿Se puede saber por qué ríes y que es eso de Pharaoh’s Garden?

El chico había olvidado que la castaña estaba en su departamento además la mirada seria que le propinaba no era como para evadir las preguntas. Comenzó a pensar las maneras de evitar hablar sobre el tema, pero por lo poco que la conocía, era imposible dejarla con las dudas y de una forma u otra, se terminaría enterando de todo.

-¿Sabes Taiga? Todos tenemos secretos… tú… ¿sabes ocultar los tuyos?

-¿De qué rayos estás hablando?


Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 22, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Okami Requiem: ToraDora!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora