Acercamiento/¡Defendamos a nuestro amigo!

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Esa semana fue extraña para Taiga y Ryuuji, ya que Minori no estuvo presente en la escuela, pero para Kaito solo había algo en mente: “Joseph Stantz”, su primer objetivo dentro de su Blacklist personal. Ya con todos los antecedentes recopilados se preparaba para el asalto, solo pedía que todo resultase bien y no tuviese ningún percance hasta que de la nada, una cabellera castaña se posicionó frente a él y eso lo sacó de su trance.
-Hey, sé que no te caigo bien pero… necesito de tu… ayuda…- Le decía Taiga con una mirada seria.
-¿y quién dice que me caes así, Aisaka?- Le respondía Kaito con una sonrisa.
-Eso no importa ahora… solo quiero que me ayudes en algo… ¿es posible?
-Si está en mi alcance… Por supuesto. Cuéntame, ¿Qué necesitas?
Taiga se debatía en hablar con aquel chico “raro” como le decía ella, pero no tenía otra opción, ya que era de los pocos chicos que Minori tenía contacto. Sobre todo en la última semana, donde se vieron juntos, demasiado para ella.
-¿Sabes por qué Minorin no ha venido toda esta semana?
-La verdad, no lo sé. Quizás se ha enfermado…
-Lo dudo –Respondía de inmediato la pequeña.- Ella rara vez se enferma y si es así, suele venir de igual forma… me preocupa…
-¿piensas que le ha sucedido algo?- Kaito cambio su expresión a una mas seria. Recordo el ultimo incidente y pensaba que su herida se hubiese resentido a tal grado de no poder asistir a clases.
-Solo quería saber si… sabias algo, pero creo que no sabes nada de ella… no importa y… disculpa por, molestarte… - a la vez que Taiga se levantaba y se retiraba.
Kaito de inmediato le tomo su mano y la detuvo. Taiga se dio vuelta con una vista furiosa, ya que nadie se atrevia a tocarla, a la vez que apretaba su mano en forma de puño dispuesta a atacarlo. Al momento de intentar golpear a Kaito, este la detuvo y se posiciono cerca de ella, estando a la altura de su oído, le susurró: -Aisaka, ¿sabes dónde vive Minori? Quiero verla…- La castañita se impresiono del cambio de actitud del chico raro y no sabía como responder. En ese momento, Kitamura entro corriendo al salón con desesperación y se dirigió a Taiga.
-¡¡Aisaka!! Necesito tu ayuda… es… Ryuuji…
-¿Queeee? – al instante salió corriendo del aula junto con Kitamura. Kaito quedo con la duda y de igual forma los siguió. Cuando logro alcanzarlos, trato de saber la razón de la actitud de ambos estudiantes. -¿Alguien podría decirme que demonios pasa? Taiga con su rostro hecho furia solo le respondía: -¿Qué haces aquí raro?- Kitamura trato de calmar los ánimos de ambos y le conto: -Ryuuji siempre ha tenido problemas por su aspecto, pero ahora es más grave. Lo vienen a buscar desde otra escuela y de esta no creo que salga bien parado…
Cuando los 3 llegaron a la parte trasera del gimnasio, vieron a Ryuuji rodeado de 10 Chicos que no eran de su escuela. Uno de ellos trataba de intimidarlo: -Me dijeron que tu eres el que golpeó a mi hermano, junto con una chica. Tráela aquí para que sepa quién manda.- Takasu no entendía la situación hasta que recordó la última paliza que fue recibida, donde Taiga lo había salvado. Cambio su mirada a una más seria y solo respondió: -Ella no tiene nada que ver en esto. Yo soy el único responsable de todo…
Taiga se sorprendió y se sonrojó por lo dicho por su amigo. La estaba protegiendo a sabiendas de la golpiza que estaba por recibir, además, nadie nunca había hecho algo así por ella y estaba dispuesta a entrar a golpearlos a todos hasta que Kaito tomo la palabra.
-Kitamura, ve a buscar a un maestro y a la presidenta del consejo estudiantil. Hay que informar esto a todos. Taiga, ve con el… - El chico ignoraba la fireza de la pequeña.
-NO! Yo me quedo aquí. Yusaku, ve y haz lo que dijo Azuma…
-Bien, cuídense chicos. – Kitamura dejo el lugar para hacer lo pedido por Taiga. Kaito se preparaba para quitarse su chaqueta, mientras la castaña removia su hermoso cabello y de su espalda sacaba una espada de madera, a su vez no quitaba su mirada furiosa del horizonte, donde los 10 que rodeaban a Takasu, lo habían comenzado a golpear. –No quiero que te metas en mis problemas…- En ese instante, comenzó a correr como endemoniada a salvar a Ryuuji. Kaito no se quiso quedar de espectador y siguió a Aisaka para ayudar a su amigo. Ambos noquearon a 2 estudiantes rápidamente y quedaron en medio del circulo que se había formado alrededor de Takasu para protegerlo, cubriéndose las espaldas mutuamente.
-¡Te dije que no te metieras, raro!
-¡Kaito para los amigos!  Si me meto en tus problemas, es para ayudar a mi amigo…
Takasu estaba seminconsciente y logro divisar a ambos chicos como peleaban con los matones, hasta que no dio más y se desmayó. Taiga se percató del hecho y se asustó.
–Ryuuji!!!
-Mierda, perdió la conciencia. Aisaka, hay que terminar esto Ya!
Ambos chicos terminaron de noquear a los restantes 8 y verificaron el estado de su amigo, justo en ese momento, llego Kitamura junto al maestro de ed. Fisica, la presidenta del consejo estudiantil: Sumire Kano y el director Daigo Sakazaki. Al ver el mal estado de Takasu, el profesor se acercó a él y lo llevo a la enfermería. Sumire, sin perder la compostura, se dirigió a uno de los estudiantes que estaban en el suelo y reconoció el uniforme que portaba.
-Director. Estos estudiantes pertenecen a Today Gakuen, famosa por tener alumnos conflictivos. Hay que tomar medidas para evitar que se vuelva a repetir. – El director asintió y dirigió la mirada a Taiga que se encontraba junto a Kaito. –Les agradezco lo hecho, pero aun así, debo hablar con ustedes en privado. Vamos a mi despacho.
Taiga agacho la cabeza y comenzó a caminar detrás del director y Kaito se posiciono a su costado con una sonrisa segura, cosa que descoloco a la castañita. -¿Qué es lo gracioso Kaito? Estamos en serios problemas…
Sin quitar la sonrisa, el chico le respondió: -Tú tranquila, que no has hecho nada malo… y mira eso –mientras apuntaba a los alumnos que se habían agolpado a ver la pelea. Estos vitoreaban a ambos chicos por su actuar.
-¡¡Muy buena pelea!!!- Gritaban unos estudiantes
-¡¡¡Son los mejores, Gracias!!! – Gritaba una chica.
-¡¡¡Ese es el poder de la Tigre de Bolsillo!!! –Exclamaba el capitán del club de Judo.
-Lobo Solitario, ¿quieres salir con nosotras? Gritaban un grupo de chicas a Kaito.
-¡¡Aisaka!!! ¿Quieres ser mi novia? – Gritaba un chico de la multitud –¡¡No!!! Se mejor mi novia- decía otro, produciendo una serie de discusiones. Taiga miraba sorprendida la situación y Kaito quedo pensativo… -Lobo Solitario, me agrada el apodo…
Cuando llegaron los 3 a la oficina, se encerraron a comentar lo sucedido. Taiga se limitó a explicar su actuar y Kaito la defendía, indicando que solo reacciono así por los golpes que recibía su amigo.
-Director Sakazaki- Hablaba Kaito- si no interveníamos, esto pudo haber terminado peor. Aisaka y yo hicimos lo que creímos mejor, por lo que optamos por proteger a Takasu hasta que llegaran ustedes…
-Cierto señor Director – expreso Taiga, con la mirada cabizbaja. Sabía que para ella se venía un castigo muy grande, por ser una alumna conflictiva, pero para su sorpresa, Kaito manejaba la situación como un verdadero negociador. El director asintió y comenzó a explicar su resolución:
-Por muy buena intención que hayan tenido, debo castigarlos a ambos. La castañita ya se preparaba para lo peor.
– ¿Me… expulsaran? – le preguntaba con los ojos llorosos.

Okami Requiem: ToraDora!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora